Los liquidadores de Evergrande se están preparando para una posible demanda contra PwC, que auditó al ahora colapsado grupo inmobiliario chino durante más de una década, en una medida que podría llevar a una de las firmas denominadas como una de las “big four” a enfrentar una demanda por negligencia de alto perfil.
Eddie Middleton y Tiffany Wong, los especialistas en reestructuraciones de Alvarez & Marsal nombrados, el mes pasado, como liquidadores del holding Evergrande que cotiza en Hong Kong, han hablado con al menos dos bufetes de abogados sobre la posibilidad de presentar una demanda contra la auditora, según tres personas conocedoras de las conversaciones.
Para presentar una demanda, los liquidadores tendrán que demostrar que PwC ha cometido errores que han perjudicado a los acreedores.
Los liquidadores estaban “tomando medidas para proteger -su capacidad de presentar- demandas legales contra los auditores”, dijo una de las personas.
Evergrande, el promotor inmobiliario más endeudado del mundo, con más de US$ 300.000 millones de pasivos, incumplió sus obligaciones en 2021, lo que desencadenó una crisis de liquidez en todo el sector inmobiliario chino. Varios intentos de acordar un plan de reestructuración fracasaron.
Las conversaciones del liquidador con los abogados son un primer indicio de cómo esta última fase del colapso de Evergrande, que comenzó cuando un tribunal de Hong Kong ordenó el mes pasado su liquidación, podría acarrear importantes costes para las empresas internacionales.
Las conversaciones sobre una posible demanda se encontraban en una fase temprana, advirtieron las personas, y agregaron que la existencia de las conversaciones no indicaba que los liquidadores de Evergrande hubieran descubierto ninguna prueba de irregularidades por parte de PwC, ni que fuera a producirse una demanda.
“En la última década, demandar al auditor se ha normalizado en cierta medida como forma de recuperar valor -para los acreedores-“, dijo un especialista en insolvencia no implicado en el caso Evergrande. En su opinión, las demandas contra auditores y otros asesores profesionales “se han convertido en algo normal para un liquidador cuando se trata de un caso multimillonario”.
PwC fue el auditor de Evergrande cuando el promotor salió a bolsa en 2009, y firmó sus libros mientras se expandía rápidamente utilizando un apalancamiento desorbitado durante el boom inmobiliario de China. La firma dimitió del contrato el año pasado.
Dos de estas personas dijeron que era habitual que los liquidadores actuarán con rapidez para preservar su derecho a interponer una demanda contra los asesores profesionales, de modo que no se vieran frustrados más tarde por la prescripción. Las personas indicaron que, con arreglo a la legislación de Hong Kong, los liquidadores suelen disponer de un plazo de seis años a partir de la presunta comisión de un delito para interponer una demanda, a menos que se haya acordado de antemano un plazo distinto.
Añadieron que podría pasar mucho tiempo antes de que se materialice una demanda, ya que los liquidadores tendrán que reunir pruebas de los errores cometidos por los auditores y demostrar que los acreedores han salido perdiendo como consecuencia de ellos.
Middleton y Wong, así como PwC, declinaron hacer comentarios.
PwC ha desarrollado un importante negocio de auditoría de grupos inmobiliarios chinos y ha actuado para varios promotores que han atravesado dificultades, como Country Garden, Sunac, R&F Properties y Shimao. Dimitió como auditor de Sunac, Shimao y R&F en 2022.
Las auditorías de Evergrande las llevó a cabo la división de Hong Kong de PwC, según consta en los archivos. Demandar a los auditores en el territorio sería una forma de que los liquidadores intentarán recuperar dinero para los acreedores de Evergrande fuera de China continental, donde el proceso sería probablemente mucho más difícil.
Otras empresas de auditoría se han enfrentado a demandas por negligencia en Hong Kong en relación con su trabajo para empresas chinas. En 2021, KPMG resolvió las demandas presentadas por los liquidadores en relación con su auditoría de China Forestry.
PwC aprobó las cuentas de Evergrande en 2020, pero cuando dimitió como auditor de Evergrande el año pasado, dijo que no había sido capaz de obtener la información que necesitaba para la auditoría de la empresa en 2021.
El Consejo de Contabilidad e Información Financiera de Hong Kong dijo en 2021 que estaba investigando la auditoría de PwC de las cuentas de Evergrande de 2020.
En su informe sobre las cuentas de Evergrande para 2020, PwC había “expresado una opinión de auditoría no modificada”, pero “no hizo referencia a las incertidumbres materiales de la empresa en funcionamiento”. Añadió que creía que había razones para “investigar si el trabajo de auditoría de PwC sobre la evaluación de la empresa en funcionamiento de China Evergrande” en su auditoría de 2020 “cumplía con las normas de auditoría aplicables”.
La AFRC no respondió a una petición de comentarios.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.
La espectacular ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes por la noche con una flota de barcos que transportaban a 10.500 atletas a lo largo del río Sena, la primera versión al aire libre del espectáculo que se espera sea visto por mil millones de personas.
Sin embargo, el evento se vio ensombrecido por un acto de sabotaje criminal que afectó a la red ferroviaria de alta velocidad de Francia en las primeras horas de la mañana y provocó un caos en el transporte en todo el país. Una fuerte lluvia comenzó a caer aproximadamente a los 30 minutos del espectáculo de tres horas, un escenario de pesadilla para los organizadores de la representación teatral que contó con un elenco masivo de bailarines, dos orquestas y un grupo de estrellas del pop, incluida Lady Gaga haciendo una actuación con tintes de cabaret.
“Estamos preparados para este magnífico acontecimiento”, afirmó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, antes de la ceremonia, añadiendo que no se habían detectado amenazas específicas. El sabotaje ferroviario “no tendría consecuencias directas sobre los Juegos Olímpicos ni sobre la ceremonia”.
Lady Gaga lleva el cabaret a la ceremonia de apertura de los Juegos de París en el Sena
A media tarde se habían formado largas filass para que los poseedores de entradas ingresaran al perímetro altamente seguro a lo largo del río Sena, donde se esperan 320.000 espectadores a lo largo de los muelles adoquinados de la época medieval. El formato del evento requirió una fuerte seguridad: 45.000 policías fueron desplegados en tierra y en el aire, utilizando helicópteros, drones y francotiradores colocados en los tejados.
El clima también puso a prueba a las docenas de capitanes de barcos experimentados que impulsaron el desfile, quienes navegaron precisamente a la velocidad adecuada para mantener el espectáculo en línea. Algunos espectadores huyeron de los muelles para refugiarse mientras llovía a cántaros.
El presidente Emmanuel Macron recibió a más de 100 jefes de estado en la plaza Trocadero, al otro lado del río desde la Torre Eiffel, donde los atletas desembarcaron para un desfile final y una actuación esperada por la favorita francófona Céline Dion. Jill Biden, esposa del presidente estadounidense, y otros líderes asistieron previamente a una recepción en el palacio del Eliseo.
El espectáculo de tres horas contó con bailarines de ballet en el tejado del Louvre, mientras que cientos de bailarines modernos y breakdancers actuando en los muelles y en algunos de los barcos. Los artistas lucieron trajes hechos a mano por modistos franceses, incluidos Louis Vuitton y Dior de LVMH.
Cuando Reboul le propuso la idea a Tony Estanguet, jefe del comité organizador de París, el dos veces ganador de la medalla de oro reaccionó con un estupor que rápidamente se convirtió en entusiasmo. “Será ambicioso, audaz y totalmente loco”, afirmó Estanguet recordando el momento.
Aunque los funcionarios se han mostrado vagos sobre el precio, los medios franceses han informado que la ceremonia costará alrededor de 120 millones de euros, es decir unos US$ 130 millones y aproximadamente cuatro veces el costo de la inauguración de los Juegos de Londres 2012. Se espera que el coste total de los Juegos de París, que se presentó como una edición más ecológica porque se construyó poca infraestructura nueva, alcance entre 9.000 y 10.000 millones de euros, según el auditor nacional. Alrededor de un tercio de esa cantidad será costeada por los patrocinadores.