El debate sobre la ley de la sociedad deportiva (SAD) en Chile no es ajeno a Jorge Vargas. El entrenador dice que el modelo es bien conocido en Europa, pero señala que hay algo que extraña en Chile: las inversiones realizadas por los clubes en el mediano plazo.
“Es incuestionable que todos los que poseen propietarios de clubes desean obtener una ganancia. El problema es cómo y cuándo. En Chile, el modelo ha hecho que este negocio ingrese a personas que desean obtener ganancias rápidas. No nos engañamos a nosotros mismos, todos sabemos que muchos de ellos son representantes que tienen intereses en varios clubes y que los equipos ensamblan su negocio y lo que no sabemos que el modelo de que el modelo sea la gente de las personas que se apuesta por el futuro”.
-¿Cuál es el camino?
Se ha dicho muchas veces, pero es cierto: debe invertir en infraestructura y divisiones menores. Los equipos italianos que tienen este modelo de trabajo, en general, con ese pensamiento.
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-Pero ser sincero. El fútbol chileno no está a la altura del desarrollo de calcio. El nivel de recursos que maneja la Juventus, Inter o Milán no tiene nada que ver con aquellos que manejan en Chile Colo Colo, la U o la UC, por nombrar solo a los ‘grandes’ …
Es que, precisamente, el error: poner como refleja a los grandes de Italia que obviamente se mueven con otras demandas. El modelo de equipos chilenos debe ser Atalanta y no la Juventus.
-Y dónde se encuentra el gran ejemplo de Atalanta?
En el cual, como Club Chico, invirtió y proyectó a mediano plazo. Sabiendo que no podía competir en recursos con los grandes de Italia, se organizó para crecer. Y lo primero que hizo Atalanta fue formar un equipo Exploración De 40 profesionales que tenían la misión de Europa en busca de jugadores entre 12 y 14 años que los grandes equipos del continente no habían considerado en sus procesos de recolección. No compitieron con los grandes equipos, pero estaban buscando los que descartaron. ¿Por qué un equipo chileno no hace lo mismo y va a ver jugadores en Colombia, Perú, Paraguay o Bolivia? Se trata de hacerlo. Tienes que tener a Will. Atalanta tiene suerte de que tenga un presidente que fuera futbolista profesional, pero esa no es una condición expresa para llevar a cabo este tipo de proyecto.
-¿Cuar se complementó su proyecto de Atalanta? Porque es obvio que solo capturar a los jóvenes no puede tener éxito.
Uno, con una gran inversión en infraestructura. Por ejemplo, hoy tiene un gimnasio que ningún club en Chile está a punto de tener. Y el otro, por supuesto, es la gran administración e impulso dada por el entrenador Gian Piero Gasparini, quien facilitó la entrada al equipo de aquellos jugadores que se formaron en Atalanta y que el año pasado le dio al club el título de la Europa League, algo impensable por Atalanta hace años.
Afuera, pero elegir bien
-En Chile, la obsesión de los clubes, en lugar de invertir, es vender rápidamente a sus valores jóvenes. ¿Eso también explica la pequeña competitividad que se logra internacionalmente?
Es evidente que los clubes quieren tener ganancias y que, junto con los representantes también quieren hacer que el pasado sea rápido, hace que muchos jugadores se vayan jóvenes afuera.
-¿Se crees que eso tendría que cambiar de alguna manera?
Es difícil para él cambiar. Lo que sería deseable es que los representantes se preocupen más por su propia apuesta y envíen a sus jugadores a los mercados que, competitivamente, son mejores para ellos.
-El crees que eso es importante para los representantes?
Debería importarle porque, a largo plazo, de lo que deberían cuidarse es que su representación se mantenga lo más posible en los mejores mercados. Le doy dos ejemplos de la UC: los delanteros Diego Valencia y Clemente Montes, siendo muy proyección, fueron a mercados que no los favorecieron y pronto regresaron a Chile. Valencia no estaba aquí para jugar en Italia, sino en los Países Bajos o Bélgica. Y Montes fue pintado para ir a Türkiye y no a España. Allí carecía de los representantes.
-El crees, como muchos, que los representantes son grandes responsables de los males del fútbol chileno?
Creo que lo hay todo. Yo, personalmente, tuve una mala experiencia con uno y desde allí nunca tuve un representante. Y tal vez eso me dañó a la opción de jugar en uno grande en Italia. Pero hay quienes han dado signos de pensamiento según corresponda. Es una cuestión de tener suerte, creo.
