Inteligencia Artificial revoluciona los procesos industriales

El desarrollo de la Inteligencia Artificial (IA) ha comenzado a impactar en diferentes áreas de nuestra vida. Desde pedir algo “sencillo” a Siri o Alexa, hasta complejas máquinas programadas para trabajar junto a médicos y cirujanos.

La IA es una tecnología que se perfila como motor de cambio en todos los sectores, ya que Con los sistemas algorítmicos se pueden recrear las capacidades cognitivas de las personas, como la resolución de problemas, el aprendizaje, el razonamiento, el poder de la personalización, la automatización y la toma de decisiones aumentada, entre otros.

La cuarta revolución industrial, también conocida como Industria 4.0, llegó para quedarse. Algunas empresas han optado por aplicar tecnologías disruptivas para mejorar sus procesos productivos, reducir costes y crear una empresa inteligente y rentable.

Según el Fondo Europeo de Recuperación, para 2030 la Inteligencia Artificial impactará en el PIB mundial, alcanzando el 14%, lo que serían 15,7 billones de dólares. Se espera que en unos años la aplicación de la IA transforme gran parte de las empresas, incluidas las áreas industriales como minería, energía, alimentos, automotriz y más.

Con la aparición de la inteligencia artificial, la tecnología inteligente y el aprendizaje automático, cada vez más empresas están adoptando estos sistemas. En Chile, la empresa Minerales de Antofagastaque es uno de los diez mayores productores de cobre del mundo, ha impulsado la gestión de datos como un activo fundamental en su negocio en los últimos años.

Con la IA pueden gestionar una gran cantidad de datos en tiempo real, lo que les ayuda a comprender mejor los procesos de minería y a tomar decisiones mejores, más eficientes y más rápidas. Alan Muchnik, Vicepresidente de Estrategia e Innovación de Antofagasta Minerals dice que este Les ayuda a descubrir aspectos que antes no veían “porque no éramos capaces de procesar tanta información y mucho menos hacerlo rápido”.

Ahora, no solo operan de forma más eficiente, productiva y segura, sino también de forma más sostenible, controlando o mitigando los posibles impactos de su actividad en el medio ambiente.

Dentro del uso de la IA aplicada a los procesos mineros, Antofagasta Minerals la utiliza para mejorar el rendimiento de los procesos de molienda o para incrementar la recuperación de cobre en la fábrica. “Podemos ver aspectos de nuestra operación que antes eran invisibles”, dice Muchnik.

También les ha ayudado a detectar cuellos de botella en la operación que afectan los resultados de producción y les ha permitido crear modelos para mejorar el control de las emisiones de polvo.

“Hoy estamos avanzando en el desarrollo de formas de operar que nos permitan realizar, por ejemplo, mantenimiento avanzado de nuestros equipos y, por tanto, reducir los fallos no previstos”, explica el vicepresidente de la compañía.

El análisis de datos avanzado y la inteligencia artificial ayudan a predecir problemas y optimizar los diversos procesos de mantenimiento. “El potencial es enorme y por eso estoy seguro de que seguiremos viendo cambios positivos en la forma de hacer minería”.

Entre otras áreas que utilizan esta tecnología se encuentra la Industria automotriz, donde, mediante IA, se programan robots para ensamblar piezas de automóviles, utilizando sensores que detectan el momento exacto en el que se debe unir una pieza con otra. También es posible instalar tornillos en el motor, pintar partes de la carrocería o ensamblar el interior del automóvil.

La empresa automotriz Ford incorporó esta tecnología durante la fabricación de automóviles, e integró dos modernos robots con forma humanoide a su planta de trabajadores para que puedan incorporarse a la línea de producción y prestar servicios en áreas como la logística interior o la entrega de materiales entre los diferentes departamentos.

Él El sector energético utiliza IA en algo que llaman redes inteligentes o “smart grids”, que transportan electricidad, pero también datos. Son capaces de realizar análisis inteligentes en tiempo real, equilibrar la oferta y la demanda de energía o detectar posibles errores o fraudes a lo largo de toda la cadena de suministro.

Además, los proveedores de energía pueden gestionar de manera más eficiente las interrupciones del servicio, optimizar el voltaje o detectar picos de demanda, así como parametrizar el comportamiento específico de algunos clientes o ciudades.

Gaba es un comercializador de electricidad español que utiliza IA para proporcionar trazabilidad al consumo y determinar patrones para que sus clientes puedan ser más eficientes en el uso de la energía Según un estudio de Juniper Research, las redes eléctricas inteligentes ahorrarían a los ciudadanos alrededor de $14 mil millones en costos de energía para 2022.

Otro ejemplo es el industria del reciclaje, que mediante el uso de IA permite separar residuos en grandes cantidades e incluso de forma automatizadalo cual es clave para poder convertirlos en residuos valorizables y tener un adecuado manejo de los residuos sólidos.

Esto trae ventajas como una mayor productividad al separar una mayor cantidad de residuos en menos tiempo; reducir costes, ya que los robots funcionan de forma automática; mayor precisión y menos errores; y la capacidad de ver diferencias mínimas o aquellas que no son visibles para el ojo humano entre los residuos.

Es el caso de la empresa polaca Bin-e, empresa que creó un contenedor de basura inteligente que utiliza inteligencia artificial para separar automáticamente los residuos en diferentes grupos y comprimirlos.

Estas áreas y muchas más son parte de un gran cambio, y los más optimistas tienen la esperanza de que la IA ayude a contribuir en la lucha contra el cambio climático.

Según un informe de Boston Consulting Group (BCG) La IA se puede utilizar para ayudar a reducir las emisiones de GEI en una cantidad equivalente al 5 % o al 10 % de la huella de carbono de una organizacióno un total de 2,6 a 5,3 gigatoneladas de dióxido de carbono equivalente (CO2e) si se amplía a nivel mundial.

Estamos siendo protagonistas de una era sin precedentes, donde la tecnología puede ser la gran aliada de las personas, si se utiliza correctamente.