Economia

Proyecciones económicas: ¿Quién acierta más, Hacienda o el Banco Central?

Published

on


Javascript está deshabilitado en su navegador web.
Por favor, para ver este sitio correctamente,
habilitar javascript.

Para obtener instrucciones para habilitar javascript
En su navegador, haga clic aquí.

No es tarea fácil prever el futuro, pero hay quienes logran acercarse bastante. Cada año, las autoridades del Tesoro, el Banco Central y distintos analistas, entidades financieras, académicos y expertos de diversas áreas lanzan sus pronósticos sobre dos de los indicadores económicos más importantes para cualquier país: el crecimiento económico y la inflación.

Las proyecciones de crecimiento se han convertido en un tema recurrente en este Gobierno. El año pasado el mercado fue mucho más pesimista que el Tesoro y, con el Proyecto de Ley de Presupuestos para 2025, ocurre lo mismo. Hace unas semanas, en Señal DF, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, defendió su proyección de crecimiento del 2,7%, que está por encima del rango del Banco Central. “En los dos presupuestos anteriores nuestras proyecciones de crecimiento eran superiores a las del mercado y terminaron siendo correctas. Es decir, no es que nosotros fuéramos optimistas, sino que el mercado estaba siendo pesimista”, afirmó.

Si bien históricamente hay casos en los que las estimaciones de ambas entidades están alineadas, también hay momentos en los que la proyección del Tesoro ha sido mayor. Y en realidad, al observar 30 años de datos (considerando los que se entregan en septiembre de cada año), ambas organizaciones tienen un desempeño similar a la hora de acertar, aunque el Ministerio de Hacienda tiene una ligera ventaja en términos de precisión. en las proyecciones de inflación y crecimiento.

Uno de los primeros pasos que da el Poder Ejecutivo para señalar su visión de los números del próximo año es anunciar a través del Estado de la Hacienda Pública en septiembre de cada año. Este informe, que se presenta al inicio de la tramitación de la Ley de Presupuesto, incluye los supuestos clave considerados para calcular los ingresos y gastos de la nación en el próximo período. Es aquí donde el Gobierno ofrece una primera pista de su estimación del comportamiento futuro de la economía.

El Banco Central, desde el año 2000, publica tres veces al año su Informe de Política Monetaria (IPoM), donde entrega sus proyecciones de crecimiento e inflación. Antes de la creación del IPOM, presentó el Informe de Evolución de la Economía y Perspectivas para el año siguiente, el cual también fue entregado al Senado y al Ministerio de Hacienda en el mes de septiembre.

Las proyecciones de ambas organizaciones –el Ministerio de Finanzas y el Banco Central– se consideran una especie de mapa de navegación. En este contexto, revisamos las proyecciones realizadas por estas dos instituciones en el noveno mes de cada año durante los últimos 30 períodos, para analizar cuál estuvo más cerca de acertar en sus pronósticos sobre crecimiento económico e inflación.

Crecimiento económico

Si nos fijamos en las proyecciones de crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB), el Ministerio de Hacienda destaca por haber acertado exactamente en dos ocasiones. La primera fue en septiembre de 1993, cuando Alejandro Foxley era ministro, y la cartera preveía un crecimiento del 5% para 1994, que se concretó tal cual. La segunda vez fue en el año 2000, bajo el gobierno de Eduardo Frei Ruiz-Tagle, con Eduardo Aninat como Ministro de Hacienda, quien también acertó con un crecimiento de exactamente 5%.

El Banco Central, por otra parte, acertó en su proyección de crecimiento también en el año 2000, cuando Carlos Massad era presidente. Aunque esa fue la única vez en 30 años que el Banco Central logró pronosticar con precisión el crecimiento económico, en términos generales, ha tenido más éxito que el Ministerio de Finanzas en las proyecciones. Mientras tanto, el Banco Central acertó con sus proyecciones dentro de los rangos establecidos. en los años 1994, 2006, 2011 y 2022, con Roberto Zahler, Vittorio Corbo, José de Gregorio y Mario Marcel, respectivamente, como presidentes del organismo. En términos de proyecciones dentro de rangos, el Banco Central tiene la ventaja.

Inflación

En cuanto a las proyecciones sobre el nivel de precios, el Ministerio de Finanzas ha logrado tres éxitos exactos en los últimos 30 años. Estos fueron en 2011 (3,3% de inflación), con Felipe Larraín como ministro durante el primer mandato de Sebastián Piñera; en 2016 (3,8%), bajo la administración de Michelle Bachelet con Rodrigo Valdés al frente del Tesoro; y en 2020 (3%), nuevamente con Piñera en la presidencia y Felipe Larraín al frente de la cartera.

El Banco Central, por su parte, acertó en dos ocasiones en sus proyecciones de inflación: en 2001, cuando era de 3,6% y Carlos Massad era el presidente del organismo, y en 2011, cuando la inflación era de 3,3%. , con José de Gregorio en la presidencia.

En este caso, gana el Tesoro.

los errores

Más allá de los éxitos puntuales, son pocos los años en los que las proyecciones de ambas entidades se alejan a más de un punto porcentual del resultado real de inflación y crecimiento. Y en las ocasiones en que esto ocurrió, esta distorsión coincide con situaciones de crisis económica o imprevistos.

Uno de los años con mayor diferencia entre las proyecciones y la realidad fue 2020, cuando el país, como gran parte del mundo, se vio gravemente afectado por la pandemia de Covid-19. Ese año, el Ministerio de Hacienda, bajo la dirección de Felipe Larraín, proyectó un crecimiento del PIB de 2,6%, mientras que el Banco Central estimó un rango de entre 2,75% y 3,75%. La realidad fue muy distinta: la economía se contrajo un 6,1% debido al impacto devastador de la pandemia. Pese a ello, la inflación se mantuvo controlada en torno al 3%, como habían anticipado ambas instituciones.

Otro caso significativo ocurrió en 2022, cuando la inflación se disparó hasta el 11,6%, cifra muy por encima de las proyecciones del Banco Central y el Ministerio de Hacienda, que se equivocaron por una diferencia de aproximadamente 7 puntos porcentuales. Esta elevada inflación se atribuyó, en parte, a factores globales como el aumento de los precios de la energía y los alimentos, las interrupciones en las cadenas de suministro provocadas por la pandemia y el conflicto bélico en Ucrania. A nivel local, medidas económicas como retiros de fondos de pensiones y estímulos fiscales también contribuyeron al aumento de la demanda, ejerciendo presión sobre los precios.

La crisis financiera mundial de 2008 fue otro acontecimiento que afectó la precisión de las predicciones de crecimiento e inflación. A nivel mundial, las economías experimentaron una desaceleración que no fue fácil de prever. Ese año, la inflación en Chile alcanzó el 8,7%, mientras que el Banco Central y el Ministerio de Hacienda habían proyectado una inflación del 3% y 4,2%, respectivamente. Además, en 2009 el PIB cayó un 1,1%, cuando las estimaciones iniciales apuntaban a un crecimiento cercano al 4%. La crisis tuvo un impacto prolongado, pero la inflación se moderó hacia el final del período.

saldo final

En general, las proyecciones tanto del Tesoro como del Banco Central se acercan a las cifras finales. Por ejemplo, si se analizan las proyecciones de crecimiento económico realizadas por el instituto emisor en los últimos 30 años, se observa que en el 53% de los casos, la previsión se desvió menos de un punto porcentual del resultado real. Por su parte, el Ministerio de Hacienda tiene un porcentaje ligeramente inferior, con un 43% de aciertos en ese mismo margen de error.

Si se mira la inflación, ambas mejoran, pero el instituto emisor estuvo cerca en más ocasiones: el 57% de sus estimaciones tuvo una desviación inferior al 1%. El Tesoro, en tanto, logró con ese margen el 53% de sus proyecciones.

Finalmente, considerando quiénes tuvieron las menores diferencias, en promedio, entre las proyecciones de crecimiento e inflación y los resultados reales, se puede afirmar que el Ministro de Hacienda bajo cuyo mandato se hicieron las proyecciones más certeras fue Nicolás Eyzaguirre durante Bachelet I. En consecuencia , el presidente del Banco Central que fue más preciso entre sus pares, basándose en el menor promedio de diferencias entre proyecciones y resultados reales, fue José de Gregorio.

Tendencias

Exit mobile version