Lima fue la semana pasada sede de una nueva cumbre del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC) y, como es tradicional, escenario del encuentro de representantes del mundo empresarial de las 21 economías del bloque.
Esta vez el Consejo Asesor Empresarial de APEC (ABAC) se reunió bajo el lema “Gente. Negocio. Prosperidad”, pero en un contexto internacional marcado por el que será el regreso a la Presidencia de Estados Unidos de Donald Trump, quien ha anticipado un aumento de los aranceles a China.
Una dimensión de la que se hizo eco la ABAC, según explicó la secretaria ejecutiva del capítulo chileno, Loreto Leyton, quien precisó que el informe de recomendaciones del organismo a los líderes de la APEC comenzó este año con una alusión directa a las aprensiones generadas por el auge del proteccionismo. .
“El proteccionismo, el unilateralismo y la fragmentación están aumentando. Se necesitan acciones decisivas para garantizar un fuerte crecimiento en la región de APEC y el logro de la Visión 2040 de APEC Putrajaya”, afirmaron los ABAC en su carta. Y lo hicieron en un marco en el que ven que la economía global experimenta una recuperación lenta y constante, pero con desafíos como una inflación persistente, disparidades en el crecimiento, aumento de las tasas de interés y el impulso de las inversiones verdes.
Leyton recordó, dadas las aprensiones sobre las medidas proteccionistas durante años, que las medidas para evitarlas y mitigarlas están en la agenda. Por ejemplo, reformas necesarias a la Organización Mundial del Comercio (OMC) para que siga siendo una institución útil en la promoción y protección del comercio libre y justo.
los temas
Otros temas abordados por el Consejo ABAC se centraron esta vez en priorizar las necesidades de las micro, pequeñas y medianas empresas, con énfasis en las mujeres y los emprendedores indígenas, además de promover la digitalización y el acceso equitativo al financiamiento.
“La idea es asegurar que grupos tradicionalmente excluidos tengan acceso a financiamiento y apoyo para que puedan desarrollarse y ser un aporte a la economía”, dijo el presidente de EY y miembro de ABAC Chile, Cristián Lefevre.
Asimismo, indicó, se estableció como lineamiento que el comercio electrónico establezca marcos regulatorios interoperables que puedan garantizar flujos de datos confiables que favorezcan su desarrollo. Para la inteligencia artificial se buscará el desarrollo de marcos de gobernanza responsable con énfasis en la inclusión y la ética.
El trabajo también cobró importancia, afirmó la directora de Kodea y miembro de ABAC, Mónica Retamal. “Este año Perú propuso al consejo el desafío de trabajar el tema de la informalidad y generamos un estudio en el que participé para proponer caminos de solución aprovechando la disrupción tecnológica”, anotó. Aquí, destacó, las nuevas tecnologías podrían apoyar la formalización.
“En mi caso, estoy impulsando que en el frente de las habilidades digitales podamos generar un acuerdo de transferencia con países como Singapur, que tienen proyectos maduros de upskilling digital (enseñanza de nuevas habilidades) o reskilling (reentrenamiento) y así poder impulsar a nuestra fuerza laboral de verdad. vivir una reconversión”, afirmó.
Más colaboración
El papel de APEC en la economía chilena es “clave”, dijo Leyton, ya que ha demostrado ser una reunión eficiente, que convoca y pide acuerdos a pesar de su carácter no vinculante. “Este foro, quizás como ningún otro en el mundo, moviliza acuerdos y promueve la colaboración, lo que en general ha ayudado a desbloquear procesos y socializar mejores prácticas”, destacó.
Retamal dijo que el foro “es un compromiso realmente crítico para Chile”, dado que dos de los principales actores son Estados Unidos y China.
“Chile aquí, en este contexto, apuesta gran parte de su estrategia inversora y, por tanto, su apuesta al desarrollo. Mirar hacia Asia, mirar hacia la región del Pacífico es sin duda el futuro”, afirmó.
Y agregó que los avances en acuerdos económicos, que facilitan el desarrollo de la economía, también deben ser aprovechados por los empresarios chilenos.
“También hay un desafío que tiene que ver con seguir impulsando toda esta red de acuerdos internacionales con empresarios locales y eso significa que Chile siga trabajando en una oferta exportadora. Ojalá en los servicios, que es donde podríamos marcar la diferencia”, afirma.
