Con la mirada puesta en los desafíos que enfrenta la compañía de distribución eléctrica que atiende a más de 3,2 millones de clientes entre las regiones de Arica y Parinacota y La Araucanía, se realizó este martes la junta de accionistas de CGE.
En un comunicado, difundido por la compañía esta tarde, se indicó que en la instancia, el gerente general de CGE, Iván Quezada, realizó un balance de la actividad de la firma, enfatizando en los desafíos que ha implicado para la empresa la implementación de un extenso plan de inversiones, el que el año pasado redundó -dijeron- en la mejora en los índices de calidad de servicio de la Compañía.
“En lo que respecta a la calidad de servicio, el 2023 fue un muy buen año. Mejoramos los indicadores de tiempo medio de interrupción internas por cliente (SAIDI) interno de la compañía, de 7,2 horas a 5,3 horas, en comparación al año 2022, lo que significó una reducción del 26% de dicho indicador. A nivel industria, el SAIDI alcanzó a 13,58 horas en 2023, lo que representa una reducción de una hora respecto de 2022. El SAIDI 2023 alcanzó el mejor nivel en seis años, situación que fue especialmente destacada por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC)”, señaló el ejecutivo.
Asimismo, CGE sostuvo en su escrito que también realizó extensos planes de mantenimiento. Según detalló, se concretaron inversiones por $ 20.653 millones en poda y despeje de vegetación, con un alcance efectivo de 2,194 kilómetros de redes de Media y Baja Tensión intervenidos, de las que un 7 % se realizaron en la Zona Norte, 29 % en la Zona Centro y 64 % en la Zona Sur.
Quezada también se refirió al desempeñó de los resultados de CGE en 2023. “Pese al complejo escenario económico, el año pasado, la compañía logró mantener una posición financiera y un crecimiento sostenido en sus resultados operativos. El EBITDA consolidado durante 2023 alcanzó los $156.074 millones, un incremento del 4,63% respecto del 2022. En el ejercicio, la utilidad atribuible a los controladores alcanzó a $12.089 millones en comparación con los $38.433 millones del año 2022”, sostuvo.
Inversiones
En el comunicado, se destacó que las inversiones consolidadas de la compañía ascendieron a $ 214.799 millones, focalizadas en el crecimiento orgánico de distribución, renovación de equipos y mejoras en calidad de suministro para el cumplimiento de la Norma Técnica del sector e iniciativas orientadas al control de pérdidas de energía.
El año pasado, la energía operada disminuyó -precisaron- en un 0,18% con respecto al ejercicio anterior, alcanzando 16.458 GWh. Por otro lado, la red de clientes aumentó en un 2,4%, alcanzando así 3.284.060 clientes durante 2023.
Enjoy y sus acreedores acordaron, aplazar la junta de acreedores para votar el plan de reorganización de la empresa.
Esta instancia estaba convocada para este viernes 26 de julio en el 8vo Juzgado Civil de Santiago, sin embargo, según un comunicado emitido por la operadora de casino, se postergó tras un acuerdo unánime y “con el objetivo de afinar los últimos detalles del Plan de Reorganización Judicial y cerrar la obtención de financiamiento”.
Según lo anunciado, la nueva asamblea se realizará dentro de 10 días hábiles judiciales, por lo que se llevará a cabo el próximo 7 de agosto.
Cabe destacar que en dicha junta deliberativa los acreedores votarán la propuesta que busca dar continuidad a sus operaciones, cumplir sus obligaciones con sus trabajadores, clientes, proveedores y accionistas, y proyectar el desarrollo hacia el futuro. El nuevo plan busca maximizar la recuperación de deudas con los acreedores, a través de la reprogramación de los pasivos, y una reestructuración societaria de Enjoy.
En enero de este año, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) inició un estudio de mercado sobre la educación superior chilena para analizar la evolución competitiva de este segmento. Sin embargo, casas de estudios han llegado a tribunales para reclamar contra la entidad por el pedido de datos personales en el marco de dicho informe.
Fue así que, en dos informes presentados ante la Corte de Apelaciones de Santiago, en respuesta a recursos de protección interpuestos por la Universidad de Santiago de Chile (Usach) y por la Universidad de Chile contra solicitudes de información, la FNE destacó las atribuciones que posee para solicitar información.
Los informes sobre las acciones de la Usach y de la Universidad de Chile se suman al ingresado el 11 de julio en respuesta a un recurso de protección de similares características presentado por la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC).
La FNE dio cuenta de las atribuciones que -dijo- expresamente le confiere la ley para requerir información y tratar datos personales; descartó que haya actuado de manera arbitraria, pues indicó que en todo momento lo hizo de manera fundada, razonable y proporcionada; y expresó que no hay una afectación de las garantías constitucionales invocadas por las recurrentes.
Además, la entidad expuso a la Corte que estas acciones no tienen precedentes en la institucionalidad de libre competencia nacional y que acceder a lo solicitado tendría consecuencias sistémicas que “podrían extenderse mucho más allá de los estudios sobre la evolución competitiva de los mercados que el legislador expresamente ha encomendado realizar a la FNE, causando un incalculable detrimento a las capacidades de este servicio para cumplir con su cometido legal en prácticamente toda la extensión de sus funciones y, con ello, un grave menoscabo del interés general proyectado al orden económico nacional”.
En sus respuestas, la FNE también solicitó a la Corte que rechace ambos recursos, considerando su carácter extemporáneo y que no son la vía idónea para impugnar solicitudes de información, como sí lo son los procedimientos ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), que ya se pronunció sobre el oficio a través del cual se pidió la información, manteniéndolo vigente en todas sus partes.
Supuestas amenazas
En su acción, la Usach señaló que es una institución pública, que no debe ser tratada como un agente económico privado que ha infringido la ley, y acusó que la FNE habría incurrido en “amenazas de sanciones pecuniarias y privativas de libertad” al solicitar la entrega de información de estudiantes y exestudiantes.
Al respecto, la Fiscalía respondió que la ley la autoriza expresamente para requerir información tanto a agentes o instituciones privadas como a diversas entidades del Estado y que estas últimas tienen, además, un deber especial de colaboración cuando son órganos de la Administración del Estado.
Asimismo, aportó antecedentes para negar las amenazas señaladas y que la institución “carece de atribuciones autónomas para la imposición de cualquier tipo de sanción o apremio respecto de las entidades y agentes económicos que intervienen en sus investigaciones o estudios de mercado”.
En el caso de la Universidad de Chile, el recurso de protección coincide con el argumento de la Usach respecto al carácter de institución pública de la casa de estudios y alude también a supuestas infracciones a la Ley de Protección de Datos Personales en la solicitud de la FNE.
Deberes de confidencialidad
En este sentido, la Fiscalía sostuvo que su solicitud de información fue emitida en el ejercicio de las atribuciones que le confiere la ley y que es justificada y proporcional a la labor que realiza, cuyo desarrollo en ocasiones hace imprescindible solicitar y analizar antecedentes que califican como datos personales, encontrándose facultada legalmente al efecto. Planteó que, precisamente por lo anterior, es que la ley sujeta a los funcionarios de la Fiscalía a estrictos deberes de confidencialidad.
Otro antecedente que presentó la FNE es que 45 instituciones de educación superior -tanto públicas como privadas- respondieron solicitudes de información idénticas a la impugnada por la Usach y por la Universidad de Chile.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.