Adriano vuelve a ser noticia. Ahora no por algo extradeportivo, como viene siendo tendencia en los últimos años. El Emperador sorprende organizando un partido de despedida. Aunque su carrera terminó en 2016, cuando jugaba en el Miami United de la MLS, decidió que era momento de ponerle el broche final a una carrera que, en su momento, lo llevó a ser uno de los delanteros más cotizados de la historia. el mundo. . El brasileño pasa sus días en la favela Vila Cruzeiro, en Río de Janeiro.
El exdelantero también impresiona al incluir a David Pizarto en su convocatoria. Fueron compañeros en Inter de Milán y en la Roma (temporada 2010-11). La lista también incluye nombres como Marco Materazzi, Iván Córdova, Nicolás Burdisso, Carlos Gamarra, Maxwell, Maicon, Julio César, Vagner Love y Zé Roberto. El partido se llevará a cabo el 15 de diciembre, nada menos que en el estadio Maracaná.

Durante el último mes, Adriano volvió a las portadas. No por sus goles. Una imagen de él se volvió viral. Estaba borracho en la favela donde vive. Semanas después de la inscripción, el exdelantero rompió su silencio y publicó una emotiva carta explicando las decisiones que lo han llevado a tener una vida alejada del alto rendimiento y reveló sus problemas con el alcohol. “No tomo drogas, como intentan demostrar. No me gusta el crimen, pero por supuesto que podría haberlo hecho. No me gusta salir a fiestas. Siempre voy al mismo lugar de mi barrio, el quiosco Naná. Si quieres conocerme, acércate. Bebo cada dos días, sí. (Y los otros días también.) ¿Cómo llega una persona como yo al punto de beber casi todos los días? No me gusta dar explicaciones a los demás. Pero aquí hay uno. Bebo porque no es fácil ser una promesa que queda endeudada. Y a mi edad la cosa empeora”escribió.
En su reflexión abordó la presión que siente por ser una promesa incumplida. “¿Sabes lo que se siente al ser una promesa? Lo sé. Incluso una promesa incumplida. El mayor desperdicio del fútbol: yo. Me gusta esa palabra, desperdicio. No sólo por cómo suena, sino porque estoy obsesionado con desperdiciar mi vida. Estoy bien así, en un desperdicio frenético. “Disfruto de este estigma”, dice.
El que alguna vez fue calificado como el sucesor de Ronaldo asegura que se siente tranquilo con su día a día. “Ahora lo ves por ti mismo. ¿Hay algo malo en cómo estamos aquí? No. Lamento decepcionarte. Pero lo único que busco en Vila Cruzeiro es paz. Aquí camino descalzo y sin camiseta, sólo en pantalón corto. Juego dominó, me siento en la acera, recuerdo mis cuentos de infancia, escucho música, bailo con mis amigos y duermo en el suelo. Veo a mi padre en cada uno de estos callejones. ¿Qué más quiero? Ni siquiera traigo mujeres aquí. Mucho menos me meto con chicas que son de mi comunidad. Porque sólo quiero estar en paz y recordar mi esencia. Por eso sigo volviendo aquí. Aquí soy verdaderamente respetado. Aquí está mi historia. Aquí aprendí qué es comunidad. Vila Cruzeiro no es el mejor lugar del mundo. Vila Cruzeiro es mi lugar”, concluyó.
