La evolución del mercado laboral se sigue de manera atenta. Las cifras que muestran cualquier movimiento del empleo es analizada por los expertos. Una de ellas es el Índice de Avisos Laborales que publica el Banco Central que muestra cómo está el comportamiento de la oferta de empleo.

En enero, las cifras fueron levemente positivas, aunque todavía lejos de mostrar un repunte. De acuerdo al Banco Central, el indicador se ubicó en 42,5 puntos, lo que se traduce en una caída anual de 26,71%, siendo la menor baja desde junio de 2022. Si se compara con diciembre de 2023, hay un alza de 14,73%.

Si bien esta cifra sigue mostrando que el mercado laboral sigue débil hay una mejor perspectiva de parte de los expertos.

Soledad Monge, economista de LyD, sostiene que “si bien esta cifra corresponde a la menor baja desde 2022, se debe tener presente que, incluso en presencia de menores bases de comparación, la demanda de trabajo por parte de las empresas sigue contrayéndose de manera significativa, lo cual es un indicio de que el mercado laboral continúa débil”.

Similar visión entrega Carmen Cifuentes, investigadora de Clapes UC, quien menciona que “la caída interanual del 26,7% que registraron los avisos laborales por internet en enero de 2024, muestra que la demanda laboral permanece débil”.

José Acuña, Investigador del OCEC-UDP, suma otras antecedentes para evaluar la situación del mercado del trabajo y entrega datos comparativos: “Para poner en contexto las cifras, el promedio histórico del índice en el periodo pre-pandemia fue de 73,2 (desde enero de 2015 a marzo de 2020). Sin embargo, a partir de junio de 2022, el valor promedio fue de 51,92 lo que refleja el menor dinamismo de la demanda del mercado laboral asociado principalmente a una desaceleración de la actividad económica en este periodo”.

Estas cifras van en parte en línea con lo que reveló a fines de la semana la encuesta de empleo que publica mensualmente el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) que mostró que la tasa de desempleo para el trimestre octubre- diciembre llegó a 8,5%, incrementándose 0,6 puntos porcentuales (pp.) en doce meses, pero si se compara con los trimestres inmediatamente anteriores, es la tercera baja alejándose del peak de 9% que se registró en junio-agosto.

Sin embargo, el empleo privado para el trimestre octubre-diciembre repuntó: se crearon 96.614, su mayor alza en tres trimestres, pero fue sostenido por los asalariados informales.

Hacia adelante, la mirada que tienen los expertos es relativamente positiva. En primero lugar, los economistas coinciden en que el deterioro del empleo habría tocado fondo y que ahora comenzará una tenue recuperación en línea con una mejor actividad económica.

“A diferencia del 2022, donde semana a semana vimos una caída en la creación de nuevas ofertas laborales, hemos visto que de noviembre 2023 a la fecha, se ha sostenido la creación y vemos incluso algunos pequeños cambios y mejoras en rubros que se han podido acomodar mejor a esta nueva realidad post pandemia, que han digitalizado su propuesta de valor donde no dependen en gran medida de la confianza de los consumidores”, explica Ramón Rodríguez, gerente general de Trabajando.com.

Acuña subraya que “tomando en cuenta las proyecciones de crecimiento para 2024, es esperable que en los siguientes meses el mercado laboral vaya recuperando dinamismo”. En ese contexto, el investigador del OCEC-UDP acota que “en parte, esto se puede observar también en las cifras agregadas del desempleo cuyo incremento se ha ido desacelerando en los últimos meses”.

Monge asevera que “es altamente probable que el mercado laboral haya tocado fondo en 2023 y en los próximos meses experimente cierta recuperación como lo hemos visto en las últimas dos mediciones”. Sin embargo, aclara que “por el lado de la demanda, este año quedarán en evidencia los efectos de la implementación de la reducción de la jornada laboral, la cual genera un costo adicional en la contratación por parte de las empresas”.

Cifuentes, suma voces para este análisis y comenta que “las proyecciones sugieren que ya habría tocado fondo, y que las cifras de ocupación y desempleo deberían mejorar en 2024, al menos en comparación a 2023. Esta mejora depende fuertemente de que efectivamente se retome la senda del crecimiento, y de una menor incertidumbre que permita estimular la inversión”.

La menor inflación que tuvo diciembre, con un IPC de -0,5% y que llevó a que los precios cerraran en 2023 en 3,9% hizo a que los salarios reales subieron un 1,3% en su variación mensual, su mayor nivel desde enero del 2023, cuando subió lo mismo, y la variación mes a mes volvió a sumar tras que, en noviembre y octubre, la cifra anotó una caída. Asimismo, el INE informó que el índice real de remuneraciones reales –sin inflación- acumuló una variación de 3,6% durante el 2023, anotando 10 alzas consecutivas.

Con esto, la masa salarial, considerando el grupo de asalariados, mostró un alza de 6,4%, su mayor incremento desde junio de 2022.