Ni el plebiscito ni las Fiestas Patrias lograron levantar del todo el ánimo del sector empresarial

Ni el resultado del plebiscito para salir del proceso constituyente -donde se impuso la opción Rechazo al texto propuesto de la nueva Carta Magna- ni las celebraciones de Fiestas Patrias en un ambiente casi prepandemia fueron suficientes para cambiar por completo el ánimo en la mundo de los negocios a nivel nacional durante el mes de septiembre.

A lo sumo, como se refleja la medición realizada por el Centro de Estudios en Economía y Negocios (CEEN) de la Universidad del Desarrollo, del Índice de Confianza Empresarial (ICE)sirvió para moderar el deterioro observado en los meses precedentes.

De hecho, el indicador general se mantuvo en un nivel “moderadamente pesimista” a pesar de avanzar cuatro puntos como parte de un escenario donde los números rojos de los sectores construcción, industria y minería también se atenuaron.

En el primero, después de haber fluctuado en torno a un estatus “pesimista” desde finales del año pasado, en septiembre mostró una mejora, avanzando un nivel, de “pesimista” a “moderadamente pesimista” (+10 puntos).

En este repunte influyó una mejor percepción sobre la situación de la economía y los negocios, así como lo relacionado con la contratación de trabajadores a tres meses.

El mismo tránsito lideró la industria gracias principalmente a expectativas más favorables sobre la actual demanda nacional e internacional.

El ICE de la minería escaló 10 puntos para ubicarse en el casillero de leve pesimismo. Aquí resultaron relevantes resultados recientes más positivos, incluso por encima de las expectativas, así como percepciones menos pesimistas sobre la situación empresarial y económica para los próximos tres meses.

Esto incluso logró compensar la caída de alrededor de 1% que experimentó el precio del cobre en septiembre para ubicarse en US$ 3,47 la libra.

La proximidad de los vientos primaverales también se sintió algo en el campo de la agricultura pero no lo suficiente como para liberar los ánimos de un estado “extraordinariamente pesimista”.

Factor de costo de entrada

En el terreno de los retrocesos en la confianza, destacó el sector financiero (-16), que pasó de “ligeramente optimista” a “neutral” -es decir, ni bueno ni malo- principalmente como consecuencia de una visión más negativa de la marcha. de la economía y menores inversiones esperadas en los próximos tres meses.

En el sector comercio, el ICE también exhibió una disminución -pero sin desequilibrarlo- también por una visión menos favorable de lo que sucede con la actividad económica y los negocios en tres meses.

En este contexto, se observó una moderación en la percepción negativa de los empresarios sobre la situación empresarial en los últimos meses, en relación a lo esperado.

Un factor gravitante del desánimo, junto a la misma preocupación que genera la desaceleración del crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), ha sido la inflación.

Entre los factores medidos por la CEEN-UDD, el relacionado con el costo de los insumos volvió a caer en septiembre para ubicarse en el nivel de mayor pesimismo dentro de la escala de valores considerada.

El deterioro también afectó el nivel de inventarios durante el noveno mes del año.