Este Viernes, Ministerio de Salud registró 2.182 nuevos casos de Covid-19, con positividad de 4,47% en las últimas 24 horas a nivel nacional, con 46.891 exámenes, PCR y test de antígenos. La positividad diaria en la Región Metropolitana es de 6,42%.
La variación de nuevos casos confirmados a nivel nacional es de -7% y -38% para la comparación de siete y 14 días, respectivamente. Mientras tanto, 14 regiones han disminuido sus casos en los últimos siete días y 15 en las últimas 2 semanas.
El total de personas que han sido diagnosticadas con Covid-19 en el país asciende a 3.556.333. De este total, 8.617 pacientes se encuentran en etapa activa.
En cuanto a las defunciones, de acuerdo con la información brindada por el DEIS, en las últimas 24 horas hubo 14 defunciones por causas asociadas al coronavirus. El total de fallecidos asciende a 57.509 en el país.
Los economistas de Citigroup Inc. se arriesgan a apostar que prácticamente todo el mundo en Wall Street está equivocado sobre la Reserva Federal.
Después de tres meses seguidos de lecturas de inflación ligeramente más rápidas de lo esperado, los expertos de Bank of America Corp, Goldman Sachs Group, Morgan Stanley y otros bancos han reducido sus proyecciones de recortes de tasas de interés para este año. El presidente de la Fed, Jerome Powell, apoyó estos movimientos el martes, cuando señaló que las autoridades no tienen prisa por relajar la política monetaria.
Sin embargo, Andrew Hollenhorst y Veronica Clark, de Citigroup, afirman que precipitarse en emitir juicios es erróneo, porque a la Fed le sigue preocupando que la racha sorprendentemente fuerte de crecimiento económico pueda estancarse. En consecuencia, ambos mantienen su proyección de cinco recortes de un cuarto de punto este año, y afirman que los responsables de la política monetaria están ansiosos por aprovechar cualquier señal de desinflación o debilidad económica.
“Hemos estado pensando en la trayectoria de la economía en 2024 de manera muy diferente a la de otros analistas”, dijo Hollenhorst en una entrevista, quien ha incorporado de forma constante expectativas de inflación rígidas en sus estimaciones de este año. “Creemos que la función de reacción de la Fed es mucho más dovish que el consenso”.
El pronóstico del banco contrasta con el sentimiento general de los mercados financieros, donde los rendimientos de los bono se dispararon después de que el índice de precios al consumidor publicado la semana pasada llevara a los inversionistas a revisar las expectativas. En el mercado de derivados, los operadores descuentan una probabilidad de alrededor del 10% de un primer recorte de tasas en junio y dudan que la Fed realice siquiera dos reducciones de un cuarto de punto este año.
Sin embargo, en los últimos años, los mercados han tenido sistemáticamente dificultades para predecir hacia dónde se dirige la Fed, subestimando tanto el grado de endurecimiento como la rapidez con que revertirá el rumbo. Si los economistas de Citigroup están en lo cierto, el último giro puede ser solo otro paso en falso.
En su opinión, la clave está en las próximas lecturas del índice subyacente de gastos de consumo personal, una medida de inflación preferida por la Fed. Los economistas de Citigroup esperan que revele cierto enfriamiento de la presión sobre los precios. Si el índice muestra aumentos mensuales de solo el 0,25% en marzo y abril —aproximadamente donde estaba en febrero— la Fed encontrará “cobertura para empezar a ajustar ‘gradualmente’ las tasas de interés a la baja a partir de junio o julio”, dijeron los economistas.
Citi también espera que la Fed dé más importancia a cualquier señal de debilidad económica —como una desaceleración del mercado laboral— que a los datos que muestran una fortaleza continua, dado lo que consideran un sesgo dentro del banco hacia una política de relajación.
“A pesar de una declarada falta de ‘urgencia’, el presidente Powell y el comité están ansiosos por comenzar a ajustar las tasas de política a la baja”, escribieron Hollenhorst y sus colegas en una nota publicada el miércoles. “La asimetría dovish de la función de reacción de la Fed parece subvalorada por los mercados de tasas de interés”.
Santander realizó esta tarde su junta ordinaria de accionistas, instancia en la que sus participantes aprobaron repartir el equivalente al 70% de las utilidades de 2023, ascendente a la suma de un poco más $ 347.482 millones, lo que se traduce en poco más de US$ 355 millones.
En ese escenario, el presidente del banco, Claudio Melandri, abordó la coyuntura nacional y expresó que “el retorno de los equilibrios macroeconómicos en 2024 reabrirá el debate en Chile sobre el potencial de crecimiento de largo plazo de la economía”.
Para Melandri, “actualmente tenemos desafíos de productividad y de inversión para poder elevar el crecimiento tendencial del PIB. Este ha venido a la baja y se ubica entre 2% y 2,5%”.
Melandri enfatizó que “si como nación queremos resolver los problemas en educación, salud y otras razonables demandas, es muy necesario retomar una senda de expansión de nuestra economía. Sin crecimiento, no podremos alcanzar los objetivos que nos planteamos como país y limita la posibilidad de ampliar beneficios sociales”.
Por su parte, el gerente general y country head de Santander Chile, Román Blanco, recordó que la entidad invertirá US$ 800 millones en los próximos años. De este monto, US$ 350 millones se destinarán al nuevo edificio corporativo que se está construyendo en la comuna de Las Condes. Los US$ 450 millones restantes se destinarán a iniciativas de tecnología y renovación de sucursales.
Desempeño del banco
Blanco dedicó palabras a la performance de la compañía en el mercado bursátil. Destacó que “la acción del banco ha tenido un desempeño excelente, siendo la del sistema financiero que más se ha revalorizado (un 35,8% incluyendo dividendos) frente al mercado (17,8% del IPSA). Esto refleja nuestra posición sólida y las perspectivas de generación de valor futuro”.
El ejecutivo se refirió también a los principales hitos alcanzados por el banco durante el ejercicio recién pasado, como la cuenta “Más Lucas”, que ha permitido captar más de 160.000 clientes y la puesta en marcha de un nuevo formato de tipo de sucursal denominado Work/Café Expresso.
El acuerdo anunciado esta semana por la minorista Falabella para vender su negocio de tiendas departamentales en Perú a MallPlaza representa un avance importante en el proceso de reducción de su apalancamiento, dijo el miércoles Itaú BBA.
Falabella, una de las mayores cadenas minoristas en Sudamérica, dijo el lunes que venderá Falabella Perú a la operadora de centros comerciales MallPlaza en un acuerdo valorizado en US$ 848 millones.
Falabella Perú controla la totalidad de operaciones de Open Plaza Perú y el 66,6% de Mallplaza en ese país.
En un reporte, Itaú BBA dijo que consideraba el acuerdo como “consistente con las expectativas del mercado, en vista de la racional desinversión de Falabella de sus activos en Perú para desapalancarse”.
“Esperamos que la mejora en los ratios (de deuda) sea en gran medida impulsada por mayores expectativas de EBITDA para este año”, añadió.
Las acciones de Falabella anotaron el miércoles una ganancia cercana al 0,6% en la bolsa chilena.