Optimistas, pero con la mirada puesta en los desafíos que impone el futuro. Así se mostró la presidenta del directorio de Enap, Gloria Maldonado, y el gerente general de la petrolera estatal, Julio Friedmann, en sus respectivas cartas dirigidas a los accionistas y que forman parte de la memoria anual 2023, en la que se refirieron a los resultados alcanzados el año pasado y lo que le depara a la firma este 2024.
En su misiva, la presidenta del directorio, calificó el 2023 como un año “tremendamente desafiante” y, a la vez, “fecundo” para la estatal. “Con un escenario internacional complejo y precios del petróleo volátiles, el trabajo desarrollado por quienes integran la compañía permitió sortear este período con éxito, marcando al mismo tiempo importantes hitos en nuestro camino hacia la sostenibilidad y el crecimiento responsable”, relató.
Los frutos de eso, añadió, “están a la vista”. Y si bien destacó que durante el año pasado los resultados económicos fueron muy positivos, no sólo por las utilidades obtenidas, sino también porque realizaron un importante ordenamiento financiero, fundamental para el desarrollo de la compañía, fue clara en asegurar: “Sabemos, en todo caso, que esta bonanza no es permanente y nos hemos preparado para enfrentar un 2024 con resultados más estrechos”.
Es en ese contexto que, según Maldonado, “Enap ha puesto foco en articular una ruta clara al 2040 y un plan de negocios realista y ambicioso, para fortalecernos en ámbitos claves de nuestro negocio, como la reducción de deuda, el rediseño de procesos críticos, la excelencia operacional y la ejecución de importantes proyectos ambientales”.
En línea con el compromiso en materia de transición energética, dijo, es que siguen dando pasos para fortalecer su rol en la industria del hidrógeno verde: “Además de aprender de esta nueva tecnología, formando a nuestros trabajadores en su producción a través de nuestra planta en Cabo Negro, nuestra empresa tiene capacidades únicas y activos estratégicos en las principales zonas con potencial para el desarrollo de este combustible, que permiten asegurar el desarrollo de esta importante industria tecnológica en el país, minimizando su impacto ambiental mediante el uso de infraestructura compartida, en una zona de alto valor para todos los chilenos, como es la región de Magallanes”.
Maldonado añadió que no pueden olvidar ni dejar de aprender de sus experiencias en la operación, “que reafirman lo indispensable que es de reforzar el trabajo en materia de integridad operacional y el apego irrestricto a los procesos, que ponen la seguridad de las personas y el medio ambiente al centro de la gestión”. Y aseguró que “uno de nuestros principales focos de este período es avanzar en mejorar la gestión global de la empresa”: “Reflejo de eso son diversos cambios y ajustes impulsados, con el fin de tener una organización más transparente, con una estructura más matricial y horizontal a la vez que diversa, donde prime el buen trato”.
Junto con insistir en el camino para derribar las barreras y sesgos que impiden una mayor presencia femenina, sentenció: “Para seguir liderando el desarrollo energético del país, es imperativo tener una empresa que actúe de manera responsable, preocupada de las personas, y abierta al entorno en que opera. Por esto, invertimos y promovemos acciones para que nuestra operación ayude a mejorar la calidad de vida y reducir los impactos en las comunidades cercanas a nuestra operación, mientras seguimos construyendo relaciones de largo plazo con las personas y grupos de interés con que nos relacionamos”.
“Donde queremos estar”
Por su parte, en su respectiva carta, para el gerente general de la estatal, 2023 fue “un muy buen año” para la firma tanto desde el punto financiero como de la seguridad de las personas y la vinculación con sus públicos de interés.
Al respecto, sostuvo que, con mucho diálogo y orientación al resultado, “mejoramos nuestro perfil de deuda; retomamos en forma proactiva el relacionamiento franco y transparente con autoridades locales y las comunidades que nos rodean; diseñamos y ejecutamos un robusto plan de negocios que incluye inversiones históricas para mejorar nuestro estándar ambiental y desarrollar nuevas líneas de negocio; y definimos que, como empresa del Estado, tendríamos un especial cuidado por la meritocracia, basado en las cualidades humanas y profesionales de cada cual”.
Añadió que, además, en todas las líneas de negocio y las respectivas áreas de soporte, adoptaron la misma aproximación para el mejoramiento continuo: revisar de manera analítica los datos y contexto para gestionar nuestras brechas y lograr un alto estándar de desempeño. “Sabemos que este camino requiere tiempo y la capacidad de poder cumplir nuestro plan de inversiones, pero estamos seguros de que es la única vía posible para la sostenibilidad de la empresa”, enfatizó.
Pero admitió: “Hoy, a pesar de estos resultados históricos, aún no estamos donde queremos estar”.
Según explicó Friedmann, “estamos conscientes, tal como ocurrió con el súper ciclo del cobre, que la reciente bonanza puede ser transitoria y que a contar de 2024 el entorno será aún más desafiante y nuestros resultados, más estrechos. La alta volatilidad mundial en precios de los commodities, los decrecientes márgenes internacionales de refinación y la aún débil demanda interna nos exigen responsabilidad. Por eso, para navegar en este período, nos enfocaremos en la contención de los costos y en el fortalecimiento de nuestro desempeño operacional”.
El análisis no terminó ahí y reconoció que, si bien desde el punto de vista financiero el 2023 fue uno de los mejores años en la historia de ENAP, “tuvimos problemas operacionales puntuales que no son aceptables”, como el incidente en diciembre en la refinería de Biobío, pues pueden poner en riesgo a las personas y la integridad de sus instalaciones. “Los buenos resultados deben ir acompañados de un actuar ético, estable, disciplinado, seguro y de excelencia, por lo que este será un ámbito relevante de atención y acción en 2024”, agregó.
El ejecutivo recalcó en la necesidad de avanzar en los denominados proyectos estructurantes, que son aquellas iniciativas que buscan mejorar el negocio de manera permanente, fortaleciendo el desempeño ambiental, la producción propia y el desarrollo de nuevos negocios. Para cumplir estos objetivos, dijo, “hemos elaborado un ambicioso plan de inversiones de US$ 3.500 millones a cinco años, totalmente financiado con recursos propios. Durante 2023 ejecutamos más de US$ 700 millones y para 2024 esperamos superar los US$ 800 millones de inversión”.
Entendiendo el rol clave de la firma en la transición energética, puntualizó que han puesto foco en seguir desarrollando su negocio de gas natural y de gas licuado, combustibles esenciales para apoyar dicha transición. En el caso de Magallanes, por ejemplo, Enap puede posibilitar -explicó- importantes proyectos e inversiones mediante alianzas con terceros especializados en el desarrollo y operación de la infraestructura crítica para hidrógeno verde y sus derivados.
También están evaluando la producción de combustibles sintéticos en sus refinerías, con alternativas para su generación, como la construcción de una planta de e-fuel de 10 MW en una primera etapa, con una capacidad de producción anual de tres mil 500 toneladas en sus dependencias. “De concretarse la construcción de esta planta, sería la más grande de su tipo en el país y podría constituirse en un modelo escalable hacia el futuro”, afirmó.
En enero de este año, la Fiscalía Nacional Económica (FNE) inició un estudio de mercado sobre la educación superior chilena para analizar la evolución competitiva de este segmento. Sin embargo, casas de estudios han llegado a tribunales para reclamar contra la entidad por el pedido de datos personales en el marco de dicho informe.
Fue así que, en dos informes presentados ante la Corte de Apelaciones de Santiago, en respuesta a recursos de protección interpuestos por la Universidad de Santiago de Chile (Usach) y por la Universidad de Chile contra solicitudes de información, la FNE destacó las atribuciones que posee para solicitar información.
Los informes sobre las acciones de la Usach y de la Universidad de Chile se suman al ingresado el 11 de julio en respuesta a un recurso de protección de similares características presentado por la Pontificia Universidad Católica de Chile (PUC).
La FNE dio cuenta de las atribuciones que -dijo- expresamente le confiere la ley para requerir información y tratar datos personales; descartó que haya actuado de manera arbitraria, pues indicó que en todo momento lo hizo de manera fundada, razonable y proporcionada; y expresó que no hay una afectación de las garantías constitucionales invocadas por las recurrentes.
Además, la entidad expuso a la Corte que estas acciones no tienen precedentes en la institucionalidad de libre competencia nacional y que acceder a lo solicitado tendría consecuencias sistémicas que “podrían extenderse mucho más allá de los estudios sobre la evolución competitiva de los mercados que el legislador expresamente ha encomendado realizar a la FNE, causando un incalculable detrimento a las capacidades de este servicio para cumplir con su cometido legal en prácticamente toda la extensión de sus funciones y, con ello, un grave menoscabo del interés general proyectado al orden económico nacional”.
En sus respuestas, la FNE también solicitó a la Corte que rechace ambos recursos, considerando su carácter extemporáneo y que no son la vía idónea para impugnar solicitudes de información, como sí lo son los procedimientos ante el Tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC), que ya se pronunció sobre el oficio a través del cual se pidió la información, manteniéndolo vigente en todas sus partes.
Supuestas amenazas
En su acción, la Usach señaló que es una institución pública, que no debe ser tratada como un agente económico privado que ha infringido la ley, y acusó que la FNE habría incurrido en “amenazas de sanciones pecuniarias y privativas de libertad” al solicitar la entrega de información de estudiantes y exestudiantes.
Al respecto, la Fiscalía respondió que la ley la autoriza expresamente para requerir información tanto a agentes o instituciones privadas como a diversas entidades del Estado y que estas últimas tienen, además, un deber especial de colaboración cuando son órganos de la Administración del Estado.
Asimismo, aportó antecedentes para negar las amenazas señaladas y que la institución “carece de atribuciones autónomas para la imposición de cualquier tipo de sanción o apremio respecto de las entidades y agentes económicos que intervienen en sus investigaciones o estudios de mercado”.
En el caso de la Universidad de Chile, el recurso de protección coincide con el argumento de la Usach respecto al carácter de institución pública de la casa de estudios y alude también a supuestas infracciones a la Ley de Protección de Datos Personales en la solicitud de la FNE.
Deberes de confidencialidad
En este sentido, la Fiscalía sostuvo que su solicitud de información fue emitida en el ejercicio de las atribuciones que le confiere la ley y que es justificada y proporcional a la labor que realiza, cuyo desarrollo en ocasiones hace imprescindible solicitar y analizar antecedentes que califican como datos personales, encontrándose facultada legalmente al efecto. Planteó que, precisamente por lo anterior, es que la ley sujeta a los funcionarios de la Fiscalía a estrictos deberes de confidencialidad.
Otro antecedente que presentó la FNE es que 45 instituciones de educación superior -tanto públicas como privadas- respondieron solicitudes de información idénticas a la impugnada por la Usach y por la Universidad de Chile.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.