Confianza de los consumidores sigue levemente pesimista en abril, pero percepción de estabilidad está en nivel récord

Por el momento, la confianza del consumidor se mantiene relativamente estable, a pesar de las noticias económicas negativas, especialmente en términos de inflación. Eso se sigue de Índice de Percepción del Consumidor (Ipeco) Abril, elaborado por el Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (CEEN UDD), en conjunto con Pulso – La Tercera, que mostró un aumento marginal de 1,6 puntos en términos mensuales para el cuarto mes del año.

Con ello, la expansión del indicador alcanza los 52,5 puntos en doce meses, aunque según el estudio se mantiene en un nivel ligeramente pesimista.

Por estrato socioeconómico se observaron cambios mixtos. Mientras que en el estrato ABC1 la confianza avanzó a neutral y en C2 aumentó a levemente pesimista, en C3 volvió a caer a levemente pesimista, al igual que en D. No se registraron mediciones para el estrato E.

A nivel regional, aunque los movimientos de la confianza también fueron mixtos, se mantuvo levemente optimista. En la Región Metropolitana la confianza aumentó, pero se mantuvo en un nivel levemente optimista, mientras que en la Región del Bío-Bío, aunque disminuyó, también se mantuvo en un nivel levemente optimista.

En cuanto a la confianza hoy (índice conjetural), aunque cayó marginalmente (3,5 puntos), se mantuvo levemente optimista. Por su parte, la confianza en el futuro (índice de expectativas), aunque aumentó gradualmente (3,5 puntos), se mantuvo moderadamente pesimista.

En los últimos doce meses, la confianza hoy ha aumentado 100,2 puntos, principalmente por la mejora en la percepción del desempleo actual.

Las noticias económicas sobresalientes del mes fueron mixtas para la confianza del consumidor. El Imacec de febrero aumentó 6,8% en doce meses. Por su parte, el Índice de Actividad Comercial (IAC) creció 17,5% en marzo, lo que sumó un alza de 8,1% en doce meses. En cuanto a la inflación, el IPC de marzo fue de 1,9%, acumulando un crecimiento de 9,4% en doce meses.

Según el estudio de la UDD, durante abril las visiones de estabilidad en las percepciones registraron un incremento paulatino, alcanzando el 55,3% del total de respuestas a la encuesta.

Esto se explica por un aumento gradual de las opiniones neutrales del futuro, junto con un aumento marginal de las opiniones neutrales del presente. Por su parte, la media móvil trimestral de las perspectivas de estabilidad subió con fuerza.

Cristián Echeverría, director del Centro de Estudios en Economía y Empresa de la Facultad de Economía y Empresa de la UDD, comenta que “lo que llama la atención es el alto valor de las visiones de estabilidad, con un 52,4% de las visiones indicando estabilidad entre entre la percepción y el pasado reciente, y entre las expectativas y la percepción actual, este es un máximo histórico, ya que se midió este aspecto (10 años), lo que implica que más de la mayoría de los consumidores deberían estar teniendo niveles constantes de consumo, y esperan continuar tenerlos”.

En esta línea, apunta que “es muy interesante e incluso esperanzador, no debemos esperar sorpresas en el consumo en el futuro inmediato. Esto anticipa que el consumo de los hogares debe ser ‘planificado’ a pesar de las vicisitudes”.

Con respecto a confianza en el futuro de los consumidores (índice de expectativas), aunque aumentó gradualmente (3,5 puntos), se mantuvo moderadamente pesimista. Esto se debió a un fuerte aumento en la percepción de ingresos futuros, que fue parcialmente compensado por una marcada caída en la percepción de la situación económica futura, junto con una disminución marginal en la percepción de desempleo futuro.

la percepción de situación económica futura disminuyó 11,4 puntos, de moderadamente pesimista a pesimista. Este fue el resultado de un aumento en las opiniones pesimistas y neutrales, y una caída en las opiniones optimistas.

Mientras tanto, la percepción de desempleo futuro, aunque cayó 4 puntos, se mantuvo levemente optimista, debido a un aumento en las opiniones neutrales y una disminución en las opiniones optimistas.

Finalmente, la percepción de ingresos futuros avanzó 23 puntos, de extremadamente pesimista a moderadamente pesimista.