“Aunque la mayoría de los chilenos se declaran satisfechos con su vida en general, una fuerte incomodidad persiste con respecto a su situación financiera, especialmente en ahorros, inversiones y capacidad para llegar a fin de mes”.
Este y otros resultados son parte de un estudio realizado por la Asociación de Cajas de Compensación y cajas de Chile, en colaboración con Cadem, para conocer la percepción de las personas sobre la protección social en el país, las brechas, las prioridades y los nuevos desafíos.
El resultado de la encuesta sobre la calidad de vida es generalmente satisfactoria para los participantes (el 77% la evalúa bien o excelente). Sin embargo, Al abordar problemas específicos, esta evaluación comienza con matices.
Por ejemplo, el 45% de los chilenos evalúan su pozo financiero como bueno o excelente (notas 5 a 7), pero la mayoría, el 54% lo califica como deficiente (Notas 1 a 4).
Además, los resultados muestran que la capacidad de ahorro en Chile es limitada: mientras que el 70% no está satisfecho con su capacidad de ahorrar, solo el 26% siente que pueden ahorrar mensualmente.
Un hecho importante que revela la encuesta es la relación entre el pozo financiero y la salud mental. Entre aquellos que declaran tener un buen bien financiero de salud mental, el Being alcanza el 63%; Por otro lado, entre aquellos que no están satisfechos con su salud mental, Estos datos disminuyen al 19%.
“La encuesta confirma la estrecha relación que existe entre el pozo financiero y la salud mental de las personas. Son datos muy interesantes y muy útiles para que las autoridades y organizaciones aborden de manera integral el tema del pozo de las personas”, dijo el gerente general de Cadem, Roberto Izikson.
En resumen, solo 4 de cada 10 chilenos declaran tener un bien financiero y mental simultáneamente, y esta proporción cae dramáticamente entre los jóvenes y los sectores intermedios y bajos.
Instituciones más valiosas
Otro aspecto que mide la encuesta es la percepción que los chilenos tienen en los productos e instituciones financieras.
En relación con la primera categoría, los productos que contribuyen más o contribuyen al pozo financiero de acuerdo con los encuestados son: cuentas de ahorro (86%); inversiones o fondos mutuos (86%); Vista de cuenta, RUT, cheque electrónico (85%), cuenta de ahorro de jubilación (83%) y crédito social de cuadros de compensación (81%).
En cuanto a las instituciones, se destacan en la percepción de la contribución al pozo financiero: las empresas en general (75%), los bancos (68%) y las cajas de compensación (64%).
“El estudio confirma la importancia de los bancos de compensación en el pozo financiero de los chilenos. Se encuentra entre las tres instituciones más valoradas por la ciudadanía y el crédito social, un instrumento privilegiado de inclusión financiera, entre los cinco productos que proporcionan o contribuyen más contribuyendo a la salud financiera de la población”, dijo el presidente de Cajas de Chile, Marcelo Forni.
Forni agregó: “El impacto social de los múltiples beneficios que entregamos a nuestros afiliados es significativo y nos compromete a redoblar nuestro trabajo para continuar brindando beneficios en salud, educación, recreación y empleabilidad a la medida de las necesidades de nuestros trabajadores y pensionistas afiliados”.
Por lo tanto, la primera opción de las personas a enfrentar problemas financieros es recurrir al banco (44%), en segundo lugar, a un pariente (24%) y en tercer lugar a una caja de compensación (7%), como una alternativa de apoyo económico.
Al profundizar las funciones y beneficios de las cajas de compensación, el 19% de los encuestados afirman que actualmente tiene un préstamo social en cualquiera de estas instituciones.
Además, El 58% de las personas que conocen el crédito social lo valoran como una contribución significativa al bien financiero.
Los atributos más valorados del crédito social son el descuento de cuotas por formulario (49%), facilidad de acceso (37%) y condiciones económicas favorables (18%).
En general, las cajas de compensación se perciben como entidades con un impacto positivo, especialmente en segmentos de ingresos medianos y bajos, destacando para facilitar el acceso y la estabilidad en el pago de créditos, además de otros beneficios económicos en diferentes campos, como salud, educación, recreación y bonos.
Con respecto a la valoración de estas entidades, el gerente general de Cadem agregó: “Creemos que esto se explica por su gran cantidad de afiliados, su cobertura territorial y su capilaridad y la cantidad y calidad de los beneficios que otorgan”.