Durante el día de este sábado la muerte de Rosario Guzmán errázuriz (79), periodista, escritor chileno y Hermana del ex senador y fundador de la UDI, Jaime Guzmán errázurizquien era ideólogo de la dictadura militar, asesinada por el Frente Patriótico de Manuel Rodríguez (FPMR).
Formado como periodista de la Pontificia Universidad Católica de Chile, Rosario trabajó en varios medios nacionales, destacando su pluma sensible, centrada en historias humanas y un estilo directo que también se reflejó en sus trabajos personales.
En 1991, después del asesinato de su hermano a manos del frente patriótico Manuel Rodríguez, publicó el libro “Mi hermano Jaime“, Un texto que combina una crónica íntima con un testimonio histórico. Lejos de idealizarlo, Rosario muestra a Jaime como un ser humano complejoprofundamente comprometido con sus creencias, intelectualmente brillante, pero también solitario, vulnerable y temeroso de las tensiones generadas por su papel político.
La publicación fue un hito editorial por su tono humano en medio del duelo nacional y la politización del crimen.
En sus páginas, Rosario explora no solo el impacto de la muerte de su hermano en la familia, sino también sus propias contradicciones frente a su figura: Lo amaba como hermana, pero no compartía su ideología o el papel que desempeñó en la consolidación del régimen de Pinochet. Esto la convirtió en una figura incómoda para los sectores más difíciles de la derecha.
Carta de controversia
En 2016, en una carta publicada en El terceroel profesional Señaló directamente contra Augusto Pinochet y la cabeza de Dina, Manuel ContrerasPor haber creado las condiciones que desencadenaron el asesinato de su hermano, habiendo establecido una cultura de odio, miedo y violencia.
En ese momento, su mensaje era abrumador: “La cara de alivio de Pinochet era imposible de esconderse”
Estas declaraciones generaron controversia dentro del UDI, una fiesta que recuerda el legado de Jaime Guzmán como mártir de la derecha chilena.
En 2021, ocupó el espacio público cuando presentó una queja después del Vandalización de la tumba de su hermano En el cementerio general, calificar el hecho como una agresión simbólica no solo contra su familia, sino también contra la historia reciente del país.
Sin embargo, en sus declaraciones también insistió en la necesidad de “Humanizar Jaime“, Mirarlo más allá del carácter político, como una persona que vivía con angustia y contradicciones.
A pesar de sus intervenciones públicas, Rosario Guzmán siguió siendo una figura distante de los partidos políticos, pero cerca de las discusiones éticas sobre Memoria, verdad y reconciliación. A través de su escritura y declaraciones públicas, ocupó una posición crítica, no solo con respecto a la izquierda armada que mató a su hermano, sino también frente a la derecha de que, en su opinión, lo usó como un emblema y escudo sin reconocer su humanidad.