Sr. Director:
El 1 de marzo, el Día Internacional de Discriminación Cero, es una oportunidad para reflexionar sobre cómo la discriminación, lo que también da paso a la violencia, afecta a varios grupos de protección especiales. Sus efectos no solo limitan el acceso a los derechos fundamentales, sino que también perpetúan la exclusión y la desigualdad estructural.
Los datos reflejan la magnitud del problema. Por ejemplo, según el Observatorio de Envejecimiento (2021), Chile es el país donde las personas mayores son más incompetentes (28%), superando a los Estados Unidos (23%), China (17%) y Brasil (17%).
En Chile, la ley antiscriminación es una herramienta clave, pero más de una década de su promulgación, continúa presentando limitaciones importantes. Es urgente reformarlo para cumplir con los estándares internacionales y garantizar una protección efectiva para aquellos que más lo necesitan. Sin embargo, su progreso se ha visto obstaculizado por la falsa idea de que solo beneficia a las personas LGBTIQ+, cuando en realidad la discriminación que afecta a gran parte de la población.
Es por eso que pedimos a los parlamentarios que le dan la velocidad correspondiente en la comisión mixta a esta reforma, porque es un paso esencial para construir una sociedad que valora y respeta la diversidad, garantizando que todas las personas puedan ejercer sus derechos en igualdad de oportunidades y condiciones.
María José Escudero Moreno
Director de Desarrollo e Incidencia
Fundación Ronda Chile