Fue pasadas las 12.00 de la tarde, que el Presidente Gabriel Boric llegó hasta la losa del Grupo 10 de la Fuerza Aérea (Fach) -flanqueado por las ministras Carolina Tohá, Camila Vallejo y el canciller Alberto van Klaveren– para participar de algo que probablemente nunca imaginó que iba a ocurrir durante su mandato: la despedida del expresidente Sebastián Piñera, quien falleció en la tarde de ayer.

De traje negro, camisa blanca y anteojos de sol negros, Boric se posicionó para esperar a que llegara el avión de la Fach que traía el féretro con los restos del exmandatario, desde Valdivia. Cuando aterrizó, desde adentro bajó la exprimera Dama, Cecilia Morel, acompañada de sus hijos y nietos.

En ese momento, solemnemente Boric se acercó para darle su pésame. Fue uno por uno, incluidos los nietos, entregando su apoyo. Fue con Morel, que el Mandatario se detuvo más tiempo para conversar.

Minutos después, Morel se posicionó al medio de Boric y Tohá. Los tres estuvieron hablando algunos minutos más, mientras la esposa del exjefe de Estado aparentemente explicaba lo ocurrido en el trágico accidente en el que capotó el helicóptero piloteado por Piñera y que luego se hundió en el Lago Ranco.

Todo esto ocurrió durante el primer día de duelo nacional decretado por Boric el martes, minutos después de que la noticia se confirmara oficialmente por las autoridades y a través de un comunicado de la oficina de Piñera. Durante la tarde de este miércoles, comenzará el velorio en la sede del Congreso en Santiago.

El Presidente Boric ha estado participando activamente de la coordinación del funeral de Estado. Desde que tuvo conocimiento del fallecimiento del exmandatario, suspendió todas sus actividades y viajó en helicóptero desde la Región de Valparaíso hasta La Moneda, desde donde ha estado preparando cada detalle de los honores que se le rendirán a Piñera.

Tal como lo hizo la expresidenta Michelle Bachelet, para el funeral de Estado del exmandatario Patricio Aylwin en 2016, Boric dará un discurso durante la ceremonia que oficiará el viernes el sacerdote Andrés Ariztía en la Catedral de Santiago.

El tono y la duración de esas palabras ha sido un tema que el mismo Boric ha estado conversando con la familia de Piñera y que ha trabajado con su equipo de Contenidos del Segundo Piso, encabezado por Manuel Guerrero.

En Palacio transmiten que su declaración -que aún no se ha acordado en qué momento se dará- debería seguir la misma línea que el Mandatario plasmó en la cadena nacional que realizó a las 18.00 de este martes.

En ese momento, el Jefe de Estado recalcó que Piñera “contribuyó desde su visión a construir grandes acuerdos por el bien de la patria. (…). Fue un demócrata desde la primera hora y buscó genuinamente lo que él creía que era lo mejor para el país”.

El mismo tono también se manifestó en la primera declaración que entregó el gobierno tras la noticia, en voz de la ministra Tohá. “Tendrá todos los honores y reconocimientos republicanos que merece”, aseguró el martes la jefa del gabinete.

El gobierno ha sido cuidadoso en respetar el tono de las palabras y de respetar estrictamente el protocolo de un funeral de estas características. Más aún debido a lo inesperado del fallecimiento del expresidente y también de lo compleja que había sido previamente la relación entre Boric y Piñera.

Pese a las diferencias que tuvieron ambos, sobre todo cuando el actual Mandatario era diputado y Piñera se hacía cargo de controlar la violencia suscitada por el estallido social y darle un cauce institucional y democrático a esa crisis. Junto al marco otorgado por Boric y Tohá, este miércoles fue el ministro de Justicia, Luis Cordero quien también se sumó a ese mismo diseño.

“En mi opinión, en esos días el presidente estaba igualmente comprometido con la estabilidad, con la continuidad democrática, con intentar darle una solución pactada a esa crisis (…). Quienes ejercen cargos de responsabilidad solemos juzgarlos por las acciones de sus dependientes, pero en caso de derechos humanos hago esa distinción sobre la convicción y la posición personal”, afirmó el titular de Justicia en Radio Infinita al ser consultado por lo ocurrido en 2019.

Otro más que también dio cuenta del tono que ha empleado el Ejecutivo fue Van Klaveren, quien quedó a cargo de organizar el funeral de Estado en conjunto con la familia Piñera, por medio del exministro Andrés Chadwick. Parte de dicha coordinación ocurrió a las 20.00 horas del martes, en el piso 15 de Cancillería, lugar hasta el que llegaron representantes del equipo de Avanzada del Presidente Boric y representantes del equipo del exmandatario Piñera.

La designación del canciller fue protocolar, pero a la vez decayó en uno de los secretarios de Estado en los que el Presidente proyecta mayor sobriedad.

A su vez, el titular del Minrel reveló este miércoles la gratitud que ha tenido la familia Piñera con las iniciativas que ha liderado el Presidente Boric. “La familia está muy agradecida de la disposición que ha tenido el Presidente Boric. Realmente está muy reconocida por la iniciativa que tuvo el gobierno de ofrecer un funeral de Estado en caso que la familia así lo quisiera, cosa que sucedió. (…) Estamos absolutamente disponibles para cualquier sugerencia que pueda hacer la familia”, dijo van Klaveren.

El lunes 5 de febrero el Presidente Boric estaba en su oficina viendo los últimos detalles de las pensiones de gracia que iba a revocar. Mientras revisaba los casos en los cuales el gobierno daría marcha atrás pudo constatar que en total el gobierno eliminaría el beneficio de 27 personas. De todas ellas, había un pequeño grupo -un total de seis beneficios- que fueron otorgadas durante la administración anterior.

En ese momento, el Mandatario tomó la deferencia de llamar por teléfono a su antecesor, el expresidente Piñera. Quienes supieron de esa conversación cuentan que Boric quiso avisarle personalmente de su decisión, dado lo delicado que se había transformado el tema luego del informe de Contraloría.

La conversación ocurrió cerca de las 20.00 horas, instante en el que también pudieron hablar de la situación en Latinoamérica, y en donde Boric y Piñera terminaron hablando sobre la tragedia que dejaron los incendios en Valparaíso. Al respecto abordaron el desafío que implicaba la reconstrucción de las zonas urbanas afectadas y la destrucción de más de tres mil viviendas.

Esta fue la última conversación que tuvo el Presidente Boric con Piñera. Esto a menos de 24 horas de que, en un trágico accidente, el expresidente falleciera.

Parte de este diálogo fue revelado por los colaboradores más cercanos de Piñera. “Fue él mismo quien convocó a un grupo de colaboradores que trabajaron para la reconstrucción del terremoto para pedirles que pensaran cómo podíamos ayudar a reconstruir nuestro país luego de la tragedia de Valparaíso”, afirmó su exministro vocero de Gobierno, Jaime Bellolio.

El exsecretario de Estado agregó: “Por la tarde (del lunes) habló con el Presidente Boric y le ofreció esto. El Presidente Boric aceptó y hoy día (el martes) en la mañana ya nos estaba pidiendo minutas para presentarle al Gobierno un plan”.

Boric acordó que la ministra de Desarrollo Social y encargada de la reconstrucción, Javiera Toro, fuera el enlace con el exmandatario. Muy en su estilo, ese mismo día Piñera habló por teléfono con Toro para ofrecerle su ayuda y empezar a delinear el trabajo en conjunto entre ambos equipos.

De hecho, a las 16.00 horas del martes la ministra Toro tenía contemplado encabezar una actividad en La Moneda con personeros que se hayan encargado de la reconstrucción de administraciones pasadas. Dicha pauta se canceló por el deceso del expresidente.

Ahora se tendrá que definir si es que Boric irá junto a su equipo a la sede del Congreso en Santiago durante este miércoles, junto a sus ministros -diseño que acomoda en Palacio-, o si lo hará mañana junto a los expresidentes Eduardo Frei y Michelle Bachelet, ya que ambos se encuentran fuera de Santiago. El exmandatario DC está en el extranjero, mientras que la socialista se encontraba de vacaciones en Caburgua.