Es una crisis que llegó a su punto álgido este año, pero cuyas raíces se remontan a más de una década.
En agosto de 2010, un fallo del Tribunal Constitucional (TC) señaló que las tablas de factores que usaban las isapres –herramienta para fijar los precios de los planes según nivel de riesgo– vulneraban garantías de los usuarios al discriminar por variables como sexo y edad. Es una “situación compleja de la que deben hacerse cargo los poderes colegisladores”, dijo esa sentencia.
Sin embargo, las tablas se mantuvieron iguales por nueve años más, hasta que en 2019, la Superintendencia de Salud emitió la Circular 343, que creó una tabla única para todo el sistema.
Quien encabezaba la institución en la fecha, Patricio Fernández, explicó que la demora se debió a que “en la interna había mucha duda jurídica respecto a la posibilidad de hacerlo”, pero finalmente se decidieron a avanzar por la vía administrativa, ya que el camino legislativo, como esperaba el TC, no proliferaba.
Eso sí, la circular podría hacerse efectiva en abril de 2020, pero solo para los contratos a futuro; es decir, para aquellos en comercialización y no a toda la cartera.
Pero dos obstáculos se pondrían en el camino de la industria para la adecuación a ese cambio sustancial: la pandemia y la judicialización.
La pandemia
Uno de ellos, fue la crisis sanitaria producida por el Covid-19, un golpe seco para el sector. Entre 2021 y 2022, las isapres acumularon pérdidas por casi $ 300 mil millones.
La economista y directora de Espacio Público, Paula Benavides, -quien participó en la discusión de la ley corta que atendió la crisis- explicó que, primero, los ingresos operacionales se vieron afectados por el congelamiento de las alzas anuales de precios base que hacen las aseguradoras en 2020 y 2021, como una de las medidas reactivas a la pandemia.
Por otro lado, los gastos también subieron, por “un incremento significativo en prestaciones y especialmente licencias médicas. El Subsidio de Incapacidad Laboral (SIL) llegó a representar un 30% de los costos operacionales”, recordó. Todo eso estrechó el margen operacional y empujó a detonar la crisis.
Judicialización
Sin embargo, esta no hubiese estallado sin otro problema que venía asentándose para las isapres, la judicialización. Ya desde hace un tiempo se había formado una suerte de industria legal, que se fundaba en la presentación de recursos de protección ante las alzas de precios base que año tras año aplicaban las isapres. Las Cortes de Apelaciones se inundaron de estas acciones, generando un dolor de cabeza al Poder Judicial.
Sin embargo, cuando se aplicó la Circular 343 y la tabla de factores única, el problema se agudizó. “Se empieza a judicializar la tabla”, relató la especialista en políticas públicas en salud y directora ejecutiva de Fundación Politopedia, Victoria Beaumont. Como la circular no podía aplicarse retroactivamente, sino que solo a los planes en comercialización, “el 70% de la cartera de isapres no modificó su plan a la nueva tabla”, planteó Beaumont.
Y así, con una judicialización ya excesiva y en aumento, la Corte Suprema entró a zanjar el problema.
Entre 2022 y 2023, tres fallos del máximo Tribunal, con alcance general para todos los afiliados –lo que provocó acaloradas discusiones en el mundo jurídico–, terminaron de hundir a las isapres. Más allá de las sentencias que dejaron sin efecto las alzas de precios base de 2022 y por la prima de Garantías Explícitas de Salud (GES) de 2023, el que más daño le hizo a las compañías fue el de tabla de factores, que ordenó adecuar todos los planes a la Tabla Única y devolver los cobros en exceso.
Cristián Piera, CEO de Clínica Alemana y la salida a la crisis de las isapres: “Es mejor una mala ley corta a que no la haya”
¿Qué viene ahora?
Lo que sigue es conocido. El Gobierno ingresó una ley corta para aplicar ese fallo evitando una quiebra sistémica de todas las isapres. Su votación final será este lunes y el proyecto implica una caída en los ingresos de las empresas tras adecuarse a la tabla, que se buscará atenuar con algunas medidas de contención y alzas en los planes.
“Cuando aplicas la tabla a todos los afiliados en forma retroactiva, generas una deuda que implica tres o cuatro veces el patrimonio actual de las isapres”, señaló Beaumont.
Las aseguradoras tendrán hasta 13 años para pagar unos US$ 1.240 millones en que se calculó la deuda. Entre 2010 y 2019, el sistema acumuló ganancias por unos US$ 400 millones.
Para el secretario técnico de la Comisión que asesoró al Senado en la ley corta, Cristián Baeza, el diagnóstico es claro: “Aquí no hay un espacio para celebrar la aprobación de una ley, como cuando uno tiene un paciente muy grave y finalmente le salva la vida, pero por la vía de amputarle un brazo y una pierna”.
El doctor, radicado en EEUU, donde se desempeña como director ejecutivo del Center for Healthy Development, adelantó una mayor viabilidad financiera de corto plazo, pero sin resolver temas estructurales.
Pero, además, postuló otra preocupación. Dado que la autoridad chilena permitirá separar los pasivos de la deuda en los estados financieros de las isapres -para evitar la quiebra técnica, se preguntó qué va a ocurrir con los auditores internacionales. Cuatro de las seis isapres pertenecen a grupos extranjeros. Banmédica y Vida Tres a la estadounidense United Health Group (UHG), Nueva Masvida a otra norteamericana, Nexus; y Cruz Blanca a la británica Bupa. Solo Consalud y Colmena están ligadas a controladores chilenos, respectivamente, la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) y el Grupo Bethia.
Asimismo, con precios más altos en los planes y la sombra de nuevas isapres que aparezcan sin el peso de la deuda, Baeza teme que se concrete lo que se conoce como “el descreme”, con una fuga masiva de los afiliados de más recursos y menores riesgos.
#Isapres #cuerda #floja
Si quieres leer el artículo original puedes acceder desde este link:
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.
La espectacular ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes por la noche con una flota de barcos que transportaban a 10.500 atletas a lo largo del río Sena, la primera versión al aire libre del espectáculo que se espera sea visto por mil millones de personas.
Sin embargo, el evento se vio ensombrecido por un acto de sabotaje criminal que afectó a la red ferroviaria de alta velocidad de Francia en las primeras horas de la mañana y provocó un caos en el transporte en todo el país. Una fuerte lluvia comenzó a caer aproximadamente a los 30 minutos del espectáculo de tres horas, un escenario de pesadilla para los organizadores de la representación teatral que contó con un elenco masivo de bailarines, dos orquestas y un grupo de estrellas del pop, incluida Lady Gaga haciendo una actuación con tintes de cabaret.
“Estamos preparados para este magnífico acontecimiento”, afirmó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, antes de la ceremonia, añadiendo que no se habían detectado amenazas específicas. El sabotaje ferroviario “no tendría consecuencias directas sobre los Juegos Olímpicos ni sobre la ceremonia”.
Lady Gaga lleva el cabaret a la ceremonia de apertura de los Juegos de París en el Sena
A media tarde se habían formado largas filass para que los poseedores de entradas ingresaran al perímetro altamente seguro a lo largo del río Sena, donde se esperan 320.000 espectadores a lo largo de los muelles adoquinados de la época medieval. El formato del evento requirió una fuerte seguridad: 45.000 policías fueron desplegados en tierra y en el aire, utilizando helicópteros, drones y francotiradores colocados en los tejados.
El clima también puso a prueba a las docenas de capitanes de barcos experimentados que impulsaron el desfile, quienes navegaron precisamente a la velocidad adecuada para mantener el espectáculo en línea. Algunos espectadores huyeron de los muelles para refugiarse mientras llovía a cántaros.
El presidente Emmanuel Macron recibió a más de 100 jefes de estado en la plaza Trocadero, al otro lado del río desde la Torre Eiffel, donde los atletas desembarcaron para un desfile final y una actuación esperada por la favorita francófona Céline Dion. Jill Biden, esposa del presidente estadounidense, y otros líderes asistieron previamente a una recepción en el palacio del Eliseo.
El espectáculo de tres horas contó con bailarines de ballet en el tejado del Louvre, mientras que cientos de bailarines modernos y breakdancers actuando en los muelles y en algunos de los barcos. Los artistas lucieron trajes hechos a mano por modistos franceses, incluidos Louis Vuitton y Dior de LVMH.
Cuando Reboul le propuso la idea a Tony Estanguet, jefe del comité organizador de París, el dos veces ganador de la medalla de oro reaccionó con un estupor que rápidamente se convirtió en entusiasmo. “Será ambicioso, audaz y totalmente loco”, afirmó Estanguet recordando el momento.
Aunque los funcionarios se han mostrado vagos sobre el precio, los medios franceses han informado que la ceremonia costará alrededor de 120 millones de euros, es decir unos US$ 130 millones y aproximadamente cuatro veces el costo de la inauguración de los Juegos de Londres 2012. Se espera que el coste total de los Juegos de París, que se presentó como una edición más ecológica porque se construyó poca infraestructura nueva, alcance entre 9.000 y 10.000 millones de euros, según el auditor nacional. Alrededor de un tercio de esa cantidad será costeada por los patrocinadores.