Congreso aprueba adhesión de Chile al Acuerdo de Escazú

Después de un largo camino legislativo, el Congreso Nacional aprobó la adhesión de Chile al Acuerdo de Escazúun tratado regional entre America latina y el caribe que busca mejorar la participación ciudadana y el acceso a la información ya la justicia en materia ambiental.

Fue el 18 de marzo cuando el presidente gabriel boric -en el marco de una de sus promesas de campaña-, envió al Parlamento con “extrema urgencia” el proyecto de acuerdo de ratificación, que fue aprobado el 11 de mayo en el Cámara de Diputados y, tras una revisión exitosa en otras instancias, fue deliberado este martes en el Senado.

La Cámara Alta convocó a sesión a las 16:00 horas para revisar el mensaje presidencial y, tras más de una hora de debate, fue refrendado entre aplausos. por 31 votos a favor, tres en contra y 11 abstenciones.

De esta manera, se resolvió definitivamente la adhesión del país al tratado, en una votación que fue clave para el gobierno, ad portas a la cuenta pública de este miércoles. Ahora, debe ser promulgada por el Presidente Boric, para luego comunicar la ratificación ante el Secretario General de las Naciones Unidas. A poco de 90 días de su oficialización, Chile será Estado Parteconvirtiéndose así en el país número 25 en firmarlo y el 13 en ratificarlo.

los ministros de medio ambiente, Maisa Rojas, y de Relaciones externas, antonia urrejola -quienes estuvieron presentes durante la instancia- celebraron el acuerdo adoptado por el Congreso.

El canciller Urrejola, tras la votación, aseguró que “esta es una votación histórica. Como gobierno y como representantes del Estado chileno, estamos felices y creemos que la adhesión a los Acuerdos de Escazú sí es un hecho histórico, porque Chile está regresando al multilateralismo en un momento en que su importancia está en duda. En tiempos de guerra, en tiempos de crisis climática, requerimos más que nunca del multilateralismo”.

“Chile va a ser parte de un acuerdo de un acuerdo, cuyo eje central –quiero insistir– es la cooperación. En los tiempos actuales de desafíos que traspasan fronteras, la cooperación y el multilateralismo son fundamentales”, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores, quien encabezó las gestiones del Ejecutivo para ratificar este acuerdo.

En tanto, el ministro Rojas agradeció la determinación de los senadores. “Este es un momento para celebrar (…) que estamos regresando al multilateralismo porque muy particularmente, por las crisis que estamos enfrentando, las soluciones hay que tomarlas en conjunto. Nadie puede resolver la crisis climática o la crisis de la biodiversidad, solo o solo. Aquí, o resolvemos las crisis juntos o simplemente no les dejamos a nuestros hijos e hijas un planeta habitable”, destacó el secretario de Estado.

“Con este tratado se fortalece la democracia ambiental y con ese fortalecimiento nos da herramientas para darle contenido, para cristalizar el compromiso del presidente Gabriel Boric de que este sea el primer gobierno ambientalista del país”, concluyó Rojas.

Posteriormente, Boric destacó la aprobación del tratado a través de su cuenta de Twitter. “Felicito a todos y cada uno de los que han luchado en diferentes frentes por la defensa de nuestro medio ambiente y la incorporación de Chile al acuerdo. ¡Seguimos avanzando en democracia ambiental! ”, manifestó.

Durante la intervención de los congresistas en la Cámara Alta, Red Edwards (republicanos) estaba en contra del acuerdo. “Creemos que Chile tiene una de las leyes más avanzadas del mundo, de hecho hemos sido pioneros en incorporar temas como la participación, la transparencia y el acceso a la justicia, argumentos que esgrimimos para ratificar este acuerdo. No vemos avances reales en la protección ambiental”, dijo Edwards, quien insistió en los problemas de soberanía territorial y judicialización de los casos. Además, en un comunicado posterior afirmó que si hubiera un presidente de su partido, derogaría ciertas disposiciones del acuerdo.

Ricardo Lagos Weber (PPD), En tanto, recordó que el acuerdo de Escazú se originó hace 10 años y destacó que Chile y Costa Rica lideraron el proceso de discusión. “Fue muy difícil unir voluntades en torno a generar voluntades en torno a generar un marco normativo internacional que tuviera en cuenta los derechos humanos ambientales (…) Creo que uno de los episodios más bochornosos de la diplomacia chilena se vivió durante la administración anterior”, manifestó sobre la decisión del gobierno del presidente Sebastián Piñera de no firmar el acuerdo.

“Es válido plantear dudas y preocupaciones sobre el alcance de un tratado, lo que pido es que aclaremos las noticias falsas y las cosas que no son ciertas”, dijo Lagos Weber.

Por su parte, el Senador Iván Moreira (UDI), Destacó la importancia del cuidado del medio ambiente, pero aseguró que “tenemos el deber de no poner en riesgo aspectos esenciales como la soberanía nacional o la igualdad ante la ley. Nuestra abstención es un recordatorio de los riesgos que puede tener este tratado internacional”.

el senador Juan Ignacio Latorre (RD) Afirmó que la crisis climática no responde a ideologías de izquierda ni de derecha y afirmó que muchas políticas en la materia “dejan mucho que desear” por lo que Escazú avalaría. “Lamentablemente América Latina es el continente más peligroso para los que defienden el medio ambiente, para los que denuncian contaminación o robo de agua, porque los asesinan (…) En Chile no hay ni datos ni registros públicos sobre defensores ambientales, “, dijo Latorre antes de comprometer su voto a favor.

El Acuerdo de Escazú busca garantizar un ambiente seguro y propicio para que quienes defienden y promueven los derechos humanos relacionados con el medio ambiente puedan actuar sin amenazasasí como proteger tres derechos básicos:

• los acceso a la información ambiental para que cualquiera pueda requerirlo en su dimensión pasiva o activa.
• los participación pública en los procesos de toma de decisiones ambientalescon el fin de monitorear posibles proyectos que puedan tener un impacto negativo en el medio ambiente, incluyendo aquellos que afecten la salud y asuntos ambientales de interés público.
• los acceso a la justicia ambientalpara que pueda ser promovida por cualquier persona y entregue garantías de debido proceso.

En su génesis, el acuerdo fue promovido por Chile y Costa Rica y el 4 de marzo de 2018 se acordó su texto. Seis meses después, en septiembre, tuvo lugar la ceremonia de firma del convenio, al que se suscribieron 24 países de la región.

Luego de ese hito, se dio un plazo de dos años -hasta el 26 de septiembre de 2020- para que estos países ratificaran el acuerdo, pero solo 12 de los firmantes lo hicieron: Antigua y Barbuda, Argentina, Bolivia, Ecuador, Guyana, México, Nicaragua, Panamá, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía y Uruguay.

Sin embargo, Chile fue restado, ya que la administración de Sebastián Piñera, quien durante su primer gobierno fue uno de los impulsores del tratado, anunció que no firmaría el documento. El 22 de abril de 2021 entró en vigor el tratado.

Tiempo después, luego de oficializar su candidatura presidencial, el ahora presidente Boric prometió durante su campaña la ratificación de Chile de los Acuerdos de Escazú. Lo que se concretó el 18 de marzo, una semana después de su debut en La Moneda.

En esa oportunidad, el Presidente firmó el proyecto de ley para ratificar el tratado y fue enviado al Congreso con “extrema urgencia”.