Economia
La economía chilena recuperó el aire durante julio
Un día hábil adicional y las vacaciones de invierno se convirtieron en una óptima combinación para darle una mano a la actividad productiva en julio. Esta mezcla, según opinó la mayoría de analistas este viernes, se habría traducido en una expansión del Indicador Mensual de Actividad Económica (Imacec) en dicho período en torno a 2,5% respecto al mismo mes de 2023. O sea, atrás quedarían los débiles registros de mayo y junio, de 1% y 0,2%, respectivamente.
La minoría ve una opción que el crecimiento sea inferior a 2% y, en el otro extremo -lo más optimistas-, también aparece la opción de que supere el 3%. (ver tabla)
¿Qué explican las diferencias? La lectura más o menos positiva de lo que fueron los resultados del sector comercio y de la industria en julio, que informó este viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) y que es la antesala del resultado del Imacec que informará el Banco Central el próximo lunes.
“Los datos muestran una recuperación durante julio que fue bastante generalizada entre sectores económicos. Las cifras se ubicaron por sobre las expectativas de mercado, en particular en manufactura”, opinó el economista jefe para Chile de Credicorp Capital, Samuel Carrasco.
El economista jefe de BICE Inversiones, Marco Correa, afirmó que el sector de comercio estuvo levemente sobre lo esperado, pero que la principal “sorpresa” fue del rubro industrial.
“La producción de alimentos sorprendió, y además la minería, fue impulsada por una mejor ley mineral del cobre”.
A lo anterior, destacó OCEC UDP, se anticipa un impulso transitorio positivo en el componente servicios derivado de una semana adicional de clases que tuvo julio en comparación al mismo mes del año anterior, producto de la anticipación de vacaciones de invierno en junio.
A propósito de efectos esporádicos, Correa expresó que queda pendiente ver si el desempeño de las cifras sectoriales es puntual o algo más persistente. Y, además, advirtió que esta semana hubo otras señales que siguen siendo de “cautela”, como el estado del mercado laboral, las expectativas de los agentes y las colocaciones bancarias, donde en términos reales las comerciales volvieron a caer en términos anuales.
También expresó su inquietud por la baja en el empleo desestacionalizado y las caídas en las tasas de participación y empleo -que están revirtiendo el proceso de recuperación que habían exhibido-, el gerente de Estudios de Gemines, Alejandro Fernández.
Desde la óptica del economista jefe de Fynsa, Nathan Pincheira -quien se inscribe con la menor proyección para el Imacec de julio-, las cifras del INE tuvieron de dulce y agraz. En la dimensión positiva la manufactura y energía mostraron un dinamismo que consideró importante, rompiendo cierto estancamiento del año; mientras que calificó como más bien plana la actividad en la minería, a diferencia de los avances de meses anteriores.
Por el contrario, señaló, las cifras del comercio estuvieron bastante negativas, de alguna forma retornando a la normalidad luego del efecto Cyber Day observado en junio.
Un mejor tercer trimestre
La proyección de Imacec de los agentes también para julio también dio luces sobre lo que podría pasar con el tercer trimestre en su conjunto. Así, en función de si sus pronósticos se acercaron más a una expansión de 2% o de 2,5%, el resultado podría ser mejor o mucho mejor que el débil 1,6% de crecimiento observado en abril-junio.
“Esperamos que el tercer trimestre sea mejor que el trimestre previo y, en general, durante la segunda mitad del año deberíamos ver una aceleración en el componente no minero. Por el momento, mantenemos nuestra proyección de PIB para el año en 2,5%, aunque con sesgo a la baja, dada la debilidad mayor a la esperada del segundo”, dijo Carrasco.
En cambio, el economista jefe de EuroAmerica, Felipe Alarcón, anticipó un avance relativamente débil de 1,6% anual para el cuarto acelerar sobre el 3%.
Pincheira prevé un alza de 1,5% en julio-septiembre frente al mismo período del año anterior.
Un punto más podría concretarse también de acuerdo a Correa si en julio la expansión es de 2,5%. “De concretarse esta cifra daría un buen pie al trimestre, donde podíamos ver un crecimiento de 2,6%”, dice.
En BTG Pactual, a su vez, esperan ver una aceleración en el ritmo de crecimiento del PIB en el tercer cuarto y proyectan un crecimiento en el rango entre 2,3% y 2,7% anual.