El escenario que enfrentan las nuevas generaciones de pensionados ha encendido las alertas en el mundo previsional.
¿La razón? Mayores expectativas de vida, rentabilidades inferiores a las históricas y el efecto de los retiros de fondos.
La situación futura fue reflejada en un cálculo realizado por la Superintendencia de Pensiones, tomando una de las variables determinantes para las pensiones: la rentabilidad.
Para la simulación, la Superintendencia de Pensiones proyectó un retorno promedio real anual del 3,38% para el fondo C a partir de 2024.
El ejercicio presentado por el Superintendente de Pensiones, Osvaldo Macías, en exposiciones públicas en Chile y el extranjero, establece que para una persona que comenzó a cotizar cuando se creó el sistema (1981) y se pensionó en 2023, la rentabilidad representó el 70,2% de su saldo total acumulado al momento del retiro, mientras que las cotizaciones que aportó explicaron el 29,80%.
Los supuestos del regulador consideran un afiliado que cotizó durante todo el ciclo laboral en el fondo C -con una rentabilidad promedio anual de 7,04%- y por el ingreso promedio, con una una tasa de crecimiento de 1,5% real anual. Además, estima un retorno de 3,38% promedio anual a partir de 2024 para el fondo C.
Las cifras cambian cuando el ejercicio se hace con aquellas personas que entraron al mercado laboral en 1991 y se pensionarán en 2033: la rentabilidad pesaría el 55% y los aportes 45%.
Quiebre en la tendencia
El cambio en la tendencia se exhibiría en la generación que comenzó a cotizar en 2001 y que se jubilará en 2043. Para ellos, los retornos representarían el 49,80% y las cotizaciones 50,20%.
Por último, para quienes ingresaron en 2011 y se pensionarán en 2053, la proporción será de 49,30% y de 50,70%, respectivamente.
El gerente de Estudios de la Asociación de AFP, Roberto Fuentes, explicó que “este cálculo depende de varias variables, pero es cierto que en el futuro los fondos de pensiones en Chile y en el mundo enfrentarán grandes desafíos debido a menores retornos de las inversiones”.
El ejecutivo señaló que “hasta ahora, en las cuatro décadas de existencia de las AFP, el rol de estas instituciones ha sido crucial al cuidar y multiplicar los ahorros de los trabajadores”.
La gerenta de estudios de Aurea Group, Natalia Aránguiz, sostuvo que la presentación del regulador no explica cómo llegó a los supuestos y por qué la rentabilidad anual sería de 3,38% a partir de 2024.
Sin embargo, dijo que “producto de las proyecciones económicas y financieras nacionales e internacionales, es de toda lógica suponer que la rentabilidad promedio de todos los fondos será menor en el futuro”.
Impacto en retornos
El gerente general de Ciedess, Rodrigo Gutiérrez, detalló que la composición de la cartera de fondos de pensiones ha transitado desde la totalidad en renta fija hacia un mayor espacio para la renta variable, además de un portafolio completamente nacional a una distribución equilibrada entre local y extranjera.
“Los mayores retornos históricos se explican por el buen desempeño de la renta fija nacional en los primeros años de funcionamiento del sistema, reduciéndose en la medida que se incorpora el componente variable (mayor riesgo), especialmente internacional”, explicó.
Agregó que las crisis de 2008 y 2011 tuvieron impactos significativos y “a nivel internacional también se observa una tendencia decreciente en las rentabilidades de los fondos de pensiones”.
Mayor ahorro
“Un escenario de menores rentabilidades futuras deja en evidencia que el peso de los aportes aumentará en importancia”, expresó Gutiérrez, quien agregó que “si bien es probable que el 6% no sea suficiente para mejorar pensiones futuras, lo que sí sabemos y tenemos certeza es que aumentar los aportes es un cambio en la dirección correcta”.
Aránguiz señaló que “quedarnos con el 10% de cotización es tan bajo que no hacer nada nos puede costar aún más caro”, aunque precisó que lo ideal sería pensar en un sistema de ahorro individual de 20%, con mucha gradualidad.
Para Fuentes, el desafío debe abordarse en dos frentes: promover que las personas puedan ahorrar más -elevando la tasa de cotización, donde el 6% adicional se destine a la cuenta individual- y modernizar el régimen de inversiones.
Respecto a este último punto, aseguró que lo más importante es “transitar hacia un enfoque de manejo de portafolios basado en métricas de riesgo, reduciendo la cantidad de límites”.
Además de esa idea, las AFP han propuesto otros cambios como elevar los límites de inversión en alternativos, modificar la cobertura de monedas, aumentar los máximos de derivados de inversión, entre otros.
“Con estas medidas podríamos proyectar un aumento de la rentabilidad real de hasta 1,5%”, estimó Fuentes y recordó que cada punto porcentual extra de retornos se podría traducir en un aumento de pensión de entre 20% y 25%.
Linda Tesar, académica de la Universidad de Michigan: “Es probable que la Fed no aplique un gran recorte de tasas, porque no hay ninguna razón para hacerlo”
Basada en los análisis de largo plazo que elabora el sistema de la Reserva Federal, la académica de la Universidad de Michigan, Linda Tesar, se declara optimista respecto a la mayor economía del mundo, marco en el que intuye que nos enfrentaremos a un relajamiento monetario gradual, sin recortes de tasas de gran magnitud, a partir de la reunión de la Fed de esta semana.
Tesar, que participó a comienzos de este mes del Congreso de la Sociedad Económica de Chile, organizado por la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad Andrés Bello, planteó a DF que la inflación se está reduciendo a un ritmo que le acomoda a la Fed, institución que conoce de cerca, como exmiembro del Consejo Académico Asesor de la Reserva Federal de Chicago y Nueva York.
También conocedora de la política económica fiscal, con la experiencia que tuvo como economista senior del Consejo de Asesores Económicos de la Oficina de Barack Obama, Taser señaló que le preocupa la falta de voluntad política que observa en EEUU para que el país se haga cargo de sus problemas de déficit y deuda.
“Soy optimista, porque enfrentamos una época terrible y la superamos. Tengo confianza en que tomarán (en la Fed) una decisión correcta”.
– De cara a la reunión de la Fed y un probable recorte de tasas. ¿Cómo evalúa a la economía estadounidense?
– No es sorprendente que hayamos tenido tasas de interés elevadas durante un tiempo. Creo que están haciendo el trabajo. Han hecho que las condiciones financieras sean un poco más estrictas y estamos viendo que el crecimiento se está desacelerando un poco.
Supongo que soy optimista. No veo una caída pronunciada, sino una desaceleración bastante pausada.
No quiero decir que no podamos tener turbulencias y que los mercados financieros no puedan reaccionar a algunas noticias y luego ajustarse. Obviamente, hay riesgos. Pero la mayoría de las cosas que estoy leyendo, que se basan en el pronóstico a largo plazo, sugieren que la inflación está bajando de la manera que le gustaría a la Fed. El desempleo y el crecimiento se moderan, pero no veo una caída pronunciada.
– ¿Qué riesgos advierte para ese pronóstico?
– Ahora bien, hay cosas que son riesgosas para un pronóstico, y una de ellas es que el mercado inmobiliario está muy ajustado en Estados Unidos. Supongo que eso es coherente con las altas tasas de interés, pero no estamos viendo una construcción de viviendas unifamiliares. Ese mercado está un poco restringido. Además, hay mucha incertidumbre global. Eso, definitivamente, me preocupa. Hay muchos conflictos a nivel mundial que creo que podrían plantear algunos desafíos reales.
– ¿Qué informes respaldan su optimismo?
– Me baso en las previsiones que leo del sistema de la Reserva Federal y también en las previsiones económicas en general. No estamos viendo revisiones o cambios bruscos en la inflación, en el desempleo… Todo ha seguido una trayectoria gradual.
No hace mucho enfrentamos una pandemia que fue un shock como ningún otro. Fue un momento muy difícil para hacer predicciones sobre la inflación. Y luego tuvimos la guerra de Ucrania. Fue una gran tarea para la Fed, pero respondieron y ahora vemos una moderación de la inflación.
La pregunta, entonces, es si la Fed irá hasta el final. ¿Realmente quieren pasar de 3% a 2,5% y luego a 2%, su objetivo declarado? Supongo es una pregunta abierta. Pero soy optimista, porque enfrentamos una época terrible y la superamos. Tengo confianza en que tomarán una decisión correcta en este momento.
– ¿De qué magnitud prevé el recorte de tasas de la Fed?
– Es probable que la Fed no aplique un gran recorte de tasas, porque no hay ninguna razón para hacerlo. Dada la volatilidad financiera y el hecho de que la inflación aún no está donde queremos que esté, se tratará de un ajuste gradual. Serán pequeños pasos hacia abajo. A menos que aparezcan nuevos datos que sugieran que mantener las tasas de interés elevadas realmente está ejerciendo presión. Pero, hasta ahora, espero que bajen gradualmente. Esa es mi intuición. Ese sería mi consejo.
Problemas de larga data
– Hay problemas de déficit y deuda que enfrenta EEUU incluso antes de la pandemia. ¿Le preocupan?
– En efecto, hay preocupaciones sobre el déficit del Gobierno de EEUU y su deuda acumulada desde hace mucho antes de la pandemia y me preocupa mucho no ver la voluntad política para enfrentar el hecho de que o no se puede hacer todo el gasto que se quiere hacer; o hay que aumentar los impuestos.
He estado escribiendo sobre esto, sobre cuánta deuda puede soportar EEUU. No veo la voluntad política para hacer el ajuste a menos que nos acerquemos a una crisis y no preveo una crisis. Por alguna razón, seguimos posponiendo el problema, pero es un problema real.
– ¿Qué riesgos concretos se asocian a ese problema?
– El riesgo es que los inversionistas globales no vean al Tesoro estadounidense como un activo seguro. EEUU tiene la ventaja de poder emitir deuda con una prima muy baja. Los inversionistas no exigen una prima por tener deuda estadounidense. Si los inversionistas empiezan a exigir una prima porque les preocupa la capacidad de pago, entonces la cosa se pone seria.
Esta es una realidad que Argentina y otros países han enfrentado, donde el servicio de la deuda se vuelve lo suficientemente grande como para obligar a un ajuste de cuentas con otras partes del presupuesto y recortes, obligan a los gobiernos a tomar decisiones realmente dolorosas. EEUU no ha tenido que tomar esas decisiones dolorosas.
Los acreedores de la Inmobiliaria La Poza S.A. -ligada al empresario Alfonso Fuenzalida- aprobaron la propuesta de acuerdo de reorganización judicial de la compañía, dejando atrás su proceso de liquidación. Con esto, la firma tiene luz verde para la venta de su proyecto habitacional a medio construir en Pucón.
La obra (emplazada en un terreno de 8.700 metros cuadrados en Camino Villarrica-Pucón 1200) considera un complejo de tres edificios con 170 departamentos (con avances que van desde el 75% al 90%).
A inicios de septiembre, Andrés Galecio y Nicolás Kuhlenthal, en representación de Kupange Spa, presentaron una oferta vinculante para la compra del inmueble y la totalidad de sus construcción por US$ 12 millones. La oferta está sujeta únicamente a la condición suspensiva de aprobarse la propuesta de acuerdo de reorganización de la inmobiliaria.
“La presente propuesta tiene por objeto el alzamiento y consecuente terminación del procedimiento concursal de liquidación que afecta a la proponente, de manera que pueda retomar el desarrollo de su giro en otros proyectos distintos del proyecto La Poza”, dijo Alfonso Fuenzalida en una presentación a la justicia el pasado 2 de septiembre.
“Se tiene por acordada la propuesta de acuerdo de reorganización judicial de Inmobiliaria La Poza S.A. y por aprobada”, dijo la jueza María Eugenia Silva, titular del 13º Juzgado Civil de Santiago en una resolución dictada a fines de la semana pasada.
En agosto de 2020, la firma solicitó a la justicia la apertura de un proceso de reorganización, con pasivos por más de $ 17.590 millones, aprobándose a fines de ese año.
Pero, dos años después, el banco Security solicitó declarar la liquidación de la inmobiliaria, acusando el impago de 16 pagarés. A través de la demanda de liquidación forzosa, la entidad financiera decidió hacer exigible el saldo adeudado por más de UF 77.633. La justicia decretó la quiebra de la empresa el 22 de junio de 2023.
Como parte del proceso de quiebra, se efectuaron tres remates del activo de la inmobiliaria (el proyecto La Poza); se partió con un mínimo de US$ 20 millones, luego US$ 16 millones y en el último se fijó un piso de US$ 12 millones. En ninguno hubo postores.
Fue a principios de mayo de este año que se oficializó el negocio. Copec adquirió la cadena Streat Burger -fundada por Diego Desmadryl y Nicolás Lipthay- con expectativas de potenciar su crecimiento a lo largo del país. Y así lo ha estado haciendo desde esa fecha.
Empresas Copec, el holding de la familia Angelini del cual forma parte la red de estaciones de servicio, publicó una nueva edición de su revista corporativa en la cual dio detalles de sus avances con la hamburguesería.
En un artículo dedicado a esta adquisición, el gerente de retail de Copec, Nicolás Rostagno, señaló que “vemos la oportunidad de llevar a Streat a todo Chile, tanto a través de su presencia en nuestras estaciones, como a través de la expansión en zonas urbanas residenciales y de oficinas con tiendas stand alone (independientes de las bencineras). Además, podemos poner a disposición las capacidades tecnológicas de Copec, nuestro programa de fidelización, plataformas digitales y red logística para acelerar el crecimiento de la marca”.
En San Francisco de Mostazal, el local de Streat “se tradujo no solo en altos niveles de venta, sino que también en un incremento de público para la estación”, dijo un ejecutivo de Copec.
Un “plan de expansión potente”
Los acercamientos entre ambas compañías comenzaron cuando los fundadores de Streat Burger buscaban un socio para expandirse más allá de Santiago y escalar la empresa, lo que los llevó a acordar el desarrollo de un plan piloto con Copec en la estación de San Francisco de Mostazal.
Según lo publicado en la revista de la empresa, esta tienda “se tradujo no solo en altos niveles de venta, sino que también en un incremento de público para la estación, atrayendo más tráfico y logrando una buena experiencia entre los clientes, según los análisis internos de Copec”.
La compañía tenía como objetivo potenciar la marca Pronto e incorporar otras nuevas “que hayan probado generar tráfico por sí mismas” y así se selló la adquisición.
Según expuso Rostagno, entre los puntos que jugaron a favor de Streat Burger para conquistar a Copec, destacó que la cadena “logra atraer a un cliente distinto al de Pronto, el cual está dispuesto a quedarse más tiempo para disfrutar de una experiencia gastronómica distinta. Es, en general, un cliente joven, digital y muy leal a la marca”.
Asimismo, agregó que “hay elementos comunes entre Copec y Streat Burger: el foco en el cliente, ofrecer una infraestructura excepcional a lo largo de todo el territorio y poner a disposición siempre productos de alta calidad”.
De esta manera, el piloto que comenzó en San Francisco de Mostazal concluirá el año con cinco locales Streat Burger en estaciones de servicio de “alto flujo” de Copec, según anotó la empresa en su revista corporativa.
Asimismo, la filial del grupo Angelini agregó que continuarán con un “plan de expansión potente, tanto dentro como fuera de la red”.
Copec y Streat Burger
Lipthay, uno de los fundadores de la cadena, en el mismo artículo, se alineó con las ambiciones de la firma: “Hoy, después de haber cerrado la venta y estar liderando el proyecto desde Copec, me siento muy orgulloso de haber logrado este cierre y poder proyectar la marca, su cultura y visión a lo largo de Chile, y por qué no, fuera de nuestras fronteras”.
La compañía inició sus operaciones en 2016, con un primer local ubicado en Isidora Goyenechea, en el barrio El Golf, en Las Condes. Posteriormente, se fueron ampliando y, para 2019, la marca ya había sumado locales en el Parque Arauco y en La Dehesa.
Streat Burger es parte de una serie de adquisiciones que ha estado realizando Copec en el último tiempo. Entre ellas, destacan Gogoro, una red de baterías intercambiables para motos eléctricas; Chiper, un sistema para organizar con eficiencia el suministro para almaceneros de barrio; la española Ampere, especializada en sistemas de almacenamiento inteligente de energía; y Blue Express, compañía de servicios logísticos y courier por la cual el grupo Angelini pagó unos US$ 250 millones en 2022.
La filial Copec, con esto, busca trabajar tres nuevas verticales de negocios fuera del tradicional: nueva conveniencia, energías y movilidad. “En particular, dentro de la nueva conveniencia, nos hemos puesto el desafío de ser los líderes en alimentación al paso en Chile, incorporando experiencias que sorprendan a nuestros clientes tanto dentro como fuera de nuestras estaciones de servicio”, dijo Rostagno en la revista de la empresa.