Receta: mousse de chirimoya y smoothie de mango-plátano

¿Qué es lo mejor de la primavera y el verano? Para mucha gente la respuesta es: frutas de temporada. Por eso, la chef y pastelera Constanza Cuevas –quien acaba de abrir Fat Kid Café en Valparaíso, la versión dulce de la icónica hamburguesería porteña– decidió sorprendernos con dos postres sencillos y rápidos donde ellos son los protagonistas.

El primero de ellos es una mousse de chirimoya decorada con frutos rojos. El segundo, un bowl de batido de mango y plátano.

La mousse se puede preparar preferentemente con fruta fresca, pero también sirve chirimoya congelada. Con el batido, que es ideal tanto para el desayuno como para la media tarde, puedes jugar con los toppings de encima: pueden ser trozos de piña, mango o plátano. También chips de chocolate amargo, copos de coco e incluso granola casera, que se puede preparar como indica esta receta.

para el batido

• 1 mango picado y congelado
• 1 plátano maduro
• 1 yogur griego
• ½ cucharadita de cúrcuma.

para los aderezos

• Granola casera o la que más te guste
• Chips de chocolate amargo, cantidad al gusto
• Coco laminado o rallado, cantidad al gusto
• Piña, mango y plátano picado, cantidad al gusto.

Para granola casera

• 150 g avena integral
• 150 g de nueces picadas
• 120 gr de miel.

1. Llevaremos el mango picado y congelado -recomiendo cortarlo en cubos y dejarlo en el congelador la noche anterior- previamente junto con el plátano picado, la cúrcuma y el yogur a nuestro procesador hasta formar una mezcla espesa, suave y homogénea.
2. Pasaremos a un bol y decoraremos con los toppings que más nos gusten. Personalmente me encanta agregar trozos de fruta, en este caso plátano en rodajas, cubitos de mango y piña, rodajas de coco, chispas o trozos de chocolate amargo y granola casera.
3. Para la granola casera, mezcla la avena integral, las nueces picadas –yo uso nueces, avellanas y almendras, pero puedes agregar tus favoritas o las que tengas en casa– y la miel, revolviendo hasta que se combinen.
4. Ahora pondremos la mezcla sobre una lámina de silicona o papel de horno, la compactaremos con una espátula y hornearemos a 180ºC durante 10 minutos o hasta que se vea dorada.

Consejo: Si eres vegano puedes sustituir el yogur por 150 ml de leche vegetal.

• 3 g de gelatina en polvo sin sabor
• 15 ml de agua fría
• 200 gramos de chocolate blanco
• 150 gr de pulpa de chirimoya
• 340 gr de crema de leche
• Frutos rojos de temporada de tu elección para decorar.

1. En primer lugar cogeremos nuestra gelatina sin sabor en polvo a hidratar en 15 ml de agua fría y la dejaremos reposar en el frigorífico unos 15 minutos.
2. Mientras la gelatina se hidrata, llevaremos a hervir la pulpa de chirimoya en el microondas. Una vez que rompa a hervir añadiremos a la pulpa la gelatina ya hidratada hasta su total disolución.
3. Ahora derretiremos el chocolate blanco en el microondas, asegurándonos de hacerlo en tandas de apenas unos segundos, para evitar que se queme nuestro chocolate. Una vez derretida añadiremos la mezcla de pulpa con la gelatina y removeremos enérgicamente hasta obtener una mezcla tersa y brillante.
4. Por último, batiremos la nata de montar, que debe estar muy fría, a velocidad media ya sea con una batidora de pie o con una batidora manual hasta conseguir una consistencia ligeramente firme.
5. Por último añadiremos la nata semimontada por tandas y con una espátula de silicona removeremos con movimientos envolventes hasta integrar. No mezclemos demasiado en esta etapa, ya que queremos cuidar el aire que incorporamos con el batido de la nata. Realiza siempre movimientos suaves y envolventes.
6. Vierte toda la mezcla en un copón grande o en vasos individuales y decora con las frutas que más te gusten.

Consejo: Puedes hacer tu pulpa natural triturando tu chirimoya fresca con una minipinza.