¿Qué tan diversa es tu estrategia de excelencia?

Todos quienes trabajamos en minería sabemos que la gran mayoría de las compañías impulsamos desde hace años la implementación de modelos de gestión de excelencia, basados en la mejora continua, que permitan optimizar procesos para el logro de metas de seguridad, sustentabilidad y productividad.

En el último tiempo, ha surgido el desafío adicional de integrar y conectar la estrategia de excelencia con la innovación y la transformación digital, ambas muy importantes, pero lo que muchos pierden de vista es que incorporar también la diversidad (en un sentido amplio) puede generar todavía más valor para nuestro negocio.

Soy una promotora activa de la diversidad de género y, como la primera mujer en el cargo de gerenta de excelencia operacional en mi compañía -desde la creación del área hace casi 10 años- fomento y veo día a día cómo los equipos balanceados generan espacios de discusión, reflexión y creación de propuestas de valor. El equipo de esta gerencia está conformado por casi un 60% de mujeres, que lideran desde sus roles en mejora continua, competitividad, innovación y analítica avanzada.

Hemos sobrepasado cada año nuestras metas de desempeño, lo que nos desafía a aumentar el aporte a las áreas operacionales y de mantenimiento, que son el corazón del negocio minero. Otro aspecto muy relevante es que nuestros resultados en las encuestas de compromiso internas son de los mejores al interior de la compañía, demostrando que tener equipos diversos y comprometidos, fortalece los vínculos y el trabajo mancomunado, aportando al éxito y cumplimiento de nuestras metas.

Creo firmemente que nuestros resultados se sustentan, en gran medida, en esta diversidad que estamos impulsando y consolidando como equipo. Una diversidad amplia, enfocada en el género, pero también en la pluralidad de roles, experiencias, formación y habilidades, que convierten a la excelencia en un motor para la competitividad.

Esto lo vemos en los resultados, pero, sobre todo, en cómo llegamos a ellos. Se vive cada vez que diseñamos una iniciativa de innovación, de analítica, o una estandarización en la que involucramos a los operadores y mantenedores de “la primera línea”.

La industria minera enfrenta desafíos cada vez más complejos y para superarlos es fundamental incorporar la excelencia y la diversidad en nuestra estrategia, en todos los niveles organizacionales. Ambas requieren compromiso y convicción, pero una vez que las sumamos, no solo creamos valor, sino que también podemos multiplicarlo.