Con la agudeza, la absurda y las características de la compañía Bonobo, su nueva obra “Human Stampede”, pregunta sobre el miedo, la violencia y la desesperación que ocurre al pensar en un proyecto colectivo a gran escala en Chile.
Una junta del vecindario debe decidir qué tratar con un grupo de personas callejeras que tomaron la plaza del vecindario. Una tienda Decohogar está al borde de la bancarrota y necesita un milagro para evitar morir. Una facción clandestina izquierdista dentro de los carabineros intenta hacer su primer ataque para hacer pública su adhesión al proyecto de transformación del país.
Estas tres historias están articulando la trama de esta asamblea que, bajo la dirección de Andreina Olivari y Pablo Manzi, trata de recuperar una idea de la comunidad que se pierde.
Como en sus trabajos anteriores (“donde viven los bárbaros”, “te encantará”, “themis”), la pieza surge de preguntas y discusiones sobre problemas actuales que se instalan en sus procesos creativos como empresa.
“Lo que llamó nuestra atención fue la sensación brutal de que las posibilidades de pensar sobre un cambio masivo ya a gran escala en Chile eran imposibles. Lo principal que percibimos fue la desesperación total con respecto a la idea de un futuro común, una erosión radical y la privatización de la vida social, y una narrativa narrativa en la que siempre hemos creído, pero que había caído en corta sensación de esta desesperación”, explica el director y la jugada de los jugadores, el director de la jugada, el pueblo.
Así surge la idea de Stampede, de hordas donde las personas que, ya sea espontáneamente u organizadas, terminan en un encuentro colectivo marcado por una característica de violencia, pero, al mismo tiempo, de una necesidad de hacer algo juntos.
“Esta estampida humana comienza a buscar lugares donde vemos que hay un desánimo, pero también muchos impulsos y deseos colectivos para transformar algo. El trabajo no da una respuesta, pero se posiciona frente a una mirada hacia el futuro, piensa en un futuro colectivo y lo resigna del contexto en el que vivimos”, dice la Directora Andreina Olivari.
Al elenco estable de la compañía, compuesto por Gabriel Cañas, Carlos Donoso, Paulina Giglio, Gabriel Urzúa y Guilherme Sepúlveda, Coca Guazzini se une por primera vez como actriz invitada. “Es un texto magnífico que habla de nuestro país, lo que le sucede a uno y los demás; en el fondo habla de lo que nos sucede a todos en este chile hoy”, dice Guazzini.
El público verá un trabajo dinámico que pasa por diferentes escenas, situaciones, personajes y espacios, así como para diferentes recursos técnicos y pintorescos.
En palabras de Olivari: “Eso implicaba varios desafíos nuevos, desde el trabajo de actuación experimentando la interpretación de varios personajes, la velocidad de las escenas cambia y creando un dispositivo escénico que nos permitiría contar la historia”. Y para esto, usan idiomas audiovisuales por primera vez, además de una puesta en escena colorida diseñada por los mostradores de auditoría.
Esta co -producción de GAM y Teatro A Thousand Foundation desarrolló su proceso de creación durante una residencia en Polonia y luego tuvo una pretemporada exitosa con funciones agotadas en el Festival de Teatro a mil 2025.
Temporada del 13 de junio al 29. Jueves a sábado a las 7:30 p.m. Domingo de 18.30 h.