El compromiso del brasileño Gustavo Leal no funcionó en Everton. El equipo de Viñamarino trajo a un entrenador con experiencia en México, pero no resultó, porque los resultados no acompañaron. Pesó, de una manera, la eliminación en la primera fase de la Copa de América del Sur contra la Unión Española, en un penalti. El antiguo DT del Atlético San Luis dejó el cargo y en la última fecha del Torneo Nacional, Gustavo Dalsasso, en compañía de Julio Barroso.
Los Ruleteros ya tienen un nuevo entrenador. La incorporación de Mauricio Larriera, 54 años -old Uruguayan, se hizo oficial, quien regresa al fútbol local después de un paso irregular a través de O’Higgins de Rancagua. El 30 de junio de 2018, aterrizó en el Celestial, reemplazando a Gabriel Milito, pero su estadía dura tres meses, luego de la mala campaña.
El charrúa era futbolista y después de dejar la actividad se unió como Asistente del cuerpo técnico de Gerardo Pelusso. En ese trabajo estuvo en la Universidad de Chile, donde llegó a las semifinales de la Copa Libertadores de 2010, aunque a nivel local no fue bien (en esa temporada el campeón fue católico). Posteriormente, comenzó su camino como un título DT y pasó por Sol de América, Racing de Montevideo, defensor deportivo, a Wakrah de Qatar, Godoy Cruz, Danubio, Montevideo Wanderers, Peñool, Alianza Lima y Newell’s.
Miguel Torrecilla, presidente ejecutivo de Everton, dijo: “Mauricio es un técnico de primer nivel, con mucha experiencia en diferentes ligas, que ha obtenido varios títulos y reconocimientos. Además, él conoce el medio local, que debería facilitar su adaptación. “Luego agregó:” Es consciente de los objetivos que tenemos para el resto de la temporada y ya está trabajando con el equipo para obtenerlos. ”
Por su parte, Charrúa Larriera confesó sentir “Muy feliz de tomar esta decisión a la vez en mi camino como entrenador y como ser humano que creo que será beneficioso para todas las partes. Espero que logremos los objetivos que hemos establecido. “Obviamente son golpeados, lo cual es normal, porque no es una campaña esperada. Hemos atacado esos puntos y no ha sido muy difícil porque los niños aumentan rápidamente su estado de ánimo cuando se acercan otros objetivos. En el fútbol como en la vida, esto es caer, pero levantarse”.
Larriera firmó un contrato hasta el final de la temporada 2025. La misión principal es levantar un escuadrón poderoso pero está debajo de la mesa. Después de cinco fechas de la primera liga, el equipo de Viñamarino no ha ganado, con solo dos puntos y dos goles a favor.