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Casa Blanca apura asistencia militar a Ucrania ante incertidumbre de apoyo futuro tras victoria de Trump

Martina E. Galindez

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Los planes de la Casa Blanca enviar miles de millones de dólares en asistencia de seguridad a Ucrania antes de que el presidente Joe Biden deje el cargo, con la esperanza de apuntalar el gobierno en Kiev antes de que Donald Trump asuma el poder el 20 de enero.

“El Gobierno planea avanzar (…) para poner a Ucrania en la posición más fuerte posible”, dijo un funcionario de la administración demócrata bajo condición de anonimato.

Trump ha criticado la ayuda de Biden a Ucrania, alimentando preocupaciones sobre el futuro del soporte al presidente Volodimir Zelensky bajo una Casa Blanca, un Senado y posiblemente una Cámara de Representantes controlados por los republicanos.

El presidente electo ha prometido poner fin a la guerra. “Tengo una muy buena relación con el presidente (ruso Vladimir) Putin. Y creo que si nosotros (los republicanos) ganamos, lo solucionaremos rápidamente”, dijo meses antes de las elecciones presidenciales.

Por supuesto, las declaraciones del magnate no hicieron más que aumentar la preocupación de Zelensky por su presencia en la Casa Blanca. Más aún si en uno de sus mítines Trump aventuró que Ucrania Debería haber cedido territorio a Rusia antes de la invasión de 2022.

La Cámara de Representantes aprobó por última vez ayuda a Ucrania, incluida la autoridad para Biden transfirió miles de millones de dólares en armas de los arsenales estadounidenses en abril.

De la autorización de transferencia de armas aprobada en abril Quedan 4.300 millones de dólaresque se suman a los 2.800 millones de transferencias que los legisladores aprobaron en anteriores medidas de gasto y a los 2.000 millones de financiación para la compra de nuevo armamento de la industria.

En total, esos 9.000 millones de dólares en ayuda militar Representarían un importante impulso para Ucrania.

Los analistas dicen que no es seguro que Washington apoye más ayuda a Ucrania. una vez que los republicanos controlen la Casa Blanca y al menos la mitad del Congreso, especialmente si Kyiv sufre reveses en el campo de batalla.