Observatorio Fiscal evidenció amplias brechas en eficiencia en hospitales y servicios de salud públicos y potencial de incremento de las atenciones en hasta 55%
La capacidad del sistema público para atender las necesidades generales de salud de la población se puso a prueba tras la pandemia llevando a significativos retrocesos en ámbitos como las listas de espera que, incluso, están afectando la resolución de enfermedades cuya cobertura está garantizada.
Para actualizar la situación de la salud pública, la Fundación Observatorio Fiscal -entidad privada sin fines de lucro y autónoma- dio a conocer su primer estudio que compara diagnósticos al sistema realizados en 2019 y 2022 en materia de eficiencia, acceso y calidad, ofreciendo la visión más profunda y actualizada hasta ahora del estado de la red hospitalaria y de la atención primaria (APS) en todo el país, análisis que permiten explicar su actual escenario del sector y aportar a la toma de decisiones.
El estudio compara el estado del sistema de salud chileno en los años previo y posterior a la pandemia. En uno de sus principales conclusiones, establece que si bien el gasto en salud general aumentó en un 14% (cifra que incluye un alza de 23% en la atención primaria principalmente por funciones de seguimiento de casos tras el peak del Covid-19), las prestaciones en 2022 “experimentaron una disminución después del inicio de la pandemia y no han vuelto a recuperar los niveles previos”, lo cual se tradujo en un aumento significativo del retrasos en las atenciones.
En efecto, el análisis precisa que entre los citados años, la lista de espera por consultas de casos de patologías cubiertas por las Garantías Explícitas en Salud (GES) aumentó en 46.389, mientras que en el ámbito NO GES escaló a 75.128 (un 4% más) y en intervenciones quirúrgicas subió en 28.421 (un 10% más). “Si bien los tiempos promedio de retraso y espera comenzaron a reducirse de forma importante en el último año (2022), no han logrado llegar a los niveles previos a 2019 en el periodo prepandemia, esto es, al observar los niveles de consultas médicas APS y de especialidad (hospitalaria), los egresos o altas hospitalarias, y los exámenes médicos preventivos en APS”, detalló.
Los mejores y peores desempeños
El estudio consideró información de servicios de salud de cada región –tanto a nivel de 196 hospitales, como de la atención primaria en 2.400 centros administrados por los municipios-, a partir de la cual estableció una radiografía con 28 indicadores relacionados a las dimensiones de eficiencia, acceso y calidad en salud pública. Para ello, se consideraron fuentes oficiales del Minsal, la Dirección de Presupuestos, la Contraloría General de la República, Fonasa, el Portal de Información Económica en Salud y el Departamento de Estadísticas e Información de Salud.
Así, por ejemplo, concluye que si bien los mejores desempeños de los servicios de salud se observaron en el ítem en calidad, al mismo tiempo esta dimensión presenta una brecha más amplia entre los casos de menores y peores resultados.
Y estas diferencias también se evidencian en términos de eficiencia. Según el nivel de atención (primaria y hospitalaria), el informe observó que “en términos de eficiencia, el desempeño en la atención primaria de salud está por detrás del que muestra la atención hospitalaria, donde la mayor brecha se encuentra en la zona norte, cuyos puntajes globales de la atención primaria se alejan en más de 37 puntos porcentuales con respecto a los puntajes generales de la atención primaria”. En cuanto a indicadores de acceso, registró que los servicios de la zona Norte del país y la Región Metropolitana “arrojaron las mayores diferencias globales entre los niveles de atención, ya que “los puntajes globales de la atención primaria se encuentran casi 20 puntos porcentuales por detrás de la atención hospitalaria”.
En tanto, los resultados del índice vinculados a la dimensión calidad muestran un mejor desempeño relativo de la atención primaria en los servicios de salud de las zonas Metropolitana, centro y sur del país, con un puntaje que supera a la atención hospitalaria de dichos servicios de salud en más de 2, 5 y en hasta 10 puntos porcentuales, respectivamente. Mientras, en los establecimientos de zona norte del país se da la condición contraria, con una evaluación de la atención hospitalaria por sobre la atención primaria en más de 12 puntos.
“El informe fue realizado a partir de datos representativos de la situación en régimen del sistema de salud, previo a la pandemia y posterior a la pandemia. El instrumento midió la atención primaria y hospitalaria dando cuenta de tres grandes ejes -eficiencia, acceso y calidad- con un análisis más integral en términos de los atributos que tiene que tener el sistema de salud. Y llama muchísimo la atención que teniendo los mismos instrumentos para los mismos chilenos, con la misma morbilidad y con las mismas determinantes sociales, los niveles que exhiben las tres dimensiones un servicio y otro, tengan brechas muy importantes en algunos casos”, indicó el dr. Emilio Santelices, ex ministro de Salud y director Médico Corporativo de Clínica MEDS.
Santelices asesoró el trabajo elaborado por el director ejecutivo de la Fundación Observatorio Fiscal, Manuel Henríquez, y en el cual participaron también la Dra. Liliana Jadue, ex asesora de la Organización Panamericana de la Salud y vicedecana de las Carreras de Salud de la UDD, el Dr. Cristián Baeza, director ejecutivo del Centro para el Desarrollo Saludable en el área de Washington DC-Baltimore; José Luis Contreras, Economista Senior en la Comisión Nacional de Productividad, y Raúl Aguilar, Economista Senior del Instituto de Políticas Públicas en Salud (IPSUSS) de la USS.
Las oportunidades de mejora en hospitales
En el caso de la red hospitalaria, la comparación entre los servicios de salud de las distintas zonas geográficas, las mayores diferencias en el desempeño de la atención hospitalaria están en las dimensiones de calidad y acceso a la salud.
El balance estableció que los servicios de salud de la zona sur “reflejan el menor desempeño relativo en la dimensión eficiencia, y se explica por menores resultados en los indicadores relacionados con rendimiento de consultas médicas de especialidades por profesionales contratados, de egresos hospitalarios por cama, y una mayor tasa relativa de hospitalizaciones evitables que deberían ser resueltas en la APS”.
En términos generales, el informe calculó que lograr la corrección en estas brechas permitiría avances como aumentar el nivel de atención de consultas en las zonas centro, sur y metropolitana entre un 27% y hasta un 55% al año, lo cual implica “un aumento de hasta 159 atenciones médicas por profesional médico”. Añade que estrategias exitosas en esta línea permitirían “aumentar en un 18% el nivel de egresos hospitalarios por cama en la zona sur y podría disminuir en alrededor de 5 puntos porcentuales la tasa de hospitalizaciones evitables de los servicios de la zona centro y sur, implicando una reducción en más de 11 mil y 5 mil hospitalizaciones que eviten su ingreso a recintos hospitalarios y que sean atendidos en la APS”.
Asimismo, revertir los menores niveles de acceso evidenciados en los servicios de salud de la zona centro y sur del país permitía beneficios como disminuir el número de casos GES retrasados y de casos en lista de espera No GES por cada 10 mil habitantes más de un 60% en la zona centro y sur, y disminuir los tiempos promedio de retraso GES y de listas de espera No GES en un 44%.
En otra de las brechas identificadas en el estudio, en el caso de los hospitales de la Región Metropolitana se puntualiza que revertir la tasa general de cirugías suspendidas en 2022 podría implicar una disminución en la tasa de suspensión de cirugías de entre 2,8 y 3,3 puntos porcentuales en la zona centro y Metropolitana, implicando un aumento de las cirugías programadas y efectivamente realizadas de entre 3.600 hasta 4.100 al año. En el caso de los pacientes que esperan más de 12 horas en una Unidad de Emergencia, reducir estas tasas de pacientes en los hospitales de la Región Metropolitana se traduciría en más de 29.800 pacientes al año que verían reducida significativamente sus tiempos a la espera de camas.
Recomendaciones para la atención primaria
El estudio observó diferencias significativas en eficiencia y sobretodo, en calidad de salud, se observan diferencias significativas donde destacó “la significativa brecha que muestran los servicios de salud de la zona norte, donde sus puntajes globales en esta dimensión de atención primaria se alejan en más de 24 puntos con respecto a los puntajes de los servicios con mejor desempeño”, resultado que se explica por la tasa de consultas médicas por profesional médico contratado en APS, la cual está por debajo en la zona norte en más de un 52% respecto a los servicios de la zona sur (mejor desempeño).
A partir de este diagnóstico, el informe recomienda que la atención primaria de la zona norte del país “podría incrementar su tasa de consultas médicas por médico en más de 550 atenciones adicionales al año por cada profesional médico”.
Y en el caso de la APS, si se lograra resolver el menor desempeño visto en los servicios de la zona norte del país y la Región Metropolitana -explicado por una menor tasa de consultas médicas resueltas en dicho nivel de atención y por una menor tasa de niños y niñas menores de 10 años en control sin sobrepeso u obesidad- concluye que se podrían incrementar los niveles de resolutividad en 2 puntos porcentuales, alcanzando a más de 30 mil consultas y controles adicionales a resolverse en el nivel primario; y aumentar en más de 25 puntos porcentuales la tasa de niños y niñas en situación de normalidad en su estado nutricional, respectivamente.
Las conclusiones
“El estudio demuestra que en las tres dimensiones relevantes para el sistema de salud – eficiencia, acceso y calidad- hay oportunidades de mejora. En el caso de la eficiencia, ésta se midió a partir de indicadores como tasas de utilización de camas disponibles, de pabellones quirúrgicos y consultas médicas por profesional, junto al número de egreso de altas hospitalarias. Y en acceso, los indicadores fueron los números de casos de garantía retrasada en casos GES, casos no GES en lista de espera, tasa de visitas domiciliarias, exámenes médicos preventivos y porcentaje de pacientes que según su complejidad debieron haberse atendido en el nivel primario”, explicó el dr. Santelices.
-¿Qué observaciones del estudio llaman la atención en términos de calidad?
-En términos de tasa de consultas médicas resueltas en la atención primaria –lo cual corresponde a capacidad de resolución- sabemos que, por ejemplo, en la atención primaria en el servicio de salud de Arica estaba muy bajo, en alrededor de un 13%. Entonces uno tiene que preguntarse por qué, cuáles son las capacidades de los profesionales? ¿Cuáles son sus competencias? Entonces de ahí se puede empezar a diseñar intervenciones que pudieran mejorar esos indicadores para el futuro.
Nuevo Pudahuel, operador del Aeropuerto de Santiago, anunció este viernes el inicio de operaciones de Turkish Airlines.
A partir de diciembre, la aerolínea turca iniciará sus operaciones para conectar la capital de Chile y Estambul.
Con cuatro frecuencias semanales, el vuelo se realizará vía Sao Paulo en un Airbus A350-900, con capacidad para 324 asientos. Por esto, el servicio ofrecerá una capacidad de 2.600 pasajeros por semana.
A través de un comunicado, Nuevo Pudahuel expresó “su gran satisfacción de recibir a Turkish Airlines, por el gran alcance que dará su extensa red de conexiones, a los pasajeros que viajen desde y hacia Santiago”.
La startup tecnológica de conducción autónoma WeRide presentó su solicitud para lo que podría ser la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) de una empresa china en Estados Unidos desde la desastrosa cotización de la empresa de viajes compartidos Didi Global, en 2021.
WeRide dijo en una presentación este viernes que puede enfrentar “varios riesgos e incertidumbres legales y operativos asociados con tener nuestra sede o nuestras operaciones principalmente en China continental”. La compañía no revelará el número ni el rango de precios propuesto para sus Acciones Depositarias Estadounidenses (ADR, sigla en inglés) hasta que esté lista para comenzar a comercializarlas.
WeRide, constituida en las Islas Caimán, solicitó de forma confidencial una OPI con un plan para recaudar hasta US$ 500 millones, informó Bloomberg News el año pasado. Después de que la OPI de Didi por valor US$ 4.440 millones provocara una ofensiva por parte de Beijing contra las empresas con datos confidenciales que vendían acciones en el extranjero, los listamientos en Estados Unidos de empresas con sede en China se habían estancado.
En su presentación ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, sigla en de EEUU), WeRide dijo que tuvo una pérdida de US$ 268 millones de sobre ingresos de US$ 55 millones el año pasado.
Fundada en 2017, WeRide desarrolla tecnología de conducción autónoma y la está probando o implementando comercialmente en 30 ciudades en siete países, dijo en el documento. WeRide produce vehículos que incluyen robotaxis, minibuses, furgonetas y barredoras de calles, además de sus soluciones de software y hardware para conducción autónoma.
Según el documento, el actual inversor Renault-Nissan-Mitsubishi Alliance acordó comprar acciones en la OPI en una colocación privada.
La oferta está dirigida por Morgan Stanley, JPMorgan Chase y China International Capital. La compañía planea que sus ADR coticen en el mercado de valores Nasdaq con el símbolo WRD.
La espectacular ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París comenzó el viernes por la noche con una flota de barcos que transportaban a 10.500 atletas a lo largo del río Sena, la primera versión al aire libre del espectáculo que se espera sea visto por mil millones de personas.
Sin embargo, el evento se vio ensombrecido por un acto de sabotaje criminal que afectó a la red ferroviaria de alta velocidad de Francia en las primeras horas de la mañana y provocó un caos en el transporte en todo el país. Una fuerte lluvia comenzó a caer aproximadamente a los 30 minutos del espectáculo de tres horas, un escenario de pesadilla para los organizadores de la representación teatral que contó con un elenco masivo de bailarines, dos orquestas y un grupo de estrellas del pop, incluida Lady Gaga haciendo una actuación con tintes de cabaret.
“Estamos preparados para este magnífico acontecimiento”, afirmó el ministro del Interior, Gérald Darmanin, antes de la ceremonia, añadiendo que no se habían detectado amenazas específicas. El sabotaje ferroviario “no tendría consecuencias directas sobre los Juegos Olímpicos ni sobre la ceremonia”.
Lady Gaga lleva el cabaret a la ceremonia de apertura de los Juegos de París en el Sena
A media tarde se habían formado largas filass para que los poseedores de entradas ingresaran al perímetro altamente seguro a lo largo del río Sena, donde se esperan 320.000 espectadores a lo largo de los muelles adoquinados de la época medieval. El formato del evento requirió una fuerte seguridad: 45.000 policías fueron desplegados en tierra y en el aire, utilizando helicópteros, drones y francotiradores colocados en los tejados.
El clima también puso a prueba a las docenas de capitanes de barcos experimentados que impulsaron el desfile, quienes navegaron precisamente a la velocidad adecuada para mantener el espectáculo en línea. Algunos espectadores huyeron de los muelles para refugiarse mientras llovía a cántaros.
El presidente Emmanuel Macron recibió a más de 100 jefes de estado en la plaza Trocadero, al otro lado del río desde la Torre Eiffel, donde los atletas desembarcaron para un desfile final y una actuación esperada por la favorita francófona Céline Dion. Jill Biden, esposa del presidente estadounidense, y otros líderes asistieron previamente a una recepción en el palacio del Eliseo.
El espectáculo de tres horas contó con bailarines de ballet en el tejado del Louvre, mientras que cientos de bailarines modernos y breakdancers actuando en los muelles y en algunos de los barcos. Los artistas lucieron trajes hechos a mano por modistos franceses, incluidos Louis Vuitton y Dior de LVMH.
Cuando Reboul le propuso la idea a Tony Estanguet, jefe del comité organizador de París, el dos veces ganador de la medalla de oro reaccionó con un estupor que rápidamente se convirtió en entusiasmo. “Será ambicioso, audaz y totalmente loco”, afirmó Estanguet recordando el momento.
Aunque los funcionarios se han mostrado vagos sobre el precio, los medios franceses han informado que la ceremonia costará alrededor de 120 millones de euros, es decir unos US$ 130 millones y aproximadamente cuatro veces el costo de la inauguración de los Juegos de Londres 2012. Se espera que el coste total de los Juegos de París, que se presentó como una edición más ecológica porque se construyó poca infraestructura nueva, alcance entre 9.000 y 10.000 millones de euros, según el auditor nacional. Alrededor de un tercio de esa cantidad será costeada por los patrocinadores.