La primera entrevista del presidente del nuevo Sindicato N°3 de Minera Escondida, Marcelo Fonseca, no pasó desapercibida entre los trabajadores mineros. Luego de su testimonio ante el DF, en el que dio cuenta del origen del grupo a raíz de la ruptura que generó entre las bases el paro de 2017 liderado por el Sindicato N°1, el presidente de dicho sindicato, Patricio Tapia, salió al frente con su declaraciones .
Para el dirigente, que lleva casi 12 años al frente de la mayor organización minera privada de Chile, con 2.404 afiliados, las palabras de Fonseca forman parte de “una estrategia repetitiva” en conjunto con Minera Escondida, que -en su opinión- se ha renovado. con mayor intensidad.
Señaló -con documentos en mano- que la empresa tiene seis condenas por prácticas antisindicales y otras seis en proceso. Entre ellos, por reposición ilegal en huelga, por vulneración del principio de buena fe y por promover la afiliación al Sindicato Interempresa, donde anteriormente se encontraban quienes dieron origen al N°3.
Patricio Tapia, presidente del Sindicato N°1 de Escondida.
Patricio Tapia, presidente del mayor sindicato minero de Chile, afirmó que la empresa “está decidida a debilitarnos”.
“Lamentablemente la empresa está decidida a intentar debilitar nuestro sindicato”, dice Tapia, quien se incorporó a la planta de BHP hace 35 años, y dice que nunca había visto a la empresa dar permiso y transporte a los trabajadores para ir a firmar los estatutos de creación de una nueva organización sindical, como ocurrió con el grupo Fonseca, acusa el dirigente.
“Es derecho de cada trabajador decidir a qué sindicato quiere afiliarse, pero esta es una operación antisindical evidente. La ‘disidencia’ a nuestra organización, a agosto de este año, no superaba los 50 trabajadores. Este grupo nunca ha podido lograr mayor apoyo, ya que los trabajadores saben que es funcional a los intereses de la empresa, por lo que la adhesión que celebra Fonseca no es real.”
Frente a los 350 afiliados que tiene la nueva organización, Tapia no les da crédito y dice que “todo está diseñado para darle espacio artificialmente a esta supuesta disidencia: 300 de ellos no pudieron sumarse a la negociación colectiva en agosto y fueron dirigidos con injerencia directamente de la empresa”.
Por su parte, Fonseca afirmó en la entrevista que la mayoría de los nuevos afiliados se sumaron luego de “ver con miedo el diálogo destructivo y agresivo del Sindicato N°1”.
Tapia niega que el presidente del Sindicato N°3 haya sido expulsado de su sindicato, sino que él mismo renunció. El que fue expulsado, junto a otros ocho disidentes, fue Pedro Marín, actual secretario de la nueva agrupación, por retirarse del paro de 2017.
Consultado sobre los motivos que llevaron al Sindicato N°1 a presentar una serie de demandas para que el grupo disidente no pudiera fungir como grupo negociador ni como sindicato interempresas, Tapia indicó: “Muy simple, este grupo no tenía el quórum que la ley exige”. para que puedan negociar. La Corte de Apelaciones nos dio la razón y condenó a la empresa por prácticas antisindicales”.
El antofagastino de 61 años dice que hay preocupación entre los trabajadores por una serie de despidos que ya han sido reportados. “Parece que la empresa está tratando de aprobar el proyecto de ley de la negociación -en el que obtuvieron un bono por terminación de conflicto por US$ 30 millones-, que entró en conflicto innecesariamente. ¿Por qué no presentaron el acuerdo antes de la huelga?
El electricista Mina expresó que “la Unión 3 ya se estableció y vamos a tener que convivir con ellos, hay que mirar hacia adelante”. Respecto a la relación con el BHP, dijo: “Esto es lo mismo que un matrimonio, pero tenemos que saber llevarnos bien, porque como estamos trabajando, no es manera”. Y concluyó: “Yo siempre digo que quiero que a mi empresa le vaya bien, porque entonces nos irá bien a todos, pero no a cualquier precio”.
