Bruselas impondrá aranceles de hasta casi el 50% a los vehículos eléctricos chinos, haciendo caso omiso de las advertencias del gobierno alemán de que la medida corre el riesgo de iniciar una costosa guerra comercial con Beijing.
La Comisión Europea notificó a los fabricantes de automóviles el miércoles que aplicará provisionalmente aranceles adicionales de entre el 17% y el 38% a los vehículos eléctricos chinos importados a partir del próximo mes. Los aranceles se aplicarán además de los aranceles existentes del 10% a todos los vehículos eléctricos chinos, dependiendo de hasta qué punto cumplieron con una investigación de la UE sobre los fabricantes de automóviles eléctricos.
Los principales exportadores, incluidos BYD, el mayor fabricante de vehículos eléctricos del mundo, y Geely, se verán afectados por aranceles individuales adicionales de entre el 17% y el 20%.
Los vehículos eléctricos fabricados en China por Tesla “pueden recibir un tipo de impuesto calculado individualmente”, dijo la comisión.
Las ventas en Chile de automóviles 100% eléctricos marcaron un récord histórico en mayo
Bruselas dijo que su investigación reveló que la cadena de suministro de vehículos eléctricos estaba “fuertemente subsidiada en China, y que las importaciones de (vehículos eléctricos) chinos presentaban una amenaza de daño claramente previsible e inminente a la industria de la UE”.
Los fabricantes que se consideró que cooperaron con la investigación de la UE, anunciada en septiembre, pero a los que no se les asignaron tarifas individuales, estarán sujetos a una tarifa promedio del 21%.
Aquellos que no hayan cooperado se verán afectados por la tasa del 38 por ciento, un nivel aún muy por debajo de los derechos del 100% aplicados por Estados Unidos.
El vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schinas, dijo que la comisión se había “contactado” con las autoridades chinas para “explorar posibles formas de resolver” el problema. Si no se encuentra una solución, los aranceles se aplicarán a partir del 4 de julio.
China acusa “acto proteccionista descarado”
El Ministerio de Comercio de China dijo que estaba “muy preocupado y muy insatisfecho” con la acción “mal informada y anárquica” de la UE, y advirtió que “tomaría todas las medidas necesarias” para proteger los derechos de las empresas chinas.
“La Comisión Europea politiza y convierte en armas las cuestiones económicas y comerciales”, dijo el ministerio en un comunicado. “La UE fabricó y exageró los llamados subsidios. Este es un acto proteccionista descarado”.
La Cámara de Comercio de China ante la UE dijo que estaba consternada por los aranceles, que “supondrían una grave barrera al mercado”.
Los aranceles, defendidos por Francia, recaudarán miles de millones de euros para el presupuesto de la UE anualmente a medida que crezcan las ventas de vehículos eléctricos chinos en Europa. China, el mayor socio comercial del bloque, exportó 10 mil millones de euros en automóviles eléctricos a la UE en 2023, duplicando su participación de mercado el año pasado al 8%, según analistas de Rhodium Group.
Beijing, que ya aplica un arancel del 15% a los vehículos eléctricos europeos, ha tratado de persuadir a la mayoría de las capitales de la UE para que se opongan a los nuevos aranceles.
Alemania, Suecia y Hungría han dicho que no aprueban la medida por temor a represalias chinas. Los funcionarios de la UE dicen que Berlín presionó a Ursula von der Leyen, que busca un segundo mandato como presidenta de la comisión, para que abandonara la investigación antisubsidios.
El canciller alemán, Olaf Scholz, advirtió recientemente que “el aislamiento y las barreras aduaneras ilegales . . . en última instancia, todo es más caro y todos más pobres”.
Pero el intenso lobby realizado por el gobierno de Scholz “no había funcionado”, dijo una persona informada sobre el proceso.
ACEA, el organismo del sector automovilístico de la UE, respaldó los aranceles y dijo que se necesitaba una “estrategia industrial sólida” para que la industria automotriz del bloque fuera globalmente competitiva.
En agosto el Ministerio del Trabajo dio inicio a un proceso de diálogo con diversos actores del mundo laboral, con la finalidad de reunir antecedentes para elaborar un proyecto de ley que abra la puerta a la negociación colectiva multinivel, también conocida como ramal, en el país.
A la fecha son diversos los representantes del mundo sindical que han participado en este espacio, y si bien entre el grueso de ellos la intención del Ejecutivo en esta materia es vista con buenos ojos, hay otros que son más críticos con dicha motivación, y acusan que el contexto laboral requiere dar atención a otras temáticas: como el desempleo y las pensiones.
Pese a eso, tres de las cuatro sindicales del país están de acuerdo con la apuesta. Sin embargo, entre ellos se perciben matices respecto a las expectativas y algunos transmiten que, antes de realizar cualquier modificación, se deben abordar diversas problemáticas en torno al funcionamiento del mundo sindical en Chile.
CTCH: “Un anhelo de años, pero hoy no es el momento”
Desde la Central de Trabajadores de Chile (CTCH), liderada por Arturo Martínez, destacan que la negociación ramal es un “anhelo de años al interior del mundo sindical”. Sin embargo, el histórico dirigente sindical sincera que el actual momento económico del país no es el óptimo para avanzar en este tema.
“Siempre hemos querido avanzar en esto, pero no ahora”, dice Martínez, y enfatiza que el contexto requiere dar atención a otras problemáticas del mundo laboral y de los trabajadores, como el desempleo, las pensiones y los salarios. “Claro que queremos fortalecer las negociaciones, pero también debemos atender lo urgente, y hay personas que no logran encontrar trabajo”, dice.
“Si hay fragmentación sindical, ¿a quién sentaremos en una negociación multinivel?”, dice Arturo Martínez.
Para el vocero, además, otro aspecto que complica la situación es el estado actual del sindicalismo en el país. Por ello, plantea que para avanzar efectivamente en la negociación multinivel, se debe trabajar en torno a la representatividad y el funcionamiento de los sindicatos.
“Las leyes laborales tienen su origen en el plan laboral que se instaló el año ‘78 en Chile, y que planteó que en una empresa pueden haber tres o cuatro sindicatos si hay quórum para hacerlo, entonces se fomenta la división de los trabajadores”, advierte Martínez, y asegura que esto tendrá consecuencias en un posible modelo multinivel.
“Si hay fragmentación sindical, ¿a quién sentaremos a negociar?”, cuestiona, y agrega que también se debe mirar la real tasa de sindicalización del país y la representatividad de las centrales. “Hay todo un trabajo previo que hay que realizar antes de hablar sobre negociación multinivel”, sostiene.
CUT: “La ramal es lo que falta hoy para potenciar pisos de dignidad para los trabajadores”
La Central Unitaria de Trabajadores y Trabajadoras (CUT), es una de las organizaciones que ha planteado con más fuerza su apoyo a la intención del Ejecutivo de avanzar en la negociación multinivel.
Un apoyo que los ha llevado a criticar la ausencia del mundo empresarial en el debate. “Esto tiene que ser construido con diálogo social, es lamentable que los grandes empleadores se hayan restado”, dice David Acuña, presidente de la CUT.
“Esto tiene que ser construido con diálogo social, es lamentable que los grandes empleadores se hayan restado”, plantea Acuña.
Para el dirigente sindical es positivo que el Gobierno activara las conversaciones en torno a esta materia, ya que desde su perspectiva la implementación de este tipo de negociación permite generar condiciones transversales de trabajo decente, salariales, de salud y seguridad en el trabajo, entre otras.
De hecho, en su opinión, en el país ya existen mecanismos de negociaciones sectoriales, como los acuerdos marcos en la minería, la energía, o las negociaciones de los recolectores de residuos.
“Son negociaciones ramales que afectan a todos los trabajadores, y hemos visto que es posible avanzar. También está la negociación del sector público que es ramal, también está la del salario mínimo. La negociación ramal es lo que falta hoy para potenciar pisos de dignidad para los trabajadores, independiente del grupo al que pertenezcan”, recalca Acuña.
Más críticos y pesimistas se muestran respecto al tema en la Unión Nacional de Trabajadores (UNT). A su presidente, Alejandro Steilen, le preocupa el avance de esta discusión y sincera que no ve claridad en las autoridades sobre lo que se busca hacer en torno a la negociación multinivel.
“Valoramos que nos invitaran a dialogar, pero no me queda claro qué quieren hacer, qué entienden cómo multinivel”, dice el dirigente.
“Valoramos que nos invitaran a dialogar, pero no me queda claro qué quieren hacer, qué entienden cómo multinivel”, critica Steilen.
Para él, la motivación del Gobierno “no tendría sentido”, ya que la legislación local tiene la figura de los sindicatos interempresas, que son aquellos que agrupan a trabajadores de dos o más empleadores distintos, y que pueden negociar colectivamente.
“La última reforma laboral del Gobierno de la exPresidenta Michelle Bachelet establece que puede haber negociación más allá de la empresa, siempre y cuando sean del mismo rubro, que es a través de los sindicatos interempresas, entonces la fórmula existe”, plantea.
Otro eje de inquietud para el dirigente sindical dice relación con el modelo de negociación multinivel que busca proponer el Gobierno. “Tengo mis aprehensiones respecto a este tema, porque hay modelos en los que se negocia por rama de actividad, y otros por actores. Entonces hay que ver si está la intención de sentar a dialogar a una central en particular, porque en Chile hay cuatro centrales. ¿Quién negociará con la multinivel?, expone.
CAT: En el país ya ha existido una negociación de este tipo “y nada malo pasó”
Al interior de la Central Autónoma de Trabajadores de Chile (CAT) se alinean con el objetivo del Gobierno de avanzar en la negociación multinivel.
“Como primer punto, nosotros valoramos que un compromiso del programa de gobierno del Presidente Gabriel Boric se esté concretando. Creemos que es un poco tarde, considerando el nivel de bloqueo en el Congreso, pero valoramos la intención”, afirma el presidente de la CAT, Ricardo Maldonado.
“Creemos que es un poco tarde, considerando el nivel de bloqueo en el Congreso, pero valoramos la intención”, dice Maldonado.
El respaldo pasa porque desde su visión en el modelo actual de negociación colectiva no hay equilibrio entre los trabajadores y empleadores. Además, agrega que en el país ya ha existido una negociación de este tipo “y nada malo pasó”.
“La negociación ramal existió básicamente hasta 1973, y funcionaba”, insiste.
Con respecto a sus expectativas, el dirigente sindical sostiene que su apuesta es que los sindicatos sigan siendo un actor relevante en las conversaciones directas con sus empleadores, pero que también “las federaciones, las confederaciones y las propias centrales sindicales, tengan la posibilidad de hacer negociaciones”.
A su juicio, una negociación multinivel debiese permitir “que toda la estructura sindical tenga la posibilidad de negociar, y que los trabajadores se agrupen de la forma que mejor lo estimen, si es en una federación o confederación, que el Estado no te limite y no te restrinja ese derecho”.
El mundo empresarial siguió sumido en una percepción negativa sobre el escenario económico durante agosto. Así lo reveló el último reporte del Índice de Confianza Económica que elabora mensualmente Deloitte-Cadem, el cual mostró que el 89% del Panel de Negocios que incluye cree que el país en general va por un mal camino.
Más específicos, un 50% señaló que la situación económica del país es mala o muy mala, 50% que es regular y 33% la calificó como buena o muy buena.
El empleo a nivel nacional también generó preocupaciones y 71% expresó una visión preocupante sobre esta variable.
Algo se atenúa el desánimo cuando la pregunta apunta a la situación económica de la empresa, industria o actividad en la que participan, pues aquí solo 29% de los panelistas considera que es mala.
“Hay un gran pesimismo respecto a las posibilidades de crecer y eso es bastante compartido”. Vivianne Blanlot, directora de empresas y exministra de estado.
“Efectivamente hoy nos queda claro que el principal desafío que tenemos como país es el crecimiento”. Christian Durán, CEO y managing partner de Deloitte.
El CEO y managing partner de Deloitte, Christian Durán, considera que en esta ocasión primó más la correción a la baja del crecimiento para el año y del PIB tendencial más que el sorpresivo salto de 4,2% de la actividad en julio.
Precisamente, la encuesta se realizó entre el 4 y 6 de septiembre, precisamente período en que el Banco Central presentó el Informe de Política Monetaria (IPoM), que redujo el techo de la expansión de la economía prevista para el año de 3% a 2,75% y ratificó el piso en 2,25%, mientras situó en 1,8% su pronóstico de mediano plazo.
Ni siquiera pudo contrarrestar esto, como dice la directora de empresas y exministra de Defensa, Vivianne Blanlot, la “buena noticia” de reducción de la tasa de interés 25 puntos base hasta 5,5% un día antes por parte del ente emisor.
“Hay un gran pesimismo respecto a las posibilidades de crecer y eso es bastante compartido”, dijo.
Pese a ello, espera que el tipo rector siga bajando y permita reactivar los mercados, la inversión y el crecimiento.
A juicio de Durán, “para lograr un cambio en las expectativas del mundo empresarial, es necesario consensuar acuerdos con una mirada de largo plazo entre el sector privado y el Estado, teniendo como meta impulsar el crecimiento. Es que efectivamente hoy nos queda claro que el principal desafío que tenemos como país es el crecimiento”, señaló.
Optimismo por minería y energía
Al ser consultados por la situación actual de la inversión, 79% se manifestó pesimista a nivel país y 63% también lo cree acerca de su empresa, industria o actividad
No obstante, los panelistas eligieron a la minería y la energía como los sectores o industrias más importantes en la actualidad y con más potencial a futuro.
Durán explicó que hay conciencia acerca de las oportunidades a futuro relacionadas con la transición energética, donde el rol clave lo juegan los rubros mencionados.
“Son dos sectores que, de alguna manera, están un poco más aislados de lo que esté pasando con el crecimiento del país”, afirmó Blanlot
En el caso de la minería, al ser principalmente exportador está más ligado con lo que pasa en los mercados internacionales, y si bien la economía global no ha mostrado mayor dinamismo, existen señales de recuperación.
Y aunque se trata de casos que también se pueden ver afectados por la permisología, Blanlot destacó que aquí las grandes empresas se han programado y tienen estrategias para adaptarse a la ineficiencia del sistema de autorizaciones y se han anticipado a ese tipo de problemas.
Blanlot y Caso Audios: “La salud del sistema judicial es súper importante”
Durante este mes se han sumado nuevas repercusiones del Caso Audios. Una de ellas se relaciona con contactos de mensajería telefónica del abogado Luis Hermosilla con la ministra de la Corte Suprema, Ángela Vivanco, lo que derivó en la apertura de un proceso de remoción en contra de la magistrada por parte del máximo tribunal. Y, además, surgieron antecedentes sobre consultas telefónicas de Andrés Chadwick, cuando ya no era ministro, a un consejero de la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) sobre la suspendida corredora de bolsa de los imputados hermanos Sauer. Al respecto, Blanlot indicó que esto podría tener efectos en el ambiente de los negocios. “La estabilidad y la sanidad institucional influyen bastante, cuando se trata sobre todo de inversión extranjera, porque hay un tema de imagen país que es confiable y, en ese sentido, la salud del sistema judicial es súper importante”, explicó. Y agregó que “cuando se deteriora una imagen general del país, eso no ayuda”.
Linda Tesar, académica de la Universidad de Michigan: “Es probable que la Fed no aplique un gran recorte de tasas, porque no hay ninguna razón para hacerlo”
Basada en los análisis de largo plazo que elabora el sistema de la Reserva Federal, la académica de la Universidad de Michigan, Linda Tesar, se declara optimista respecto a la mayor economía del mundo, marco en el que intuye que nos enfrentaremos a un relajamiento monetario gradual, sin recortes de tasas de gran magnitud, a partir de la reunión de la Fed de esta semana.
Tesar, que participó a comienzos de este mes del Congreso de la Sociedad Económica de Chile, organizado por la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello, planteó a DF que la inflación se está reduciendo a un ritmo que le acomoda a la Fed, institución que conoce de cerca, como exmiembro del Consejo Académico Asesor de la Reserva Federal de Chicago y Nueva York.
También conocedora de la política económica fiscal, con la experiencia que tuvo como economista senior del Consejo de Asesores Económicos de la Oficina de Barack Obama, Taser señaló que le preocupa la falta de voluntad política que observa en EEUU para que el país se haga cargo de sus problemas de déficit y deuda.
“Soy optimista, porque enfrentamos una época terrible y la superamos. Tengo confianza en que tomarán (en la Fed) una decisión correcta”.
– De cara a la reunión de la Fed y un probable recorte de tasas. ¿Cómo evalúa a la economía estadounidense?
– No es sorprendente que hayamos tenido tasas de interés elevadas durante un tiempo. Creo que están haciendo el trabajo. Han hecho que las condiciones financieras sean un poco más estrictas y estamos viendo que el crecimiento se está desacelerando un poco.
Supongo que soy optimista. No veo una caída pronunciada, sino una desaceleración bastante pausada.
No quiero decir que no podamos tener turbulencias y que los mercados financieros no puedan reaccionar a algunas noticias y luego ajustarse. Obviamente, hay riesgos. Pero la mayoría de las cosas que estoy leyendo, que se basan en el pronóstico a largo plazo, sugieren que la inflación está bajando de la manera que le gustaría a la Fed. El desempleo y el crecimiento se moderan, pero no veo una caída pronunciada.
– ¿Qué riesgos advierte para ese pronóstico?
– Ahora bien, hay cosas que son riesgosas para un pronóstico, y una de ellas es que el mercado inmobiliario está muy ajustado en Estados Unidos. Supongo que eso es coherente con las altas tasas de interés, pero no estamos viendo una construcción de viviendas unifamiliares. Ese mercado está un poco restringido. Además, hay mucha incertidumbre global. Eso, definitivamente, me preocupa. Hay muchos conflictos a nivel mundial que creo que podrían plantear algunos desafíos reales.
– ¿Qué informes respaldan su optimismo?
– Me baso en las previsiones que leo del sistema de la Reserva Federal y también en las previsiones económicas en general. No estamos viendo revisiones o cambios bruscos en la inflación, en el desempleo… Todo ha seguido una trayectoria gradual.
No hace mucho enfrentamos una pandemia que fue un shock como ningún otro. Fue un momento muy difícil para hacer predicciones sobre la inflación. Y luego tuvimos la guerra de Ucrania. Fue una gran tarea para la Fed, pero respondieron y ahora vemos una moderación de la inflación.
La pregunta, entonces, es si la Fed irá hasta el final. ¿Realmente quieren pasar de 3% a 2,5% y luego a 2%, su objetivo declarado? Supongo es una pregunta abierta. Pero soy optimista, porque enfrentamos una época terrible y la superamos. Tengo confianza en que tomarán una decisión correcta en este momento.
– ¿De qué magnitud prevé el recorte de tasas de la Fed?
– Es probable que la Fed no aplique un gran recorte de tasas, porque no hay ninguna razón para hacerlo. Dada la volatilidad financiera y el hecho de que la inflación aún no está donde queremos que esté, se tratará de un ajuste gradual. Serán pequeños pasos hacia abajo. A menos que aparezcan nuevos datos que sugieran que mantener las tasas de interés elevadas realmente está ejerciendo presión. Pero, hasta ahora, espero que bajen gradualmente. Esa es mi intuición. Ese sería mi consejo.
Problemas de larga data
– Hay problemas de déficit y deuda que enfrenta EEUU incluso antes de la pandemia. ¿Le preocupan?
– En efecto, hay preocupaciones sobre el déficit del Gobierno de EEUU y su deuda acumulada desde hace mucho antes de la pandemia y me preocupa mucho no ver la voluntad política para enfrentar el hecho de que o no se puede hacer todo el gasto que se quiere hacer; o hay que aumentar los impuestos.
He estado escribiendo sobre esto, sobre cuánta deuda puede soportar EEUU. No veo la voluntad política para hacer el ajuste a menos que nos acerquemos a una crisis y no preveo una crisis. Por alguna razón, seguimos posponiendo el problema, pero es un problema real.
– ¿Qué riesgos concretos se asocian a ese problema?
– El riesgo es que los inversionistas globales no vean al Tesoro estadounidense como un activo seguro. EEUU tiene la ventaja de poder emitir deuda con una prima muy baja. Los inversionistas no exigen una prima por tener deuda estadounidense. Si los inversionistas empiezan a exigir una prima porque les preocupa la capacidad de pago, entonces la cosa se pone seria.
Esta es una realidad que Argentina y otros países han enfrentado, donde el servicio de la deuda se vuelve lo suficientemente grande como para obligar a un ajuste de cuentas con otras partes del presupuesto y recortes, obligan a los gobiernos a tomar decisiones realmente dolorosas. EEUU no ha tenido que tomar esas decisiones dolorosas.