Sr. Director:
El aumento dramático en homicidios de niños y adolescentes es una señal de alarma que requiere una respuesta urgente. En 2024 hubo un registro histórico de 76 muertes, 15.2% más que el año anterior. Más allá de las cifras, refleja una vulnerabilidad creciente de los menores, especialmente cuando casi la mitad de estos casos está directamente vinculada al crimen organizado.
Ante esta situación, la creación del grupo de trabajo sobre el reclutamiento temprano es un paso crucial. Esta iniciativa, que reúne a entidades públicas y privadas, cambia el enfoque de la simple reacción a la intervención en causas estructurales que permiten a las organizaciones criminales victimizar a los menores. Un problema tan complejo requiere la colaboración de múltiples sectores.
El verdadero éxito de esta fuerza no se medirá solo por la reducción de las figuras, sino por las vidas y trayectorias salvadas de los jóvenes que pueden redirigir. Es imperativo actuar con determinación: fortalecer las familias, mejorar las oportunidades educativas y recuperar espacios públicos, crear entornos seguros para que los niños y los adolescentes puedan prosperar. Es un compromiso que nos desafía a todos como sociedad.
Juan Castañeda
Científico político y académico
Universidad autónoma