Gloria Sáez (68) revela que pasó las últimas Navidades sola, únicamente acompañada de sus dos mascotas, su perra Perlita y su gata Zelda.
“No quería ir con mis hijos a arruinarles la Nochebuena. Todavía estoy muy angustiada y con ataques de llanto. Quería estar sola en mi casa. Estas fechas son especiales, porque el recuerdo viene y el dolor aumenta. He sentido pena por la muerte de mi madre, de mi padre, de mis hermanos, pero nunca la pena que había sentido por su muerte. Nada se compara con la partida de un compañero de vida”, dice en diálogo con Culto la mujer que estuvo con Tommy Rey durante 43 años, desde que lo conoció en un show en el asador santiagueño La Pachanga en 1982, momento en el que el enamoramiento fue inmediato y nunca más se separaron.
De hecho, fue ella quien lo acompañó cuando el 26 de marzo caminaban por Reñaca y el artista sufrió un infarto agudo de miocardio y un paro cardiorrespiratorio repentino que acabó con su vida. Tenía 80 años. Su muerte significó una de las pérdidas más significativas y sensibles de la cultura popular chilena en esta temporada.
Por ello, Sáez decidió que pasaría el pasado 24 de diciembre sola en el mismo departamento en Reñaca que compartía con Tommy Rey. el que sigue repleto de sus fotos, sus premios, sus imágenes y, en definitiva, su presencia. Incluso algo más: el armario aún guarda algunos de los outfits estelares que la cantante solía lucir en tantas noches de juego y fiesta en las últimas décadas.
“Me acosté como a las nueve de la noche”, cuenta Sáez sobre ese día: no quiso compartir con los tres hijos que tiene de un matrimonio anterior, ni con el único hijo que tuvo con el intérprete, Tommy Zúñiga Sáez.
Luego continúa: “La Navidad fue muy terrible, porque él estaba muy entusiasmado con esta fecha, le encantaba comprar regalos para sus nietos, sus hijos, ponía luces al árbol y a la casa, le gustaba hacer de todo. Ni siquiera este año pude armar el árbol. “No me sentí fuerte ni animado”.
Y si la Navidad fue un día de reserva y silencio, ¿qué pasará con el Año Nuevo, la fiesta que durante décadas su marido transformó en todo lo contrario, una fiesta de ruido, baile, brindis, trenes, confeti y abrazos al son de ese himno llamado un año más?
Un nuevo año sin el Rey
Gloria Sáez admite que, formalmente, la situación puede no cambiar mucho: acostumbrada a que su marido tenga que trabajar durante tantos días de Año Nuevo, animando celebraciones del más diverso calibre, ella siempre optó por refugiarse en sus hijos.
“Pasé el Año Nuevo con ellos, porque él siempre tenía que trabajar. Para Navidad nunca trabajó, siempre lo pasaba en casa. Esa fue la diferencia”, recapitula, y luego concluye: “Por eso, esta vez también será un Año Nuevo sola en mi casa. No quiero ir a casa de mis hijos. No tengo ganas de celebrar. Uno no quiere que el Año Nuevo sea triste, pero no puedo sentirlo de otra manera. No tengo el corazón”. para alegrarme, salir a comer o cosas así, prefiero quedarme tranquila en mi casa.”
“Mucha gente me ha llamado y ha estado preocupada por cómo voy a pasar el Año Nuevo, porque es una fecha especial. Me han llamado otros cantantes, de otras orquestas, amigos, de todo. Les agradezco mucho”.

-¿Cree que para este 31 de diciembre la interpretación de un año más ¿Tendrá algún significado especial?
Sí, y me alegro de que su voz siga siendo escuchada, es lo que realmente quiso durante su vida. Espero que su voz se siga escuchando mucho.
Sáez reconoce que hay algunas canciones popularizadas por Tommy Rey que ya no escucha, pero hay una en particular que disfruta cada día, casi religiosamente. se trata de la ultima estacionuna cumbia más lenta y evocadora que le dedicó a modo de carta de amor. De hecho, le dijo que cada vez que jugaba con ella se acordaba de ella.
Su letra dice: “He recorrido tantos caminos / tantos amores / En este tren de la vida de tantos colores / Me he detenido en tantos andenes con hermosas flores / pero la única estación eres tú / Después de ti, no hay más amor / Porque eres la última estación.
Ahora, Sáez dice: “Recuerdo cuando puso esa canción en la computadora y me pidió que la escuchara. La grabó y nunca fue escuchada mucho por la gente. Es muy hermosa, es una especie de cumbia más lenta”.
Al viajar a aquellos días, la viuda del ícono tropical resalta una de sus características imborrables: Tommy Rey era un hombre sereno y tranquilo que, de no ser por su trabajo, prácticamente hubiera preferido pasar el Año Nuevo en la tranquilidad de su residencia, lejos del tumulto.
“A mí tampoco me gusta salir. Él también prefería estar en casa, compartir, ver la tele, estaba muy poco acostumbrado a otras cosas. Uno también se acostumbra a la pareja que uno tiene”, matiza.
La nueva versión de La Sonora de Tommy Rey
Cualquiera sea el caso, la música de Tommy Rey volverá a escucharse con fuerza a finales de año. Y hay un motivo concreto: Gloria Sáez impulsó el pasado mes de octubre el regreso de La Sonora de Tommy Rey, con ese mismo nombre, aunque en una versión renovada integrada por el trompetista Roberto Vidal -“el único que se mantuvo fiel a mi marido del grupo anterior”, dice- y el hijo mayor del fallecido artista, Patricio Zúñiga Collado.
Este último -fruto del primer matrimonio del intérprete, con Teresa Collado- actúa como cantante en el proyecto que ya ha tenido un par de presentaciones.

“Reactivé la orquesta. Me comuniqué con Roberto, que se mantuvo muy fiel a Tommy. Habló conmigo muchas veces. Lo pensamos mucho y le propusimos a Pato que aceptara cantar. Al principio le costó, tenía otros proyectos, pero era importante. Como algunos querían apagar el nombre de mi marido, dijimos que no, que no podemos dejarlo en el olvido. Además, sumamos músicos profesionales y todos en el ensayo estaban súper entusiasmados con levantar el nombre de Tommy, no uno se unía por dinero o algo así y, hasta ahora, nos ha ido muy bien con este proyecto”.
Sáez cree que la nueva Sonora de Tommy Rey tiene mucho futuro no sólo porque está uno de sus hijos, porque maneja un repertorio reconocido por casi todo Chile, porque se nutrieron de buenos músicos para extender la calidad escénica y porque ella misma es dueña de la marca, lo que le permite presentarse sin problemas.
También hay un factor que se siente que va más allá de todo eso: “Tommy, mi lindo viejito, nos está ayudando desde arriba”.







