Su debut en la producción de hidrógeno verde materializó Colbún. Fenix, la filial peruana de la eléctrica de la familia Matte, inició hace una semana la operación de la primera planta del denominado “combustible del futuro” instalada en una central eléctrica a nivel nacional.
Sin dar luces de sus planes, la compañía impulsó el proyecto que demoró un año en desarrollarse e involucró una inversión por US$ 200 mil. Aunque es un cifra discreta, aseguraron desde Colbún a DF que se trata de su primera experiencia práctica que le permitirá a la firma y a sus clientes profundizar su conocimiento y experiencia del hidrógeno verde y sus usos como vector energético libre de emisiones.
El proyecto consistió en la implementación de una planta fotovoltaica y un electrolizador. La planta de hidrógeno está ubicada en la central termoeléctrica de Fenix en Chilca (cuya capacidad instalada es de 570 MW) y, con su puesta en operación, se calcula que la filial de Colbún en Perú generará 8.000 m3 de hidrógeno verde al año.
La nueva planta permitirá reemplazar el 100% del hidrógeno gris que consume la central. Además, la planta fotovoltaica asociada al proyecto proveerá la energía para los consumos del edificio administrativo ubicado en Chilca, al sur de Lima.
Si bien hace una semana Colbún comenzó a producir hidrógeno verde, la inauguración de la planta se realizó este jueves en Chilca.
Para Fenix, uno de los principales beneficios de su central de hidrógeno verde es la reducción de su huella de carbono en unas 70 toneladas de CO2 equivalente al año. También, permitirá a la empresa un ahorro de aproximadamente US$ 50 mil anuales debido al auto abastecimiento de hidrógeno, el cual servirá para refrigerar los generadores de la central térmica en Chilca.
Además, se utilizará el agua de mar desmineralizada empleada para los procesos de generación eléctrica de la termoeléctrica en Chilca.
Potencial es lo que se advierte en las proyecciones respecto al hidrógeno verde en Perú, donde este combustible puede jugar un rol relevante en la descarbonización nacional. Según estudios de la Asociación Peruana de Hidrógeno (H2 Perú), el país tiene un amplio horizonte para desarrollar hidrógeno verde, aumentando su competitividad para los años 2040 y 2050.
Las regiones norte y sur de ese país son los principales potenciales centros de producción gracias a sus recursos renovables. Mientras, los principales centros de consumo se ubican en los departamentos de la costa y en la región sur de Perú donde operan empresas mineras y de manufactura, que representarían un alto potencial de penetración de hidrógeno como el reemplazo de combustibles fósiles.
Las principales aplicaciones en las que se espera una mayor demanda de hidrógeno verde para los próximos años son: movilidad (lideradas por camiones de alto tonelaje del sector minero y transporte marítimo) y la industria del amoníaco, cemento, acero y la petroquímica.
Perspectivas
Lo anunciado por Fenix en Perú va en línea con lo último informado por Colbún en materia de hidrógeno verde del año pasado. Cabe recordar que desarrollará un proyecto con este tipo de energía para la Central Termoeléctrica Nehuenco, ubicada en la Región de Valparaíso, cuya capacidad instalada es de 887 MW. La compañía compra hidrógeno gris para el proceso de refrigeración de sus unidades II y III de Nehuenco. Sin embargo, el proyecto -que involucra una inversión en torno a US$ 1 millón- habilitará un electrolizador propio y una pequeña planta solar para iniciar la producción hacia fines de 2024, permitiéndoles generar su propio hidrógeno verde en Nehuenco. Será el primer proyecto de su tipo en una central de generación en Chile.
Pero no solo eso. Los pasos de Fenix y Nehuenco siguen el plan de la firma que apunta a desarrollar el negocio de hidrógeno verde en proyectos para consumo interno (comenzando por ellos, pero también junto a clientes) e iniciativas de exportación.
José Ignacio Escobar, CEO de Colbún, indica que en la firma impulsan el hidrógeno verde “como un paso importante en la transición energética responsable; tenemos la convicción que es una de las mejores opciones para ir adaptando y modernizando las centrales en base a gas natural, considerando que este es el combustible mejor situado para apoyar la transición energética y el despliegue de las energías renovables”.
Con Fenix, añadió, “hemos logrado ser la primera central eléctrica del Perú que utilizará hidrógeno verde permitiendo así incorporar nuevas tecnologías para minimizar impactos ambientales”. Y aseguró: “Estamos enfocados en seguir impulsando el desarrollo de diversas aplicaciones de hidrógeno en la región, parte de la estrategia de Colbún de avanzar en la internacionalización de sus operaciones”.
Mientas, el gerente general de Fenix, Juan Miguel Cayo, afirmó: “Hemos dado este primer paso de generar nuestro propio hidrógeno verde. El siguiente es replicar este tipo de proyectos como soluciones de valor agregado para nuestros clientes, promoviendo así el uso de las energías renovables. El objetivo es explorar aplicaciones de hidrógeno en sus procesos operativos, buscando contribuir a sus objetivos de eficiencia y sostenibilidad”.
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