El Betis pierde otra vez en casa y no se sube al tren de la Champions

El Betis cayó en un gran partido. Cerrando la jornada sabatina de la fecha 20 de LaLiga, los verdiblancos volvieron a perder en casa. Fue un trepidante 3-4 ante el Celta de Vigo, cuya incertidumbre llegó hasta el último minuto. Una vez más, el portugués Rui Silva superó a Claudio Bravo en la portería bética.

En el anhelo de un lugar en la zona de clasificación para la próxima Champions, los pupilos de Manuel Pellegrini no podían fallar, sobre todo en casa: el estadio Benito Villamarín. Ante los gallegos tuvieron la opción de redimirse tras la caída a mitad de semana con el Barcelonacon lo que también se mostraron molestos por el arbitraje y el cobro de un gol con polémica.

El duelo tuvo un cambio constante durante su desarrollo. Era un péndulo. En los primeros 10 minutos ya llevaba dos goles. En el 6′, el Celta abrió el marcador con una volea de Jorgen Strand Larsen, al primer palo de Rui Silva. Afortunadamente para el Ingeniero, el sorteo llegó rápidamente. En el 10′, Juanmi tocó el balón, tras la intervención de Guardado en un córner, y superó al portero Iván Villar (en sustitución del lesionado Agustín Marchesín). El partido prometía.

El Betis se adelantó en el 23′, gracias a Sergio Canales, que definió con la zurda rasante. Tener el marcador a su favor no significó un plus para el anfitrión. Antes del descanso, el Celta encontró la igualdad. Gabri Veiga golpea a Rui Silva y hace el 2-2 a los 42 minutos. El portero portugués no tuvo su mejor día. El péndulo osciló de un lado a otro.

Sin necesidad de tener el control del balón, el Celta supo manejar la segunda parte. Golpeó en momentos precisos y bloqueó cualquier intento de los verdiblancos. En el 56′, Gabri Veiga hacía el 2-3 aprovechando las licencias defensivas concedidas por el local. Luego, en el 69′, la visita hizo el cuarto, un cabezazo del defensa Joseph Aidoo.

Pellegrini hizo cambios. Incluyó a Joaquín y Ayoze Pérez, aunque sin modificar la estructura tradicional de su diseño de juego. Se expuso a cada uno contra los celestes, que estuvieron cerca del quinto.

Se abrió una ventana para los béticos en el tramo final. Con la asistencia del VAR, se cobra penalti por mano manifiesta de Mingueza. Sin Borja Iglesias en el campo, Nabil Fekir fue el encargado de ejecutar y convirtió al 84′. En un partido tan cambiante como este, cualquier cosa podía pasar en el desenlace, más aún con 8 minutos añadidos. En ese último periodo, Luiz Felipe fue expulsado por agredir a Iago Aspas. Los ánimos terminaron caldeados.

Con esta nueva derrota, El Betis aparece sexto en la clasificación con 31 puntos, los mismos que el Villarreal, que perdió ante el Elche de Enzo Roco. Está a cuatro unidades del Atlético de Madrid, el último que está clasificado para la Champions. Los colchoneros empataron 1-1 con el Getafe.