Food Delivery Brands, la sociedad dueña deTelepizza,puso a la venta sus filiales en Latinoamérica, según fuentes del mercado consultadas por el medio hispano, Expansión, que precisan que los mercados afectados son principalmenteMéxico, Colombia, Ecuador y Chile.La cadena ya cuenta con asesores financieros locales para sacar al mercado estos procesos, por los quepodría obtener algo más de 50 millones de euros,aproximadamente.
México es el mercado que cuenta con un mayor valor, según explican estas mismas fuentes. Se podrían obtener en torno a US$ 33 millones por la filial azteca. Por la venta de Ecuador, cuyo mandato tiene la oficina en el país de la firma española de fusiones y adquisiciones GBS Finanzas, se podrían recaudar unos US$ 16 millones, cuantía similar a la de Colombia y Chile.
En Latinoamérica, el grupo cuenta con 127 establecimientos de Telepizza (82 en Chile y 45 en Colombia), de los cuales 68 los tiene en propiedad y el resto están franquiciados. Por su parte, dispone de 473 locales de Pizza Hut en Chile (75), Colombia (37), Ecuador (74) y México (287), de los cuales 356 restaurantes son propios y el resto franquicias.
Telepizza y Yum Brands acordaron el año pasado la ruptura de su acuerdo de aperturas y Food Delivery Brands, por el que dejó de ser su masterfranquiciador de Pizza Hut en Latinoamérica a excepción de Chile, Colombia, Ecuador y México a partir del 1 de enero de 2024.
Toma de control
La venta de las filiales latinoamericanas se está produciendo a las puertas de que los bonistas de Telepizza, entre los que destacan fondos oportunistas de gestoras como Blantyre, Oak Hill y Fortress, tomen el control de la cadena, con la capitalización de préstamos por importe cercano a US$ 270 millones de euros que les darán más del 90% del accionariado del grupo español.
Una dura respuesta presentó la empresa GTD a la demanda iniciada por la fintech Ionix, que acusó a la gigante de las telecomunicaciones -uno de los principales proveedores de servicios digitales e internet en Chile y Perú, y que enfrentó un potente ciberataque en octubre del año paso que afectó a miles de corporaciones.- de negligencia inexcusable, y pidió indemnización por baja de ingresos y daño a su imagen.
“Desde un inicio, la demanda da cuenta de hechos que resultan a lo menos confusos y poco claros, en donde falta información y, en definitiva, no se logra comprender de manera inequívoca las imputaciones que formulan”, dijo el abogado de GTD, Rodrigo Almarza Carvajal a la justicia.
Añadió que, cuando Ionix hace referencia al ciberataque sufrido por GTD, en la demanda se señala que, una consecuencia de lo anterior es que se dieran “de baja todos sus servicios, incluyendo los contratados por nuestra representada”, para, acto seguido, agregar que los servicios nunca habrían vuelto a estar disponibles para Ionix y, a dicho respecto, señala que GTD “ni siquiera pudo restablecer los servicios”.
El abogado sostuvo que, en varias ocasiones la demandante afirmó que GTD habría sido incapaz de restablecer los servicios, a partir del 23 de octubre de 2023, esto es, desde el ciberataque.
“Lo cierto es que, sin embargo, de los dichos contenidos en la demanda no se especifica si, por una parte, todos los servicios contratados por Ionix habrían sido dados de baja y habrían quedado inoperativos y sin ser restablecidos, ya sea de manera absoluta o parcialmente”, sostuvo.
Luego, a su juicio, tampoco especificó en la demanda si incluso a la fecha de interposición de la misma, los servicios estaban completamente inoperativos o si ello ya no era así.
Junto a esto, apuntó a los presuntos costos de migración de los servicios, desde las plataformas de GTD a una nueva empresa y traslado de información, lo que, sostiene, no resulta coherente con las alegaciones formuladas en la demanda.
“En efecto, para poder migrar información resulta necesario que se pueda acceder a la misma, lo que no es consistente con la circunstancia de que, eventualmente, no se hubiera vuelto a prestar servicio alguno a Ionix y que ésta jamás habría podido acceder a su información, como lo indica previamente en la demanda”, señaló GTD, que agregó: “En consecuencia, resulta vaga y confusa la relación de hechos respecto de los servicios que se habrían inhabilitado a Ionix; y si, en definitiva, sus alegaciones dirían relación con un incumplimiento total de las obligaciones de GTD o parcial de las mismas”.
Luego, insistió en que la demanda “resulta en muchos aspectos poco clara, confusa e ininteligible por cuanto existen una serie de hechos cuyo relato no se logra comprender a cabalidad, teniendo especial consideración en el aspecto técnico del libelo”.
El grupo -fundado y presidido por Juan Manuel Casanueva- partió en 1979 y actualmente es uno de los principales actores de la industria de telecomunicaciones, entregando servicios en los segmentos residenciales y comerciales en la zona centro norte del país, a través de su filial GTD Manquehue, y en la zona sur a través de su filial Telsur.
A esto se suman servicios a clientes empresa, corporaciones y mayoristas a través de distintas filiales.
La demandante
Ionix fue fundada en 2009 por Nicolás Luksic, hijo de Guillermo Luksic; es una reconocida plataforma que implementa sistemas de pago móviles, que tiene como clientes a Banco de Chile, Enex (Shell Chile), Unired, CCU, Mach BCI y Transbank. Su demanda es la primera de una compañía en contra de GTD tras el ciberataque.
Junto con pedir la terminación de contrato, Ionix anunció que solicitará una indemnización de perjuicios tras el ataque, que también afectó a entidades gubernamentales como el Servicio de Impuestos Internos (SII), Fonasa, Correos de Chile, la Comisión Ingresa (vinculada al pago de créditos como el CAE) y la Firma Electrónica Avanzada (FEA).
“Los daños ocasionados por la demandada incluyen toda pérdida de contratos, clientes y servicios, con todos los ingresos asociados, que Ionix ha dejado y dejará de percibir por el incumplimiento de GTD”, dijo la Fintech.
Además, sostuvo que los daños incluyen todos los costos asociados a la migración de los servicios a una nueva empresa. “Los perjuicios también deben incluir toda la disminución de ingresos, y daño a la imagen corporativa de Ionix, los cuales son causa directa del incumplimiento de GTD”, sostuvo la firma.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, presentó este martes un paquete de fuertes alzas arancelarias a varias importaciones chinas, incluidos vehículos eléctricos, chips y productos médicos, arriesgándose a un enfrentamiento con Beijing durante un año electoral, en un intento de atraer a votantes que califican mal sus políticas económicas.
China tomó inmediatamente represalias. Su Ministerio de Comercio dijo que Beinjing se oponía a la subida de aranceles estadounidense y que tomaría medidas para defender sus intereses.
Biden mantendrá los aranceles establecidos por su predecesor republicano Donald Trump y aumentará otros, dijo la Casa Blanca en un comunicado en el que citó “riesgos inaceptables” para la “seguridad económica” de Estados Unidos, planteados por lo que considera prácticas chinas desleales que están inundando los mercados mundiales con productos baratos.
Las nuevas medidas afectan a US$ 18 mil millones en bienes importados de China, entre los que se incluyen acero y aluminio, semiconductores, baterías, minerales críticos, paneles solares y grúas, dijo la Casa Blanca. El anuncio confirmó informaciones anteriores de Reuters.
Desequilibrios comerciales
Estados Unidos importó US$ 427 mil millones en bienes de China en 2023 y exportó US$ 148 mil millones a la segunda economía del mundo, según la Oficina del Censo de Estados Unidos, una brecha comercial que ha persistido durante décadas y se ha convertido en un tema cada vez más sensible en Washington.
“Está muy claro que China ha seguido incurriendo en prácticas desleales, como la transferencia forzosa de tecnología, el robo de propiedad intelectual y las subvenciones injustas“, dijo a Reuters Lael Brainard, asesora económica de Biden.
“El presidente está tomando medidas duras, pero también estratégicas. Se centra en unos pocos sectores clave en los que China ha creado un enorme exceso de capacidad”.
La representante de Comercio de Estados Unidos, Katherine Tai, dijo que los aranceles revisados estaban justificados porque China estaba robando propiedad intelectual estadounidense.
Pero Tai recomendó exclusiones arancelarias para cientos de categorías de importación de maquinaria industrial procedente de China, incluidas 19 de equipos de fabricación de productos solares.
Golpe al libre comercio
A pesar de que las medidas de Biden estaban en línea con la premisa de Trump de que se justifican medidas comerciales más duras, el demócrata apuntó a su oponente en las elecciones de noviembre.
La Casa Blanca dijo que el acuerdo comercial de Trump con China para 2020 no aumentó las exportaciones estadounidenses, ni impulsó los empleos en la industria manufacturera estadounidense, y afirmó que los aranceles generalizados del 10% sobre los bienes de todos los puntos de origen que Trump ha propuesto frustrarían a los aliados y elevarían los precios.
Trump ha propuesto aranceles del 60% o más sobre todos los productos chinos. “No es inteligente, no está dirigido y es muy costoso para los consumidores estadounidenses”, dijo Brainard.
Responsables del Gobierno dijeron que sus medidas están “cuidadosamente orientadas”, combinadas con la inversión interna, planeadas con aliados cercanos y que es poco probable que empeoren un brote de inflación que ya ha enfurecido a los votantes estadounidenses y puesto en peligro la candidatura de reelección de Biden, además restaron importancia al riesgo de represalias por parte de Beijing.
Los analistas han advertido de que un conflicto comercial podría aumentar los costos de los vehículos eléctricos en general, perjudicando los objetivos climáticos de Biden y su propósito de crear puestos de trabajo en el sector manufacturero.
Biden ha dicho que quiere ganar esta era de competencia con China, pero no iniciar una guerra comercial que podría perjudicar a las economías mutuamente dependientes. En los últimos meses ha trabajado para aliviar la tensión en conversaciones con el presidente de China, Xi Jinping.
Los dos candidatos a la presidencia de Estados Unidos se han apartado radicalmente del consenso de libre comercio que reinó en Washington, un periodo culminado con la entrada de China en la Organización Mundial del Comercio en 2001.
China ha dicho que los aranceles son contraproducentes y corren el riesgo de exacerbar la tensión. La imposición más generalizada de aranceles por parte de Trump durante su presidencia de 2017 a 2021 desencadenó una guerra arancelaria con China.
El Gobierno mejoró sus estimaciones de crecimiento para este año, en línea con un desempeño de la actividad que ha estado por encima de lo proyectado.
Así lo reveló el ministro de Hacienda, Mario Marcel, en el marco de la presentación del Informe de Finanzas Públicas (IFP) del primer trimestre del actual ejercicio, en la comisión del ramo del Senado.
En la instancia, el Ejecutivo mejoró en dos décimas su proyección de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) de este año, desde un 2,5% a un 2,7%.
Así, el Gobierno se ubica en la parte alta del rango propuesto por el Banco Central en el último Informe de Política Monetaria (IPoM) del mes pasado, entre 2% y 3%.