Un actor financiero europeo de más de 200 años se está involucrado paulatinamente y con mayor frecuencia en las grandes operaciones del mercado chileno. Se trata de Rothschild & Co., una de las dos entidades que continúa el legado banquero de la familia Rothschild, y que hoy se encuentra asesorando a WOM en el Capítulo 11 en Estados Unidos.
Asimismo, la institución basada en París fue contratada por Codelco para buscar un socio estratégico para la cuprífera estatal en el Salar Maricunga.
En entrevista con DF, en abril de este año, el presidente de Codelco, Máximo Pacheco, explicó que Rothschild está en el proceso de buscar eventuales aliados para el restante 49% del proyecto (la minera chilena tiene el 51%).
En esa ocasión, Pacheco añadió que espera de aquí a fin de año tener propuestas de candidatos y el primer trimestre del próximo año definir al nuevo socio.
Rothschild no es un nombre ajeno a Codelco. En octubre de 2023, asesoró a la minera en la compra de Lithium Power International (LPI) a sus antiguos controladores australianos, sociedad dueña del proyecto Blanco en Maricunga.
Rothschild & Co. también asesoró a Grupo Saesa en la compra de los activos de transmisión energética a Enel Chile en 2022, por unos US$ 1.350 millones.
Si bien Rothschild no tiene operación directa en Chile, desde una oficina en Brasil se gestiona la operación en Latinoamérica.
Al salvataje de WOM
Por su parte, la filial inglesa de Rothschild, N.M. Rothschild and Sons Limited, es el banco de inversión a cargo del salvataje de WOM en su proceso de Capítulo 11 del Tribunal de Quiebras de Delaware, Estados Unidos.
Según apuntó WOM en la sede judicial, “tienen una lista de 98 partes potenciales que creen que podrían estar interesadas y que tendrían los recursos financieros para consumar una transacción de reestructuración integral”.
Además, WOM presentó seis razones por las que deberían tener sus procedimientos en Estados Unidos y no en Chile. Entre ellas alegó que las leyes chilenas tienen una “incapacidad” de incluir entidades extranjeras en una reestructuración.
Los 200 años de historia
El origen de la dinastía Rothschild se encuentra a finales de 1700, cuando Mayer Amschel Rothschild logró levantar un imperio financiero basado en negocios cambiarios. Más tarde, envió a su tercer hijo, Nathan Mayer Rothschild, a Londres, para extender las operaciones de la familia. La misma fórmula utilizó para otros tres de sus descendientes, a quienes envió a París, Nápoles y Viena.
La llegada a Inglaterra terminó en la creación de N. M. Rothschilds and Sons Limited, una de las instituciones financieras más importantes de Europa. En París también vivieron un éxito.
No fue hasta 2003 que las dos ramas, la londinense y la parisina, se fusionaron para dar paso a Rothschild & Co. Al cierre de 2022 -última información pública disponible-, administraba unos US$ 110 mil millones.
Pero no es la única que busca llevar el legado. En 1953, el franco-suizo Edmond de Rothschild, de la quinta generación de la familia, fundó el banco de inversiones homónimo, Edmond Rothschild Group, en Francia.
En sus poco más de 70 años de operación, la compañía hoy se encuentra radicada en Suiza y ha logrado administrar más de U$ 178 mil millones a través de sus líneas de negocio, que también incluyen un fuerte foco en la gestión de activos y de patrimonio.
En Chile, Edmond de Rothschild mantiene asociaciones con Banchile Inversiones y SURA Investment para ofrecer soluciones de gestión patrimonial.
Disputa familiar
Si bien provienen del mismo linaje familiar, ambas firmas Rothschild son fuertes competidoras, sobre todo en el segmento de gestión de patrimonios, lo que incluso los llevó a enfrentarse en tribunales.
Los roces escalaron a la justicia en 2015, cuando Edmond de Rothschild Group, entonces encabezado por el fallecido Benjamin de Rothschild, tomó acciones legales en contra de Rothschild & Co., firma que lideraba el sobrino de Benjamin, Alexandre de Rothschild.
En la acción legal, la institución radicada en Suiza acusó a sus familiares de inducir a la confusión al utilizar el apellido Rothschild en el nombre de la firma como una marca propia, lo que potencialmente podría dañar a otros miembros del clan familiar.
Finalmente, en 2018 llegaron a un acuerdo donde el grupo Rothschild & Co. pudo mantener su marca corporativa, pero debió modificar su nombre en las áreas de banca privada y gestión de activos a Rothschild Martin Maurel en Francia, Bélgica y Mónaco.
Con todo, ambas firmas, según sus cifras de gestión de activos, quedaron detrás de otros grandes del mercado europeo como Pictet y Julius Baer. Por ello, desde el mercado apuntan a una eventual fusión para aumentar la escala del negocio familiar.
Sin embargo, en una reciente entrevista a Reuters, la CEO de Edmond de Rothschild y viuda de Benjamin, Ariane de Rothschild, sostuvo que esta eventual unión sería una “fantasía” del mercado.
Añadió: “Seguimos siendo dos bancos muy diferentes. Rothschild & Co, con un negocio predominantemente de fusiones y adquisiciones, es muy activo y dinámico en banca privada y gestión de activos. Nuestra actividad principal es la banca privada y la gestión de activos”.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.
La espectacular ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes por la noche con una flota de barcos que transportaban a 10.500 atletas a lo largo del río Sena, la primera versión al aire libre del espectáculo que se espera sea visto por mil millones de personas.
Sin embargo, el evento se vio ensombrecido por un acto de sabotaje criminal que afectó a la red ferroviaria de alta velocidad de Francia en las primeras horas de la mañana y provocó un caos en el transporte en todo el país. Una fuerte lluvia comenzó a caer aproximadamente a los 30 minutos del espectáculo de tres horas, un escenario de pesadilla para los organizadores de la representación teatral que contó con un elenco masivo de bailarines, dos orquestas y un grupo de estrellas del pop, incluida Lady Gaga haciendo una actuación con tintes de cabaret.
“Estamos preparados para este magnífico acontecimiento”, afirmó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, antes de la ceremonia, añadiendo que no se habían detectado amenazas específicas. El sabotaje ferroviario “no tendría consecuencias directas sobre los Juegos Olímpicos ni sobre la ceremonia”.
Lady Gaga lleva el cabaret a la ceremonia de apertura de los Juegos de París en el Sena
A media tarde se habían formado largas filass para que los poseedores de entradas ingresaran al perímetro altamente seguro a lo largo del río Sena, donde se esperan 320.000 espectadores a lo largo de los muelles adoquinados de la época medieval. El formato del evento requirió una fuerte seguridad: 45.000 policías fueron desplegados en tierra y en el aire, utilizando helicópteros, drones y francotiradores colocados en los tejados.
El clima también puso a prueba a las docenas de capitanes de barcos experimentados que impulsaron el desfile, quienes navegaron precisamente a la velocidad adecuada para mantener el espectáculo en línea. Algunos espectadores huyeron de los muelles para refugiarse mientras llovía a cántaros.
El presidente Emmanuel Macron recibió a más de 100 jefes de estado en la plaza Trocadero, al otro lado del río desde la Torre Eiffel, donde los atletas desembarcaron para un desfile final y una actuación esperada por la favorita francófona Céline Dion. Jill Biden, esposa del presidente estadounidense, y otros líderes asistieron previamente a una recepción en el palacio del Eliseo.
El espectáculo de tres horas contó con bailarines de ballet en el tejado del Louvre, mientras que cientos de bailarines modernos y breakdancers actuando en los muelles y en algunos de los barcos. Los artistas lucieron trajes hechos a mano por modistos franceses, incluidos Louis Vuitton y Dior de LVMH.
Cuando Reboul le propuso la idea a Tony Estanguet, jefe del comité organizador de París, el dos veces ganador de la medalla de oro reaccionó con un estupor que rápidamente se convirtió en entusiasmo. “Será ambicioso, audaz y totalmente loco”, afirmó Estanguet recordando el momento.
Aunque los funcionarios se han mostrado vagos sobre el precio, los medios franceses han informado que la ceremonia costará alrededor de 120 millones de euros, es decir unos US$ 130 millones y aproximadamente cuatro veces el costo de la inauguración de los Juegos de Londres 2012. Se espera que el coste total de los Juegos de París, que se presentó como una edición más ecológica porque se construyó poca infraestructura nueva, alcance entre 9.000 y 10.000 millones de euros, según el auditor nacional. Alrededor de un tercio de esa cantidad será costeada por los patrocinadores.