Este jueves, la exministra de Trabajo y Previsión Social, María José Zaldívar se refirió a la idea de establecer un seguro de longevidad en el sistema previsional.
En el marco del ciclo de diálogos “Mejores pensiones para Chile, desafíos y oportunidades de la reforma”, organizado por AFP Capital, Zaldívar aseguró que cuando se debate sobre el seguro de longevidad es importante “estar súper bien calibrados en la edad y la expectativa de vida”.
“Un seguro de longevidad que parta a los 85 años es un seguro carísimo, porque todos llegamos a los 85 años de edad. En cambio, sí lo ponemos con la fecha que realmente correspondería -aunque la gente no va a querer asumirlo, pero es de 95 a 100 años, sí tiene un valor diferente”, dijo.
Bajo ese contexto, manifestó que si se establece el seguro de longevidad desde los 85 años de edad “no creo que es 1,8 puntos, es cercano a 5”, indicando que técnicamente hay que tener los números y analizarlo bien para poder tomar la decisión para que “después no pase que el seguro se desfonde”.
“El seguro de longevidad como instrumento es mutualizar el riesgo, si no está bien calibrado con cuál es la fecha, resulta tan caro que se me podrían ir eventualmente los 6 puntos de cotización”, enfatizó la exsecretaria de Estado.
Tablas de mortalidad
En esa línea, el senior fellow de la UAI, Salvador Valdés advirtió que “crear tablas de mortalidad artificiales es un grave error”, explicando que solo la mitad de la gente vive hasta la esperanza de vida y la otra mitad la sobrepasa, lo que generaría “problemas fiscales graves”.
Por su parte, el senador Matías Walker de Demócratas, partido que propone un seguro de longevidad, se refirió a las críticas en torno a la regresividad que podría generar este instrumento.
El parlamentario apuntó a que si “fijas la tabla de la mortalidad hasta los 85 años o a los 90 años vas a aumentar el régimen de las actuales pensiones de los más pobres en 30% y eso es lejos de ser regresivo”.
Con todo, respecto de la inquietud del financiamiento que levantó Zaldívar, Walker manifestó: “Todos tenemos que ceder y a lo mejor tenemos que revisar nuestras propuestas del seguro de longevidad y tal vez el corte no puede estar en los 85 años o en 90 años”.
En ese sentido, concluyó que “hay que verlo con los números arriba de la mesa, pero todos tenemos que ceder en nuestras posiciones”.
“Ya no hay tiempo”
Respecto a la tramitación de la reforma y a la necesidad de hacer cambios al sistema previsional, Zaldívar manifestó que “ya no hay tiempo, y como no hay tiempo hay que hacer algo, y cada vez que no hacemos algo la situación solo se agrava”.
Por su parte, Valdés aseguró que cree “que hay espacio y hay voluntad” y que “en el Senado sí puede haber un acuerdo.”
Walker, a su vez, también es optimista en que en el Senado se podría alcanzar el consenso. Bajo esa idea concluyó que “en definitiva tenemos que llegar a un acuerdo este año”.
Según el senador, hay que “ceder a la tentación que tienen algunos de pensar que rechazando la reforma de pensiones le van a infringir una derrota al gobierno”. Para Walker, “están equivocados, se van a infringir una derrota a ellos mismos”.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.
La espectacular ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes por la noche con una flota de barcos que transportaban a 10.500 atletas a lo largo del río Sena, la primera versión al aire libre del espectáculo que se espera sea visto por mil millones de personas.
Sin embargo, el evento se vio ensombrecido por un acto de sabotaje criminal que afectó a la red ferroviaria de alta velocidad de Francia en las primeras horas de la mañana y provocó un caos en el transporte en todo el país. Una fuerte lluvia comenzó a caer aproximadamente a los 30 minutos del espectáculo de tres horas, un escenario de pesadilla para los organizadores de la representación teatral que contó con un elenco masivo de bailarines, dos orquestas y un grupo de estrellas del pop, incluida Lady Gaga haciendo una actuación con tintes de cabaret.
“Estamos preparados para este magnífico acontecimiento”, afirmó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, antes de la ceremonia, añadiendo que no se habían detectado amenazas específicas. El sabotaje ferroviario “no tendría consecuencias directas sobre los Juegos Olímpicos ni sobre la ceremonia”.
Lady Gaga lleva el cabaret a la ceremonia de apertura de los Juegos de París en el Sena
A media tarde se habían formado largas filass para que los poseedores de entradas ingresaran al perímetro altamente seguro a lo largo del río Sena, donde se esperan 320.000 espectadores a lo largo de los muelles adoquinados de la época medieval. El formato del evento requirió una fuerte seguridad: 45.000 policías fueron desplegados en tierra y en el aire, utilizando helicópteros, drones y francotiradores colocados en los tejados.
El clima también puso a prueba a las docenas de capitanes de barcos experimentados que impulsaron el desfile, quienes navegaron precisamente a la velocidad adecuada para mantener el espectáculo en línea. Algunos espectadores huyeron de los muelles para refugiarse mientras llovía a cántaros.
El presidente Emmanuel Macron recibió a más de 100 jefes de estado en la plaza Trocadero, al otro lado del río desde la Torre Eiffel, donde los atletas desembarcaron para un desfile final y una actuación esperada por la favorita francófona Céline Dion. Jill Biden, esposa del presidente estadounidense, y otros líderes asistieron previamente a una recepción en el palacio del Eliseo.
El espectáculo de tres horas contó con bailarines de ballet en el tejado del Louvre, mientras que cientos de bailarines modernos y breakdancers actuando en los muelles y en algunos de los barcos. Los artistas lucieron trajes hechos a mano por modistos franceses, incluidos Louis Vuitton y Dior de LVMH.
Cuando Reboul le propuso la idea a Tony Estanguet, jefe del comité organizador de París, el dos veces ganador de la medalla de oro reaccionó con un estupor que rápidamente se convirtió en entusiasmo. “Será ambicioso, audaz y totalmente loco”, afirmó Estanguet recordando el momento.
Aunque los funcionarios se han mostrado vagos sobre el precio, los medios franceses han informado que la ceremonia costará alrededor de 120 millones de euros, es decir unos US$ 130 millones y aproximadamente cuatro veces el costo de la inauguración de los Juegos de Londres 2012. Se espera que el coste total de los Juegos de París, que se presentó como una edición más ecológica porque se construyó poca infraestructura nueva, alcance entre 9.000 y 10.000 millones de euros, según el auditor nacional. Alrededor de un tercio de esa cantidad será costeada por los patrocinadores.